Redondo renuncia a ser candidato tras denunciar "una cacer¨ªa" contra ¨¦l
El abandono del ex secretario de los socialistas vascos da v¨ªa libre a la Ejecutiva para buscar el consenso
El ex secretario general de los socialistas vascos, Nicol¨¢s Redondo Terreros, tir¨® ayer la toalla en Portugalete (Vizcaya), la agrupaci¨®n que le vio nacer pol¨ªticamente. Redondo anunci¨® all¨ª que no se presentar¨¢ a la reelecci¨®n en el congreso extraordinario que el PSE-EE celebrar¨¢ en marzo para evitar seguir sometiendo a su formaci¨®n a tanto 'estr¨¦s y presi¨®n' por la 'cacer¨ªa' de la que, seg¨²n ¨¦l, ha sido objeto desde dentro de su propio partido al difundirse, por ejemplo, sus almuerzos con el presidente Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar o con el ex dirigente socialista condenado por los GAL y pr¨®ximo al PP, Ricardo Garc¨ªa Damborenea.
El ex l¨ªder del PSE admiti¨® que se equivoc¨® en diciembre pasado cuando dimiti¨® de su cargo para abrir un 'debate de ideas y de proyecto pol¨ªtico' en su partido, porque desde entonces, dijo, ese debate ha brillado por su ausencia y, por contra, se ha abierto una 'cacer¨ªa' interna con el '¨²nico objetivo de hacerle desistir', algo que finalmente han logrado. Redondo se pregunt¨® 'd¨®nde han quedado aquellas propuestas de debates sin l¨ªmites, de debates sobre todos los conceptos de la propuesta nacionalista', en alusi¨®n al bloque que han conformado ya dirigentes vizca¨ªnos y guipuzcoanos y que aspira a ganar el c¨®nclave de marzo.
'Nicol¨¢s sabe que sus problemas no estaban en Madrid y quiz¨¢ alg¨²n d¨ªa lo reconozca'
Pese a su renuncia, Redondo calific¨® como una 'victoria de las ideas y los principios' el que la gestora que encabeza su antecesor en la secretar¨ªa general del PSE, Ram¨®n J¨¢uregui, haya incluido en la ponencia del congreso 'muchas' de las ideas que ¨¦l ha venido defendiendo desde que el PSE abandon¨® el Gobierno vasco en 1997 por la 'deriva soberanista' del PNV. J¨¢uregui asegur¨® ayer comprender la decisi¨®n de Redondo y agreg¨® que hay que 'seguir contando con ¨¦l como una referencia para el socialismo vasco'.
El ex l¨ªder del PSE acudi¨® puntualmente a mediod¨ªa a la Casa del Pueblo de Portugalete con su esposa y su hija Marina -'lo que m¨¢s quiero junto mi partido'-. La sonrisa de su esposa contrastaba con el semblante serio de Redondo y de sus colaboradores directos, que no descartaban ya a esa hora que anunciara su retirada tras conocerse el ¨²ltimo almuerzo pol¨¦mico de Redondo con Damborenea y el ex gobernador civil de Vizcaya I?aki L¨®pez. El ex secretario general neg¨® que se haya reunido con ambos tras su dimisi¨®n.
A esa hora, muy pocas personas conoc¨ªan las intenciones de Redondo. Una era el l¨ªder del PSOE, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, a quien inform¨® previamente. Lo mismo hizo con el presidente de la Junta de Andaluc¨ªa y del PSOE, Manuel Chaves, y el diputado Alfredo P¨¦rez Rubalcaba.
En el interior de la sede le esperaban un pu?ado de viejos militantes de la Margen Izquierda. Seg¨²n subi¨® las escaleras, Redondo se encontr¨® de golpe con su pasado reciente, el ¨²ltimo cartel del PSE para las auton¨®micas con el lema Cambio y libertad. Pero tambi¨¦n con el pasado de persecuci¨®n contra el socialismo vasco: una fotograf¨ªa del senador Enrique Casas, asesinado por los Comandos Aut¨®nomos en 1983, y una placa conmemorativa de los dos militantes -F¨¦lix Pe?a y Maite Torrano- asesinados por el fuego de varios c¨®cteles m¨®lotov en ese mismo lugar en 1987. A esa persecuci¨®n de las ideas dedic¨® Redondo sus primeras palabras y a 'la falta de libertad que existe en este pa¨ªs', a su juicio lo m¨¢s importante, pese a que los medios de comunicaci¨®n 'hayan dado m¨¢s relevancia' a sus almuerzos con Aznar o Garc¨ªa Damborenea.
Ante la 'cacer¨ªa' desatada, asegur¨® que s¨®lo ten¨ªa dos opciones: 'resistir' a costa de desgastar al partido o renunciar, decisi¨®n esta ¨²ltima que ha tomado para evitar 'argentinizar a la comunidad socialista'. Y se conjur¨® como militante socialista para seguir defendiendo la libertad, la Constituci¨®n y el Estatuto junto con 'los ciudadanos comprometidos con la izquierda democr¨¢tica'. Todas las familias socialistas respetaron su determinaci¨®n, aunque sus principales valedores en Vizcaya, ahora hu¨¦rfanos, acusaron al actual l¨ªder vizca¨ªno, Patxi L¨®pez; al guipuzcoano Manuel Huertas, al Grupo Prisa y a Ferraz -el cuartel general del PSOE en Madrid- de forzar la salida de Redondo.
Precisamente las m¨¢s altas instancias de Ferraz trataron ayer de desmarcarse de lo ocurrido. El equipo que dirige Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero neg¨® una y otra vez haber provocado la ca¨ªda de Redondo, aunque, una vez producida, no oculta que esa decisi¨®n facilita, desde la perspectiva de Madrid, la b¨²squeda de un l¨ªder que pueda integrar a todo el partido y sintetice las diferentes sensibilidades pol¨ªticas del PSE-PSOE. Aunque muestran preocupaci¨®n por el peso que pueda tener la opini¨®n de quienes piensan que se han utilizado malas artes contra Redondo, en la direcci¨®n federal se insiste en que las informaciones que le han perjudicado han partido siempre de sus 'detractores' en el Pa¨ªs Vasco. En este sentido, apostillan: 'Nicol¨¢s sabe que sus problemas no estaban en Madrid y quiz¨¢ alg¨²n d¨ªa lo reconozca'. Lo cierto es que la renuncia ayer de Redondo se produce tres d¨ªas despu¨¦s de que el pol¨ªtico vasco y el secretario de organizaci¨®n, Jos¨¦ Blanco, acordaran en Madrid actuar con 'lealtad y transparencia'. La Ejecutiva Federal emiti¨® un comunicado en el muestra su respeto por la decisi¨®n de Redondo al tiempo que evidencia cierto alivio.
La Ejecutiva tendr¨¢ hoy una impresi¨®n cabal de c¨®mo los militantes socialistas vascos han percibido toda esta peripecia, ya que Rodr¨ªguez Zapatero tiene previsto reunirse en San Sebasti¨¢n con cientos de militantes socialistas vascos. El secretario general del PSOE acudir¨¢ acompa?ado por el secretario de Organizaci¨®n, Jos¨¦ Blanco, el portavoz parlamentario, Jes¨²s Caldera y el responsable de Pol¨ªtica Municipal, ?lvaro Cuesta. Todos abogar¨¢n por el consenso, que, por el momento, no est¨¢ personificado en ning¨²n candidato.
M¨¢ximo 'respeto y afecto'
A primera hora de la tarde de ayer la Ejecutiva Federal del PSOE emiti¨® un comunicado, de m¨¢ximo respeto y con algunas valoraciones de elogio, hacia el ex secretario general del PSE Nicol¨¢s Redondo, pero qued¨® en evidencia que no hay disgusto sino m¨¢s bien alivio por su decisi¨®n.
'La Ejecutiva federal quiere expresar su m¨¢ximo respeto a la decisi¨®n adoptada por Nicol¨¢s Redondo de no presentarse a la reelecci¨®n en el pr¨®ximo congreso de los socialistas vascos. El mismo respeto con que esta direcci¨®n acogi¨® hace unas semanas su decisi¨®n de dimitir en su cargo', se lee en ese texto.
La nota contin¨²a elogiando el trabajo pol¨ªtico de Redondo en momentos de gran dificultad con un comportamiento 'valiente y firme en la defensa de los valores socialistas', y se destaca la 'generosidad' de Redondo al haber afirmado que se sirve a los valores socialistas 'desde cualquier lugar'.
A continuaci¨®n ya se habla del futuro y se muestra el m¨¢ximo apoyo y respeto al trabajo que est¨¢ realizando la gestora en la seguridad de que conducir¨¢ a los socialistas vascos a un congreso de unidad e integraci¨®n.
El objetivo de ese congreso debe ser 'la consolidaci¨®n de un proyecto pol¨ªtico que ser¨¢ el mejor instrumento para la defensa de la Constituci¨®n, el Estatuto de Autonom¨ªa, las libertades, los valores c¨ªvicos y la convivencia en paz en el Pa¨ªs Vasco'.
Todav¨ªa resulta imposible para la Ejecutiva poner nombre y apellidos a ese candidato ideal que pueda aglutinar a todos los socialistas vascos. Si hace 15 d¨ªas se pens¨® en Patxi L¨®pez, despu¨¦s se ha invocado con discreci¨®n el nombre del dirigente alav¨¦s Javier Rojo, estrecho amigo de Rodr¨ªguez Zapatero, pero especialmente disgustado por los episodios que han rodeado a Nicol¨¢s Redondo hasta su renuncia.
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