PHN: el informe que reforz¨® la Enmienda 10

A mediados del pasado enero, el Ministerio de Medio Ambiente present¨® en Bruselas la Evaluaci¨®n Ambiental Estrat¨¦gica (EAE) del Plan Hidrol¨®gico Nacional (PHN), con la que trataba de demostrar la bondad ambiental del PHN, y m¨¢s concretamente, del trasvase del Ebro. El 6 de febrero, la Fundaci¨®n Nueva Cultura del Agua (Funca) present¨® tambi¨¦n en Bruselas, en un acto conjunto con representantes de cinco grupos pol¨ªticos del Parlamento Europeo, un detallado an¨¢lisis cr¨ªtico de la EAE y del propio PHN realizado por un equipo de veinte especialistas, bajo la direcci¨®n del profesor D. Pedro Arrojo, del Departamento de An¨¢lisis Econ¨®mico de la Universidad de Zaragoza. Un resumen de este informe circul¨® en los medios comunitarios y su contenido fue tenido en cuenta por los integrantes de la Comisi¨®n de Medio Ambiente del Parlamento Europeo que aprobaron el 20 de febrero la ya famosa Enmienda 10, en la que se reprobaba el PHN del gobierno espa?ol. Como se recordar¨¢, el 28 de febrero la enmienda fue aprobada en el Pleno del Parlamento Europeo con una redacci¨®n modificada, en la que se eliminaba la menci¨®n expl¨ªcita al PHN, pero se manten¨ªa el cuestionamiento de los trasvases, en los t¨¦rminos siguientes: '... Manifiesta su profunda preocupaci¨®n ante el precedente sentado por las propuestas de realizaci¨®n de planes insostenibles de gesti¨®n de recursos h¨ªdricos en toda Europa y pide a la Comisi¨®n Europea que, por estas razones, no facilite financiaci¨®n europea para estos proyectos de trasvases'.

La evaluaci¨®n ambiental elude analizar la irracionalidad econ¨®mica de los trasvases

Los pretendidos caudales excedentarios en el Delta del Ebro desaparecer¨¢n en 20 a?os

Las conclusiones del documento cr¨ªtico a la EAE elaborado por la Fundaci¨®n Nueva Cultura del Agua se articulan en 15 puntos:

1. La EAE tergiversa el concepto de desarrollo sostenible: aunque usa con profusi¨®n el t¨¦rmino 'desarrollo sostenible', lo identifica con el aumento de la oferta de caudales. Se marginan as¨ª las estrategias de gesti¨®n de las demandas, lo que supone un grave desenfoque y falseamiento del concepto de desarrollo sostenible en materia de pol¨ªtica hidrol¨®gica.

2. La EAE no estudia el PHN sino tan s¨®lo los trasvases del Ebro: el documento del Gobierno elude valorar los impactos de la ingente oleada de 120 grandes presas proyectadas en el pa¨ªs del mundo con m¨¢s embalses por habitante y por kil¨®metro cuadrado, ligada a la masiva extensi¨®n de nuevos regad¨ªos (m¨¢s de un mill¨®n de nuevas hect¨¢reas).

3. Se elude analizar los impactos globales en la cuenca del Ebro: no se estudian los impactos de decenas de nuevos grandes embalses en el Pirineo, que junto al desarrollo de 450.000 nuevas hect¨¢reas de regad¨ªo en la cuenca, y a los grandes trasvases previstos, garantizan un marco de insostenibilidad para el Delta del Ebro.

4. En el diagn¨®stico de la situaci¨®n no se analizan las causas de los problemas: no se estudian los intereses econ¨®micos y pol¨ªticos que han alentado el desarrollo ilegal del regad¨ªo en zonas sobreexplotadas, la contaminaci¨®n incontrolada, y el desarrollo urbano-tur¨ªstico al margen de cualquier ordenaci¨®n territorial y urban¨ªstica razonable.

5. El diagn¨®stico del PHN asume un crecimiento insostenible de las demandas, elude tratar el desgobierno en las zonas sobreexplotadas e infravalora los recursos de la cuenca del J¨²car: la Administraci¨®n no s¨®lo tolera la masiva sobreexplotaci¨®n ilegal de los acu¨ªferos, sino que adem¨¢s promueve expectativas de legalizaci¨®n e incluso de dotaci¨®n de nuevos regad¨ªos a trav¨¦s de los trasvases, con lo que anima la espiral de la sobreexplotaci¨®n. En la cuenca del J¨²car el pretendido d¨¦ficit de 300 hm3/a?o presentado en el PHN contrasta con los 1.100 hm3/a?o de 'excedentes' disponibles que establece el plan de cuenca elaborado dos a?os antes por el mismo ministerio.

6. An¨¢lisis insuficiente de los efectos del cambio clim¨¢tico: la memoria del PHN presenta un escenario de cambio clim¨¢tico que podr¨ªa caracterizarse como optimista. Sin embargo, a¨²n desde este escenario, los pretendidos 'caudales excedentarios' en el Delta desaparecen en poco m¨¢s de veinte a?os. Ante ello, el PHN reduce su an¨¢lisis a un horizonte de 20 a?os.

7. Se elude asumir los criterios de la directiva marco para asegurar el buen estado ecol¨®gico de los r¨ªos incluyendo deltas, estuarios y litorales: los estudios publicados durante los ¨²ltimos a?os por los equipos m¨¢s prestigiosos de especialistas en la materia exigen un r¨¦gimen de caudales para garantizar la sostenibilidad del Delta del Ebro (9.000-12.500 hm3/a?o) que casi cuadruplica lo que el PHN asume como requerimientos ambientales (3.000 hm3/a?o).

8. Se amenaza la sostenibilidad de los ecosistemas fluviales mejor conservados en el Pirineo y otras zonas de monta?a por la construcci¨®n de 120 nuevos grandes embalses: entre las 120 grandes presas previstas en el PHN, muchas de ellas amenazan gravemente tramos de r¨ªo en la cabecera de las cuencas, que constituyen hoy los ecosistemas fluviales mejor conservados de Espa?a e incluso de Europa en algunos casos, rompiendo as¨ª el principio de no deterioro establecido por la Directiva Marco de Aguas.

9. Se elude hacer un an¨¢lisis serio de la calidad de las aguas trasvasables y sus impactos en las zonas receptoras: las aguas que se prev¨¦ trasvasar desde el Bajo Ebro son de mala calidad, superando actualmente en media los 1000 ?S/cm que la UE recomienda como l¨ªmite de salinidad para aguas prepotables. Su mezcla con las aguas del J¨²car en el embalse de Tous afectar¨ªa negativamente a la calidad del agua para el ¨¢rea de Valencia (1 mill¨®n de personas), que se surte de este embalse. Las previsiones de evoluci¨®n de la calidad prev¨¦n un dr¨¢strico empeoramiento, especialmente en la medida que est¨¢ previsto ampliar los regad¨ªos y otros usos del agua en la cuenca del Ebro. Por otra parte, la EAE no analiza los procesos de salinizaci¨®n en tierras de cultivo como consecuencia del uso de estas aguas de mala calidad, pese al antecedente de la espiral de deterioro que supuso el trasvase Tajo-Segura sobre las huertas del Bajo Segura, a pesar de la alta calidad de las aguas trasvasadas.

10. El documento de EAE soslaya un an¨¢lisis riguroso de las afecciones a espacios, h¨¢bitats y especies protegidos: al respecto existe unanimidad, tanto entre los movimientos ecologistas m¨¢s prestigiosos como entre los expertos independientes y c¨¢tedras de Ecolog¨ªa de la Universidad espa?ola: el PHN supone el mayor conjunto de impactos sobre espacios y especies protegidos jam¨¢s aprobado en los pa¨ªses de la UE. Asimismo, los principales icti¨®logos de nuestro pa¨ªs denuncian los graves impactos sobre especies pisc¨ªcolas de enorme valor, dado el elevado n¨²mero de endemismos existente en las cuencas espa?olas (el m¨¢s alto de Europa). Tanto los grandes embalses, como muy especialmente los trasvases, amenazan en este caso la estructura biol¨®gica aut¨®ctona de los r¨ªos espa?oles, amenazando en algunos casos la supervivencia de especies protegidas.

11. Se elude estudiar seriamente los impactos sociales y los graves desequilibrios interterritoriales que induce la pol¨ªtica trasvasista: el documento de EAE presenta un lamentable tratamiento de los impactos sociales, eludiendo estudiar los graves conflictos suscitados (las mayores movilizaciones de las ¨²ltimas d¨¦cadas con m¨¢s de un mill¨®n de manifestantes contra el PHN). En lo que se refiere a la aplicaci¨®n del principio de equilibrio interterritorial, las ¨¢reas m¨¢s negativamente afectadas por el PHN y su pol¨ªtica trasvasista son sin duda las comarcas piren¨¢icas y las del Bajo Ebro, cuyos par¨¢metros de desarrollo socioecon¨®mico son muy inferiores de los de las comarcas te¨®ricamente beneficiadas: ¨¢rea metropolitana de Barcelona, costa levantina, murciana y almeriense, cuyas rentas per c¨¢pita est¨¢n entre las m¨¢s altas de Espa?a. Tomar como referencia indicadores medios a nivel regional (Arag¨®n, Catalu?a, C. Valenciana, Murcia y Andaluc¨ªa) deforma la realidad territorial que se pretende valorar.

12. La EAE elude analizar seriamente la irracionalidad econ¨®mica de los trasvases y del conjunto del PHN: el balance econ¨®mico coste-beneficio positivo que presenta la memoria del PHN, si se desarrolla con rigor, resulta ser rotundamente negativo. Una larga serie de errores consentidos y trucos contables sesgan de forma inaceptable los c¨¢lculos econ¨®micos presentados por el PHN.

13. Se elude, siquiera en una perspectiva de futuro, asumir el criterio de 'recuperaci¨®n ¨ªntegra de costes' para cada zona usuaria previsto por la directiva marco: para Alicante, Murcia y Almer¨ªa, los propios costes estimados muy favorablemente por el Gobierno se disparan al entorno de los 60 c¨¦ntimos de euro/m3 (100 pesetas/m3) claramente por encima incluso de los costes de desalaci¨®n del agua de mar. Las mismas estimaciones del Gobierno indican que por encima de 36 c¨¦ntimos de euro/m3 (60 pesetas/m3) no habr¨ªa capacidad de pago del agua desde la agricultura.

14. El documento de EAE excluye de forma inaceptable e incluso sospechosa la consideraci¨®n de opciones de mercado como herramienta de gesti¨®n de la demanda: siendo el propio Gobierno del PP quien en su momento impuso la reforma de la Ley de Aguas para legalizar los mercados de derechos concesionales de aguas, resulta sorprendente la marginaci¨®n de este tipo de opciones que, adecuadamente intervenidas desde la Administraci¨®n, podr¨ªan permitir atender muchas demandas, especialmente en periodos de sequ¨ªa (bancos de agua) en base a transferencias voluntarias.

15. El documento de EAE simplifica el abanico de opciones estrat¨¦gicas y sesga la valoraci¨®n de las opciones no basadas en grandes trasvases: existen alternativas viables basadas en estrategias mixtas no valoradas por la EAE en las que se deber¨ªan combinar:

a) La retirada selectiva de superficies de regad¨ªo, empezando por las ilegales; en el caso de regad¨ªos legales, se cuenta con la experiencia exitosa de La Mancha, en donde un adecuado programa europeo de compensaciones ha conseguido en pocos a?os reducir en 300 hm3/a?o las extracciones del acu¨ªfero sobreexplotado.

b) La aplicaci¨®n de programas e incentivos para mejorar la eficiencia en el uso urbano, industrial y agrario, con amplios m¨¢rgenes de ahorro potencial que se sit¨²an en un orden de 650 hm3/a?o en el litoral mediterr¨¢neo (entre ahorros urbanos y agrarios).

c) La optimizaci¨®n de una gesti¨®n integrada de recursos superficiales y subterr¨¢neos.

d) La reutilizaci¨®n de retornos urbanos, la desalobraci¨®n de aguas salobres y la desalaci¨®n de aguas marinas.

e) Opciones de mercados intervenidos (bancos de agua) que permitan flexibilizar el sistema concesional de aguas superficiales.

f) Fomento de estrategias de ordenaci¨®n territorial y urban¨ªstica coherentes con perspectivas de desarrollo sostenible.

Una opci¨®n estrat¨¦gica mixta de este tipo alumbrar¨ªa alternativas razonables y coherentes con las nuevas perspectivas del desarrollo sostenible, que no s¨®lo son viables sino mucho m¨¢s econ¨®micas que las alternativas trasvasistas presentadas por el Plan Hidrol¨®gico Nacional.

Antonio Estevan es ingeniero industrial y asesor de pol¨ªtica hidrol¨®gica del Gobierno aut¨®nomo de las Islas Baleares.