El despliegue del Ej¨¦rcito garantiza la normalidad en las urnas en Colombia
Las acciones de boicoteo de las FARC en las legislativas s¨®lo afectaron a 15 municipios
Los colombianos acudieron ayer a las urnas para elegir a sus congresistas en medio de un gran despliegue del Ej¨¦rcito. Los hostigamientos, obstrucci¨®n de v¨ªas de comunicaci¨®n, quema de material electoral y el secuestro y amenazas contra funcionarios protagonizados por la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) trataron de sabotear los comicios parlamentarios de ayer, domingo. Pero no pudieron lograrlo, y los informes oficiales hablaban 'normalidad' casi general, con incidentes en apenas 15 de los 1.060 municipios del pa¨ªs.
Los altos mandos del Ej¨¦rcito informaron de la muerte en combate de Orlando Herrera, uno de los hombres de confianza del comandante de las FARC Jorge Brice?o Su¨¢rez, Mono Jojoy. La guerrilla intimid¨® a los votantes, amenaz¨¢ndolos con convertir en objetivos militares a quienes apoyaran el 'enga?o al pueblo' de las votaciones. En los cinco municipios de la antigua zona de distensi¨®n, situada al sur de Colombia, no hubo mesas en las zonas rurales, y muchos campesinos no se atrevieron a acudir a las zonas urbanas a votar. La acci¨®n de los paramilitares sirvi¨® tambi¨¦n para presionar a los votantes en favor de sus candidatos.
La confusi¨®n generada por el 'monstruoso sistema electoral', como es calificado por los analistas pol¨ªticos colombianos, dificult¨®, sin embargo, el proceso electoral. 'Hay que venir a votar con lupa', se quejaba un hombre de unos 40 a?os mientras trataba de buscar en el inmenso cartel situado a la entrada del colegio electoral al candidadto que deseaba votar. Para el Senado hab¨ªa hasta 326 fotos y nombres de los cabeza de lista. 'Esto es un embrollo', asegur¨®, mientras su paciencia se agotaba. Despu¨¦s de 15 minutos desisti¨®: 'No est¨¢; voy a averiguar el n¨²mero y regreso'.
El despiste, el no saber por qui¨¦n votar en una papeleta de varias hojas y plegable, fue un mal anunciado. No hay listas de partidos, sino un sinn¨²mero. Cada candidato, adem¨¢s, se presenta por su cuenta y paga su campa?a.
En Bogot¨¢, por ejemplo, los votantes tuvieron que elegir entre 376 listas para los l8 puestos que corresponden a la circunscripci¨®n en la C¨¢mara de Representantes, y entre 326 para el Senado, que se elige por circunscripci¨®n nacional. La mayor¨ªa de las listas tiene el aval de los dos partidos tradicionales, sin que medie una relaci¨®n program¨¢tica ni ning¨²n tipo de compromisos. En las listas, seg¨²n ha denunciado la fiscal¨ªa, figuran 101 candidatos que tienen cuentas pendientes con la justicia.
Los colombianos secundaron ayer el llamamiento a votar contra los violentos, la abstenci¨®n y corrupci¨®n. 'El Congreso que tenemos es una porquer¨ªa', dijo, al depositar su voto, la candidata a la presidencia de la Rep¨²blica por el movimiento S¨ª Colombia, Noem¨ª San¨ªn.
En un informe especial del semanario El Espectador se resume el negocio que significa obtener una acta parlamentaria: 'Con la mediaci¨®n de testaferros, algunos congresistas manejan jugosos contratos y administran la mayor¨ªa de empresas e instituciones del Estado'.
En un pa¨ªs donde 33 de sus 42 millones de habitantes sobreviven con 2 d¨®lares (2,30 euros diarios), los legisladores ganan 7.000 d¨®lares al mes, sin contar otras prebendas.
Se esperaba una alta votaci¨®n en la lista encabezada por Luis Eladio P¨¦rez, uno de los cinco congresistas secuestrados por las FARC y en la que figura, en segundo lugar, el empresario period¨ªstico Guillermo Cort¨¦s, quien tambi¨¦n vivi¨® esta pesadilla que afecta a m¨¢s de 3.000 colombianos anualmente. Seguidores de Ingrid Betancourt, la candidata presidencial, secuestrada hace 15 d¨ªas, recorrieron la ciudad con una gran foto de la pol¨ªtica.
Hasta bien entrada la noche, la madrugada en Espa?a, no se conocer¨¢n los primeros datos sobre la composici¨®n del nuevo Congreso, que actualmente tiene una mayor¨ªa liberal. Este partido, que presenta 481 candidatos, lleg¨® dividido en esta ocasi¨®n entre seguidores de ?lvaro Uribe y Horacio Serpa, ambos aspirantes a las presidenciales del mes de mayo. 'Cuando se cierren las urnas', dijo Serpa, 'se conocer¨¢ la verdadera encuesta, de carne y hueso, sobre las preferencias pol¨ªticas de los colombianos'. Las encuestas asignan un 60% de la intenci¨®n de voto a Uribe frente a un 24% a Serpa.
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