'Este disco cuenta m¨¢s que cualquier cr¨®nica'
Eduardo Teddy Bautista Garc¨ªa (Las Palmas de Gran Canaria, 1943) fue el l¨ªder del grupo Los Canarios, cuya canci¨®n Get on your knees es el primer corte de la cuarta entrega de la colecci¨®n Un Pa¨ªs de M¨²sica 2. Bajo el t¨ªtulo de Los a?os del 600 (II), este disco resume en doce canciones lo que fue la Espa?a musical en la segunda mitad de los sesenta.
Bautista posee una dilatada trayectoria musical. Como compositor, se ha movido por todos los estilos, desde el rock al serialismo, del g¨®spel a las m¨²sicas ¨¦tnicas y la m¨²sica electr¨®nica, en una carrera de m¨¢s de 40 a?os. Interpret¨® a Judas en la versi¨®n espa?ola de Jesucristo Superstar y ha dirigido otras comedias musicales, como The rocky horror show, My fair lady y Anny, en Espa?a, y Two gentlemen of Verona, en Reino Unido y Estados Unidos. Ha sido profesor titular del Public Acces Sinthesizer Studio en Nueva York y es el responsable de cientos de sonidos que reproducen los sintetizadores m¨¢s famosos del mercado. Abandon¨® su carrera como int¨¦rprete para dedicarse a la gesti¨®n. Actualmente es presidente del consejo de direcci¨®n de la SGAE (Sociedad General de Autores y Editores).
'?ramos cuatro chicos de provincias que de pronto nos vimos en Nueva York grabando en los estudios de la RCA'
Pregunta. En los sesenta, la mayor¨ªa de los grupos copiaba lo que llegaba de fuera; sin embargo, usted y Los Canarios deciden marcharse a Estados Unidos. ?Fue un viaje inici¨¢tico?
Respuesta. Por supuesto que lo fue. ?ramos cuatro chicos de provincias que de pronto nos vimos en Nueva York grabando en los estudios de la RCA. Yo ten¨ªa 19 a?os y estuvimos all¨ª m¨¢s de dos a?os y medio. Realmente, el sonido del grupo se concret¨® en Estados Unidos.
P. ?Y c¨®mo era ese sonido?
R. Ten¨ªamos un sonido muy Liverpool, pero a mediados de los sesenta el soul se convirti¨® en una corriente popular. Empezamos a aprender del rythm & blues y sus derivadas, de grupos como The Beach Boys y otros del nuevo pop. Y as¨ª se fue creando el sonido Canarios; un sonido ecl¨¦ctico. Cuando volvimos hac¨ªamos una m¨²sica en la que se mezclaba el soul con elementos europeos, influencias cl¨¢sicas, del impresionismo franc¨¦s o del serialismo de la escuela de Viena. En Espa?a no hab¨ªa nada que sonara as¨ª.
P. ?C¨®mo sonaba la Espa?a de los sesenta?
R. Hab¨ªa de todo. Por ejemplo, Los Pekenikes hac¨ªan una m¨²sica instrumental fuera de los cauces anglosajones, con muchos giros espa?oles y sonidos latinos. Los Brincos eran originales, utilizaban secuencias puramente espa?olas, como de flamenco. Tambi¨¦n es verdad que hubo muchos grupos imitativos, que hac¨ªan versiones. Pero este disco, Los a?os del 600 (II), cuenta mucho mejor la segunda mitad de los a?os sesenta que cualquier cr¨®nica escrita por cualquier gur¨². Est¨¢n las piezas clave que han hecho de la m¨²sica espa?ola lo que es hoy.
P. ?C¨®mo influy¨® la situaci¨®n pol¨ªtica?
R. Mayo del 68 tambi¨¦n lleg¨® a Espa?a. Se escuchaban esos grupos, pero tambi¨¦n Raimon daba sus recitales en las universidades. Serrat y V¨ªctor Manuel estaban en activo. Creo que el factor pol¨ªtico siempre influye en todas las artes, el cine, la literatura, la m¨²sica. Pero, es curioso, el r¨¦gimen no prestaba tanta atenci¨®n a la m¨²sica, deb¨ªan de pensar que era un arte menor... Aunque, por ejemplo, la cara B de Get on your knees estuvo censurada en las radios. Se titulaba Trying so hard, y alguien pens¨® que era lasciva.
P. ?Qu¨¦ es lo que m¨¢s ha cambiado hasta aqu¨ª?
R. Si comparamos el estado creativo de aquellos a?os con el de ahora, no hay que olvidar algo muy importante: la industria. En aquel tiempo todo era muy dif¨ªcil de amplificar. Pero la segunda mitad de los sesenta es m¨¢s importante que la primera porque se sientan las bases del desarrollo de la industria. En los setenta toma cuerpo con la movida y en los ochenta hay una explosi¨®n en las radios y las televisiones... As¨ª hasta llegar a los fen¨®menos de fans. Pero no creo que entonces hubiera menos creatividad que ahora.
P. Los Beatles fueron unos de los reyes de los sesenta. Usted escuch¨® sus primeras canciones de una forma muy especial.
R. Pues s¨ª. Nosotros toc¨¢bamos en un club que se llamaba Flamingo, que estaba al lado de un hotel donde se alojaban Cliff Richards y los Shadows, porque estaban rodando la pel¨ªcula Dos a?os de vacaciones. Entonces, supongo que en uno de los descansos del rodaje preguntaron d¨®nde hab¨ªa m¨²sica y les dijeron que al lado hab¨ªa unos chicos que hac¨ªan unos ruidos muy raros. Bajaron al local y cuando los vimos entrar fue como si ahora a cualquier grupo se le apareciera en su local de ensayo la reencarnaci¨®n de Kurt Cobain. Eran uno de nuestros referentes; toc¨¢bamos todas sus canciones. Nos pidieron tocar, les dejamos los instrumentos y esper¨¢bamos que tocaran sus canciones, pero en lugar de eso escuchamos una m¨²sica intensa, negroide y dura... Resulta que eso eran los Beatles.
P. Ya que hablamos de los Beatles. ?Usted es de McCartney o de Lennon?
R. Lennon, sin ninguna duda. Pero entre uno y otro prefiero a Bob Dylan. Aunque mi grupo favorito de aquella ¨¦poca se llama Pretty Things.
P. Usted, que ha sido cantante, productor, director de escena, ha investigado en los sonidos electr¨®nicos... ?Por qu¨¦ ha abandonado la faceta creativa?
R. Mi ¨²ltimo disco es de 1992. Se titul¨® Memoria del agua. Mi retirada tiene mucho que ver con Frank Zappa. En el a?o 94 no pudimos llevar a cabo un proyecto maravilloso porque muri¨® de c¨¢ncer de pr¨®stata. Yo admiraba much¨ªsimo a Zappa. Quer¨ªamos crear una nueva Bauhaus musical en Madrid. Le presentamos el proyecto a Juan Barranco, y por supuesto no lo vio. Zappa y yo compart¨ªamos muchas cosas, incluido nuestro compositor favorito, Edgar Varese.
Babelia
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