Un 'narcot¨²nel' entre M¨¦xico y EE UU

El submarino de tecnolog¨ªa rusa incautado al narcotr¨¢fico colombiano en unos astilleros urbanos hace dos a?os fue probablemente el transporte clandestino m¨¢s atrevido de la historia, pero el m¨¢s lucrativo, durante al menos dos a?os, quiz¨¢s haya sido el narcot¨²nel entre M¨¦xico y Estados Unidos, descubierto esta semana en la ciudad fronteriza de Tecate. Un pasadizo de un kil¨®metro y medio de largo y 1,3 metros de ancho facilit¨® el acarreo hacia el mercado estadounidense de miles de millones de d¨®lares en coca¨ªna, marihuana o anfetaminas, y el paso de inmigrantes indocumentados.

El t¨²nel parece estar vinculado al cartel de los hermanos Arellano F¨¦lix, en la lista de los m¨¢s buscados de la Oficina Federal contra el Narcotr¨¢fico (DEA). Estaba forrado de madera y alumbrado en un 90% de su recorrido, dispon¨ªa de ventilaci¨®n y nac¨ªa en la finca mexicana del Rancho Magisterial para terminar, detr¨¢s de las alambradas de la l¨ªnea divisoria, en una granja de cerdos de la comunidad californiana de Tierra del Sol. Seg¨²n la Procuradur¨ªa General de la Rep¨²blica (PGR, equivalente a fiscal¨ªa general), la polic¨ªa sospech¨® de una casa cuya chimenea expel¨ªa aire h¨²medo, y al investigar su procedencia descubrieron el corredor.

'Por all¨ª transportaron miles de millones de d¨®lares en drogas', inform¨® el agente estadounidense Errol J. Ch¨¢vez. Agentes del Grupo ?lamo, de la Direcci¨®n General de Apoyo T¨¢ctico de la Polic¨ªa Federal Preventiva, localizaron detr¨¢s de la chimenea sospechosa un sofisticado mecanismo de gatos hidr¨¢ulicos, y un sistema el¨¦ctrico que levantaba una plataforma de cemento, y descubrieron unas escaleras met¨¢licas hacia un s¨®tano y el arranque de unos rieles con vagonetas de carga pesada.

La casa es propiedad del supuesto abogado Jos¨¦ L¨®pez Delgado, residente en Tijuana. Cada 15 d¨ªas se registraba movimiento de personas y veh¨ªculos en las afueras de la finca, y ese tr¨¢fico tambi¨¦n alert¨® a las autoridades.

'Esta obra de ingenier¨ªa s¨®lo puede ser obra de los Arellano F¨¦lix', declar¨® en San Diego (California) un portavoz de la DEA.

Los jefes del cartel de Tijuana son tenidos como los m¨¢s peligrosos de las cuatro grandes bandas de narcotraficantes de M¨¦xico y, seg¨²n un informe de la agencia estadounidense, introdujeron en el mercado norteamericano grandes cantidades de drogas con la complicidad de autoridades de los Estados de Baja California Norte y Sur, Jalisco, Michoac¨¢n, Chiapas y Sinaloa, a las que sobornaban con m¨¢s de un mill¨®n de d¨®lares a la semana. Mercenarios, ex polic¨ªas, ex militares y criminales de diverso origen componen el violento ej¨¦rcito a sus ¨®rdenes.

La droga transportada hasta la granja norteamericana era despu¨¦s cargada en furgonetas y distribuida en Los ?ngeles y otras ciudades del sur de Estados Unidos, seg¨²n fuentes oficiales. El Gobierno de Washington confisc¨® recientemente propiedades de los hermanos y recomend¨® no acudir a los hoteles, farmacias y otros establecimientos supuestamente sufragados con dinero de ese cartel.

El narcotr¨¢fico excav¨® otro t¨²nel de parecida longitud en 1990, en el l¨ªmite de Tijuana, en una frontera com¨²n de 3.200 kil¨®metros, porosa en varios tramos, pese al aumento de las patrullas policiales. Aquel corredor fue descubierto justo despu¨¦s de haber sido supuestamente construido por Joaqu¨ªn Guzm¨¢n, alias El Chapo, acusado de haber asesinado a los mineros encargados de la obra.

El ingenio de los capos y su capacidad econ¨®mica no parecen tener l¨ªmites. La polic¨ªa colombiana localiz¨®, en el a?o 2000, un astillero clandestino cerca de Bogot¨¢ con tecnolog¨ªa y manual de instrucciones rusos que fabricaban un submarino capaz de transportar 200 toneladas de coca¨ªna. 'Estaba terminado entre un 30% y un 40%, y con su cuarto de m¨¢quinas listo', inform¨® el entonces general Luis Ernesto Gilibert, director de la Polic¨ªa Nacional. 'Es una mole de hierro grandota, muy bien terminada, que seguramente iba a servir para sacar mucha coca¨ªna de este pa¨ªs hacia el exterior', a?adi¨®.