El TSJ paraliza las expropiaciones para prolongar Blasco Ib¨¢?ez a trav¨¦s de El Cabanyal
La decisi¨®n, que no se ha adoptado por unanimidad, necesit¨® de tres sesiones de deliberaci¨®n
El pleno de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) valenciano acord¨® ayer dictar auto de paralizaci¨®n del proceso de expropiaciones previsto en el plan especial de intervenci¨®n en el barrio de El Cabanyal-Canyamelar. Con este plan urban¨ªstico, el Ayuntamiento de Valencia, gobernado por la popular Rita Barber¨¢, pretende prolongar la avenida de Blasco Ib¨¢?ez hasta el mar, dividiendo en dos el tradicional barrio de pescadores y eliminando un total de 1.651 viviendas. La paralizaci¨®n definitiva del proceso de expropiaciones queda a expensas del resultado del contencioso-administrativo interpuesto por los vecinos, que se puede dilatar varios a?os.
La decisi¨®n de los 12 magistrados que componen la citada sala del TSJ ha necesitado de tres sesiones de intensas deliberaciones, a pesar de lo cual no ha sido posible conseguir la unanimidad. La Sala de lo Contencioso-Administrativo concluy¨® a primera hora de la tarde de ayer, con una decisi¨®n favorable a la paralizaci¨®n del proceso de expropiaciones, unas deliberaciones que se iniciaron el mi¨¦rcoles de la semana pasada y continuaron el viernes. El auto que decreta la paralizaci¨®n del proceso de expropiaciones est¨¢ previsto que se pueda comunicar hoy a las partes implicadas.
La decisi¨®n de la sala forma parte de una pieza separada del recurso contencioso-administrativo contrario a la legalidad del plan especial de intervenci¨®n de El Cabanyal-Canyamelar aprobado por el Ayuntamiento en febrero de 1999. La petici¨®n de paralizaci¨®n del proceso de expropiaciones, presentado a trav¨¦s de la Federaci¨®n de Asociaciones de Vecinos, se basa en el argumento de que el perjuicio ser¨ªa irreversible a¨²n en el caso de que prospere el recurso contencioso-administrativo y se declare ilegal el plan urban¨ªstico de remodelaci¨®n de El Cabanyal.
A pesar de que los servicios jur¨ªdicos de la Generalitat -las consejer¨ªas de Cultura y Obras P¨²blicas han autorizado el plan municipal del Ayuntamiento de Valencia- insistieron en que el momento procesal para pedir la paralizaci¨®n del proceso de expropiaciones no era el adecuado, es evidente que la magnitud del proyecto ha pesado en la decisi¨®n de los magistrados. Los abogados de la Generalitat aduc¨ªan que la petici¨®n de paralizaci¨®n deb¨ªa solicitarse en el momento de la reparcelaci¨®n o de la adjudicaci¨®n de las obras.
El plan urban¨ªstico impulsado por Rita Barber¨¢ para prolongar la avenida de Blasco Iba?ez hasta el mar afecta a un total de 1.651 viviendas de un barrio catalogado como Bien de Inter¨¦s Cultural por la Generalitat en 1993.
Las dimensiones del proyecto, para el cual la propia Generalitat ya ha previsto dotaci¨®n presupuestaria, han generado numerosas dificultades al equipo de gobierno municipal, que ha tenido problemas para encontrar un gerente que desde la oficina del plan en el propio barrio de El Cabanyal impulse el proceso de expropiaciones y la compra de los inmuebles afectados.
La oposici¨®n vecinal tambi¨¦n ha sido un factor determinante hasta ahora en este conflicto. Los vecinos opuestos a lo que consideran la destrucci¨®n de su barrio reclaman inversiones municipales que frenen el deterioro de sus calles y se han organizado en la plataforma c¨ªvica Salvem El Cabanyal-Canyamelar, que lleva varios a?os con actuaciones de distinto tipo para defender su posici¨®n y que ha logrado el apoyo de urbanistas y arquitectos en sus reivindicaciones patrimoniales como barrio hist¨®rico.
Las peticiones vecinales tambi¨¦n han recibido un dictamen favorable del S¨ªndic de Greuges, que cuestion¨® la legalidad del proyecto y que levant¨® una polvareda pol¨ªtica entre el Partido Popular y la adjunta de la Sindicatura de Greuges.
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