Lecciones de Oriente

Esta semana no se cabr¨¢ en Montmel¨®. De vuelta del lejano Oriente, todos los equipos piensan que a¨²n est¨¢n a tiempo de mejorar, de corregir errores, de empezar de nuevo. Y es cierto que, desde que el campeonato se alarg¨® hasta 16 carreras, la temporada se compone de muchos tramos y, como en cualquier Liga de f¨²tbol, las escuder¨ªas tienen rachas buenas y malas. Pero tambi¨¦n es cierto que cuando no se ha hecho bien el trabajo durante el invierno es casi imposible recuperar el terreno perdido hasta el ¨²ltimo tramo de la temporada. Y entonces acostumbra a ser demasiado tarde.

Melbourne nunca es una referencia y la cita en el h¨²medo y t¨®rrido circuito de Sepang tampoco se parece mucho al resto del campeonato. Pero la carrera de ayer ya mostr¨® muchas cosas. Est¨¢ claro que Williams-BMW ha hecho bien los deberes. En cuanto a Ferrari, parece ser que ya los hizo a finales de la temporada pasada, lo que ha permitido a la escuder¨ªa italiana ir un paso por delante de todos, reserv¨¢ndose el nuevo coche para el comienzo de la temporada europea, en Imola, en su propia casa. McLaren, en cambio, puede tener un coche muy r¨¢pido, como demostraron los tiempos obtenidos en los ensayos de la pretemporada, pero no lo tiene puesto a punto, ni en fiabilidad ni en cuanto a su adaptaci¨®n a los nuevos neum¨¢ticos Michelin, sin contar que uno pueda dudar sobre la competitividad de sus pilotos.

Esta situaci¨®n s¨®lo puede beneficiar a Renault. Con que s¨®lo mejore un poco m¨¢s su fiabilidad, el constructor franc¨¦s parece en condiciones de apropiarse del espacio que corresponde al tercero en discordia. La estrategia de Flavio Briattore de presionar al joven Jenson Button no pod¨ªa dar mejores resultados. Ayer, s¨®lo la mala suerte -y Michael Schumacher- impidi¨® que subiera al podio por primera vez.

Por detr¨¢s de estos cuatro equipos, Sauber. Y nadie m¨¢s. Las dos escuder¨ªas que equipan motores Honda, Jordan y BAR, naufragan sin remisi¨®n; Jaguar no levanta cabeza, aunque al menos Lauda admita lo que sucede. Peor es el caso de Arrows, que todav¨ªa no ha acabado una sola carrera. Minardi sigue donde estaba. S¨®lo Toyota muestra una manera de hacer las cosas con determinaci¨®n y solidez. Para ser un novato llegado del mundo de los rallies, su patr¨®n, el sueco Ove Anderson, parece que llevara mucho tiempo en la f¨®rmula 1.