"Me molesta que digan que el equipo no est¨¢ trabajado"
Casi, casi, va con el cargo. El Bayern M¨²nich es la gran cita anual del Madrid. Vicente del Bosque, de 51 a?os y en su tercera temporada al frente del club, ya se ha acostumbrado.
Pregunta. No le habr¨¢ costado mucho estudiar al Bayern.
Respuesta. Viendo al del a?o pasado, parece un calco. La presencia de Elber, delante, marca al Bayern de antes y al de ahora.
P. Es el adversario m¨¢s inc¨®modo del Madrid.
R. Sin duda. No seduce posiblemente a los espectadores. No crea escuela ni publicidad para el f¨²tbol, pero es muy competitivo. Ellos nos han ganado m¨¢s veces, pero hay un cierto equilibrio. Son dos estilos distintos. Ellos, m¨¢s pr¨¢cticos y con jugadores muy profesionales. Nosotros intentamos un f¨²tbol m¨¢s ofensivo.
'Con C¨¦sar no he abierto ninguna brecha. Y el Bernab¨¦u ha pasado absolutamente del debate'
'De chico, yo tambi¨¦n marcaba 50 goles por a?o. Portillo dar¨¢ el paso cuando tenga que darlo'
P. Comparando las plantillas, tiene que ser algo psicol¨®gico lo que les pierda.
R. No. Hace a?os, puede. Los alemanes eran como un trauma para los espa?oles. Pero ese complejo se ha perdido. El Madrid mira y no ve a nadie imbatible.
P. ?Y cuando mira al Bayern?
R. Pues... ve a un equipo al que no le gusta llevar la iniciativa. Parece que no hace nada, pero te pone contra las cuerdas.
P. Una diferencia respecto al duelo del curso pasado es C¨¦sar.
R. Sab¨ªa que iba a ocasionar alg¨²n problemilla, pero lo hice [sustituir a Casillas] pensando que era lo mejor para el Madrid y sin medir las consecuencias. Tampoco tengo por qu¨¦.
P. Algo de problema gratuito tiene, ?no?
R. No; es que no es ning¨²n problema. No he desestabilizado al equipo. No he abierto ninguna brecha por la que se nos pueda ir un t¨ªtulo. Se nos ir¨¢ por otras cosas, pero no por el debate sobre el portero.
P. An¨ªmicamente, ha afectado.
R. Por mucho que digan que no leen, que se a¨ªslan, los dos tienen que sentir algo. Pero lo m¨¢s importante es el p¨²blico. Y el Bernab¨¦u ha pasado del debate.
P. El debate deber¨ªa ir por las figuras. Salvo Ra¨²l, el resto apenas ha aparecido.
R. No dir¨ªa eso. El d¨ªa del Zaragoza la importancia de Zidane fue vital. Roberto Carlos est¨¢ aumentando su nivel. Hierro se encuentra mejor... Por mucho que nos critiquen y digan que este equipo se basa en sus figuras, tenemos automatismos que nos salvan cuando las figuras no est¨¦n en condiciones.
P. Pero ya va siendo hora de que rompan en un partido grande.
R. No es tan f¨¢cil. Las diferencias ya no son tantas. Y los contrarios saben c¨®mo juega el Madrid.
P. Y saben que, como equipo, juega m¨¢s equilibrado con Solari.
R. Ha aportado el dinamismo que necesitamos. Pero McManaman tambi¨¦n aporta sentido t¨¢ctico. No, no creo que el conjunto se haya beneficiado de Solari para jugar colectivamente. Ha beneficiado individualmente su impronta, su cambio de ritmo. Ha generado m¨¢s vitalidad.
P. La baja de Figo s¨ª ha beneficiado t¨¢cticamente...
R. Ah¨ª no tengo la menor duda. No digo que tengan que dejar de jugar Solari o Macca. Pero Figo es fundamental. En el aspecto ofensivo, en el competitivo. El que no lo vea as¨ª, pues... Figo no es ning¨²n problema. Nos hemos ordenado alrededor de jugadores ofensivos y hemos buscado la f¨®rmula de no resentirnos defensivamente.
P. Tampoco se ha visto un gran Madrid desde el c¨¦lebre duelo ante el Depor en la Liga.
R. Tambi¨¦n se magnific¨® aquello. Estamos en un club en el que todo se agranda: lo bueno y lo malo.
P. ?C¨®mo se defiende de la acusaci¨®n de que su equipo est¨¢ poco trabajado?
R. Me molesta, y mucho. Son frases hechas que hacen mucho da?o. Si no tuvi¨¦ramos un sistema, si no trabaj¨¢ramos sobre ¨¦l... Nos acusan de preparar poco las jugadas a bal¨®n parado, pero es que yo busco la simplicidad. Y la busco porque tenemos a Zidane, Figo, Roberto Carlos... No tenemos que buscar ning¨²n arabesco.
P. ?Siente que su trabajo se considera algo secundario?
R. No. Aqu¨ª, a todos los entrenadores los pillan por alg¨²n lado. Al que entrena con bal¨®n, al t¨¢ctico, al que da libertad, al severo, al grosero, al cordial o dialogante... A todos nos sacan defectos. Yo lo que quiero es conseguir un equilibrio en lo t¨¢ctico y la brillantez de unos jugadores a los que no debemos atar. Lo peor es que no son los periodistas. Son entrenadores y ex jugadores que se han arrimado y crean opini¨®n. No digo que de forma mal¨¦vola, pero s¨ª un poco malintencionada. No voy a dar nombres, pero hay pu?eter¨ªas que hacen da?o.
P. ?Por qu¨¦ hay que esperar para disfrutar de Portillo?
R. Porque tenemos por delante a jugadores que llevan ciento y pico goles. Y, por otro lado, ser¨ªa una aventura.
P. Ciento y pico de goles, s¨ª, pero en el caso de Morientes ciento y pico de fallos.
R. Son momentos... Morientes es de rachas y est¨¢ pichichi. Para jugar en el Madrid se necesita un cuajo.
P. Si es que utiliza m¨¢s a Morientes que a Guti, su gran descubrimiento.
R. Porque las exigencias del equipo le demandan m¨¢s. Gente que entra por la banda con buenos centros... Pero s¨ª, me jode que no juegue Guti.
P. ?No ser¨¢ que no pone a Portillo por la experiencia Pav¨®n, el cabreo de los centrales a los que ha sentado?
R. No. Lo de Pav¨®n demuestra que sabemos tomar decisiones duras. Karanka y Campo han ganado t¨ªtulos y est¨¢n relegados. Es una prueba de que aqu¨ª no hay miedo. Adem¨¢s, sacar a Portillo ser¨ªa una valent¨ªa f¨¢cil.
P. ?Es exagerada la fiebre que ha desatado?
R. De chico, yo met¨ªa 50 goles por a?o. Y Grande, lo mismo. En el Madrid siempre ha habido chavales que se han hinchado a meter goles. Pero hay que sopesar qui¨¦n tienes, qui¨¦n viene y si el cambio es tan angustioso. Portillo dar¨¢ el paso cuando tenga que darlo. Si aparecen ra¨²les o casillas, adelante. Pero la regla normal es seguir un proceso l¨®gico.
P. Si es posible la autocr¨ªtica, ?el Madrid fich¨® bien en el verano?
R. El Madrid ven¨ªa de ganar la Liga y el mercado no es tan f¨¢cil. El a?o que viene seguramente... Yo no estoy para buscar desuniones entre la cantera y los de fuera. Me dan igual los maccas que los pavones. Pero la cantera est¨¢ floreciendo y vamos a mirarla.
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