La tecnolog¨ªa devuelve el brillo a la piel

La tecnolog¨ªa puesta al servicio de la piel est¨¢ dando ahora sus mejores frutos, tanto en la versatilidad de la materia como en el logro de nuevas texturas, nuevos colores y sorprendentes efectos visuales. El envejecimiento de la materia o la similitud de algunas pieles con tejidos como la pana o el denim, se colocan tambi¨¦n en la pista de despegue. Pero puede que lo m¨¢s singular de la pr¨®xima temporada oto?o-invierno, cuyas tendencias se presentaron este fin de semana en Barcelona en el marco del Sal¨®n Pielespa?a, sea el brillo espectacular de las napas, que con efectos brillantes y envejecidos, vuelven a funcionar como aut¨¦nticos comodines de guardarrop¨ªa.

El inter¨¦s de los grandes dise?adores del pr¨ºt-¨¤-porter por estos materiales y la controversia suscitada dentro y fuera del sector por los distintos grupos ecologistas, han puesto de actualidad las prendas confeccionadas en piel. Las apuestas -que tienden a ser globales, pues en piel ya se confecciona hasta la ropa interior-, no se mojan demasiado con el color: aunque a la luz de los focos brillen tonos naranjas o azules, incluso en prendas de pelo, predomina la gama de los marrones, rojos, burdeos y negros, apostando as¨ª por lo seguro.

Con dos desfiles diarios -uno con las propuestas de las firmas participantes en la exposici¨®n, y otro con los dise?os del colectivo Balears ¨¦s Moda, patrocinado por el Consell Insular-, en esta 21? edici¨®n de Pielespa?a, que ha contado con 151 expositores, se han apuntado las tendencias de corte siberiano en las prendas confeccionadas con doble faz, napas envejecidas, pero con mucho brillo, y antes tan ligeros como telas de algod¨®n. Entre las prendas femeninas destaca el traje pantal¨®n, o la americana combinada con faldas o vestidos. Volvemos a caer en la d¨¦cada de los ochenta con solapas que crecen, abrigos que se alargan y se ci?en con anchos cinturones y algunos adornos vuelven a recuperar las tachuelas. El g¨¦nero masculino tambi¨¦n se ve arropado por chaquetas de napa, camisas de ante, pantalones de nobuk y abrigos largos y con grandes solapas. La cazadora tiende a pasar a un segundo plano.