ABB reclama a dos ex presidentes parte de las pensiones que cobraron
El grupo helv¨¦tico-sueco anuncia p¨¦rdidas por primera vez en 14 a?os
Las suculentas pensiones que se aseguraron los dos primeros presidentes ejecutivos del grupo de ingenier¨ªa helv¨¦tico-sueco ABB para su retiro fueron excesivas, seg¨²n la direcci¨®n actual de la mayor compa?¨ªa europea de ingenier¨ªa el¨¦ctrica. El Consejo de Administraci¨®n reclama a Percy Barnevik y G?ran Lindahl una parte de los 233 millones de francos suizos (unos 154 millones de euros) que cobraron al irse del grupo.
Las dudas sobre la excesiva generosidad mostrada con los altos ejecutivos coinciden con el anuncio de p¨¦rdidas por 691 millones de d¨®lares (778 millones de euros) registradas en 2001, los primeros n¨²meros rojos en los 14 a?os de historia de ABB. Las acciones de ABB, que ha visto c¨®mo se esfumaron casi dos terceras partes de su valor burs¨¢til el a?o pasado, retrocedieron ayer un 4,96% al cierre de la Bolsa de Z¨²rich.
'Los procedimientos para aprobar estas compensaciones fueron insatisfactorios y la compa?¨ªa buscar¨¢ restituir parte de las cantidades pagadas en exceso', se?al¨® J¨¹rgen Dormann, actual presidente del Consejo de Administracion de ABB, en un comunicado distribuido ayer, antes de la presentaci¨®n de resultados en Z¨²rich, sede del grupo. No especifica, sin embargo, cu¨¢nto cobraron de m¨¢s los dos altos ejecutivos por planes de pensiones y otros beneficios.
Barnevik, art¨ªfice de la fusi¨®n de la sueca Asea AB y la suiza Brown Boveri Company, que en 1988 dio lugar a la actual ABB, y uno de los gestores con m¨¢s prestigio de la empresa, recibi¨® cerca de 148 millones de francos suizos (98 millones de euros) tras dejar la presidencia en 1996. Pero permaneci¨® en el Consejo de Administraci¨®n hasta el 21 de noviembre pasado, cuando dimiti¨® tras la p¨¦sima evoluci¨®n de la empresa. Lindahl, que recibi¨® 85 millones de francos suizos (unos 56 millones de euros) por su retiro, abandon¨® su cargo al frente de ABB a principios de 2000 para ser sustituido por J?rgen Centerman, un ingeniero de 50 a?os que ha hecho toda su carrera en ABB.
La certeza de que ambos ejecutivos cobraron de m¨¢s se conoce despu¨¦s de que ABB, que fabrica desde cables el¨¦ctricos hasta robots, atravesara en 2001 su peor crisis. La compa?¨ªa perdi¨® 691 millones de d¨®lares el a?o pasado debido a una ca¨ªda de la demanda en Europa y a las fuertes provisiones por 470 millones de d¨®lares realizadas para hacer frente a los problemas del amianto, una fibra natural muy utilizada hasta mediados de los 70, hasta que se descubri¨® que puede provocar enfermedades.
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