Carlos N¨²?ez mezcla en su nuevo disco lo celta con otras m¨²sicas
'Todos os mundos' se present¨® en Par¨ªs
El nuevo disco de Carlos N¨²?ez, Todos os mundos, acaba de aparecer en Espa?a. Y en Francia, donde lo present¨® los d¨ªas 16 y 17 de marzo en La Nuit Celtique de Paris.
'Con mi nuevo disco quiero devolver el amor que te da la variedad: todos somos distintos, pero la m¨²sica es un lenguaje universal', coment¨® Carlos N¨²?ez a prop¨®sito de Todos os mundos, que se public¨® ayer simult¨¢neamente en Espa?a y Francia. 'S¨¦ que incluyo resonancias flamencas de la misma manera que con los pies marco un ritmo distinto cuando toco en el sur de los EE UU. Despu¨¦s del 11 de septiembre hay una gran tendencia a quedarse en casa, a no viajar, a cerrarse en s¨ª mismo. Todos os mundos se inscribe contra ese ensimismamiento'.
Carlos N¨²?ez fue hace poco la estrella invitada del mayor concierto de m¨²sica celta realizado hasta ahora. En dos noches desfilaron por el Stade de France, en los alrededores de Par¨ªs, 100.000 espectadores deseosos de dejarse llevar por sonoridades gallegas, bretonas, escocesas o irlandesas. 'Hasta ahora, el Stade era un recinto secuestrado por el rock, que s¨®lo pod¨ªan llenar los Rolling Stones o Johnny Hallyday. Ya no es as¨ª. M¨¢s que un concierto, ha sido un sue?o', explic¨® Carlos N¨²?ez despu¨¦s de sus espect¨¢culos.
La Nuit Celtique de Paris estuvo prevista como una 'noche m¨¢gica', una noche de comuni¨®n entre un p¨²blico 'enamorado de una m¨²sica org¨¢nica, que suena a madera y olas, previa a la revoluci¨®n industrial contaminante'. Para N¨²?ez era, adem¨¢s, la oportunidad de presentar su ¨²ltimo disco, Todos os mundos.
Los dos conciertos se celebraron con el c¨¢rtel de 'no hay billetes' puesto y despu¨¦s de haber ampliado el aforo en 5.000 localidades. No faltaron las cr¨ªticas. Para el diario Le Monde, los organizadores se dejaron ganar por la trampa del gigantismo. No fue ¨¦sa la opini¨®n de Carlos N¨²?ez. 'Tuve la sensaci¨®n de participar en un encuentro interplanetario. El espacio es enorme, pero delicado: Tuvimos, adem¨¢s, a nuestro servicio la mejor tecnolog¨ªa para poder respetar lo peque?o y natural en un contexto gigantesco. Lanzabas una nota y el retorno de los espectadores, su emoci¨®n tardaba en llegarte un segundo, o un segundo y medio, era como si dialogasen planetas distantes, pero que se comprenden'.
Cuatro ministros
Que la noche tuvo algo de m¨¢gico lo prueba que a los m¨²sicos se les aparecieran cuatro ministros. 'Eso cre¨® una cierta tensi¨®n. Los bretones estiman que el poder les ha maltratado, que a¨²n sigue maltratando su cultura y su lengua y que los ministros s¨®lo aparecieron para hacerse la foto y en un contexto de campa?a electoral', coment¨® N¨²?ez, que vive parte del a?o en Douardenez, en la costa bretona.
De hecho, algunos escritores o estudiosos han comparado el trato que reciben los bretones al dispensado en los EE UU a los negros. Para N¨²?ez, 'la m¨²sica y la canci¨®n han servido de v¨ªnculos, de puntos de identificaci¨®n primarios, ligados a la emoci¨®n, por parte de gente que se sent¨ªa menospreciada'. Desde los a?os setenta, el auge de lo c¨¦ltico y de lo bret¨®n, el ¨¦xito internacional de algunos artistas, ha ayudado a la eclosi¨®n de una sensibilidad, al tiempo que encauzaba la violencia pol¨ªtica. 'Par¨ªs, con estos conciertos, se convirti¨® en la aut¨¦ntica capital de la Saint Patrick. En Nueva York, la fiesta se hace en locales mucho m¨¢s peque?os, no moviliza a gente venida de tantos pa¨ªses. All¨ª acuden los de origen irland¨¦s, a Par¨ªs fueron gente del universo interc¨¦ltico, pero tambi¨¦n muchos otros que no tienen nada que ver, que participan del car¨¢cter universal del lenguaje de la m¨²sica. A fin de cuentas, tal y como dejo patente en mi ¨²ltimo disco, toco m¨²sica celta y, al mismo tiempo, incorporo influencias ¨¢rabes, de flamenco o de country'.
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