La crisis econ¨®mica une a Boca y River
Los dos clubes m¨¢s populares de Argentina estudian medidas para no hundirse
El Titanic se hunde. Los dos ¨²ltimos pasajeros de la primera clase se arrojan de cabeza al oc¨¦ano negro de la realidad. Desesperados, nadan hasta un bote de goma que pierde aire por los cuatro costados, se acomodan all¨ª, se miran y se reconocen. Mauricio Macri, el presidente del Boca Juniors, empresario y promotor de la apertura de los clubes del f¨²tbol argentino a los capitales privados, se encuentra con Jos¨¦ Mar¨ªa Aguilar, el nuevo presidente del River Plate, abogado, defensor de las sociedades actuales, 'sin fines de lucro'. S¨®lo una crisis econ¨®mica tan grave como la que atraviesa Argentina podr¨ªa haber causado el milagro de que los dirigentes de los equipos m¨¢s populares del pa¨ªs, hist¨®ricos enemigos, se re¨²nan para discutir y pactar medidas de austeridad que imponer luego a los dem¨¢s.
Fue Macri quien tom¨® la iniciativa. Telefone¨® a Aguilar y le dijo que no ten¨ªa problemas en ir al campo del River. El heredero de un poderoso grupo empresario no oculta ya sus ambiciones pol¨ªticas. A¨²n no decidi¨® si se postular¨¢ para jefe de Gobierno de Buenos Aires o, directamente, para la presidencia de la naci¨®n, pero hace tiempo que trabaja ya de candidato. Aguilar lleva un mes como presidente del River y es militante de la Uni¨®n C¨ªvica Radical, ahora derrotada y en la oposici¨®n.
Macri no podr¨ªa aspirar a nada si no se reconciliase con los aficionados del River, a los que hasta hace poco llamaba 'los innombrables'. Aguilar es el m¨¢ximo responsable de un club con 2,16 millones de euros de d¨¦ficit mensual y puede aprovecharse de la experiencia de Macri, que en los cinco a?os que lleva en el Boca redujo el pasivo y, de la mano del t¨¦cnico Carlos Bianchi, consigui¨® todos los t¨ªtulos posibles. Con sensatez, Macri le dijo: 'Los domingos seremos enemigos como siempre, pero trabajemos juntos en la semana. Representamos al 70% de los aficionados'.
Los dos coincidieron en que la crisis es una oportunidad para desmontar la organizaci¨®n actual del f¨²tbol argentino. El Torneo Clausura de la Liga, que debe comenzar el 8 de febrero, est¨¢ en duda. Los representantes del sindicato de los futbolistas amenazan con convocar una huelga si los clubes no pagan sus deudas antes de que se inicie el campeonato, tal y como se acord¨® tras el paro de agosto pasado. Los atrasos llegan a cinco meses de salarios.
Macri cree que 'la dimensi¨®n de la crisis que atraviesa el pa¨ªs cambia completamente las cosas'. Su discusi¨®n con Aguilar apunta a convertir a pesos todos los contratos en d¨®lares que tienen con sus plantillas; fijar un tope para sueldos, primas y premios; reclamar la rebaja de impuestos y del coste de la seguridad que se paga a la polic¨ªa; renegociar el contrato por los derechos de televisi¨®n que la AFA concedi¨® a una empresa hasta 2014, y pedir a los futbolistas que concedan un plazo a los clubes para pagar parte de sus deudas.
Mientras tanto, el Racing gan¨® ayer al Boca (1-0) la Copa Mar del Plata, el torneo de verano m¨¢s importante. Las dos hinchadas se enfrentaron a balazos antes del partido y hubo 40 detenidos y un herido.
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