Lo que queda de El Palomar

Un mont¨®n de piedras en el suelo. Eso era lo que quedaba ayer en el barrio de Sant Andreu de la antigua casa de El Palomar, justo cuando se cumpl¨ªan cinco a?os de la ocupaci¨®n por un grupo de j¨®venes. Los ocupantes ten¨ªan previsto celebrar hoy el quinto aniversario del centro alternativo que hab¨ªan levantado en la antigua f¨¢brica, pero la intervenci¨®n por sorpresa de la polic¨ªa el viernes trunc¨® la fiesta de aniversario. Durante los cinco a?os que ha permanecido ocupada, grupos de j¨®venes han organizado en ella actividades l¨²dicas y culturales para reivindicarla como espacio alternativo, ya que el inmueble hab¨ªa devenido propiedad del Ayuntamiento.

El desalojo se produjo por sorpresa y los ocupantes protestaron por el hecho de no haber sido avisados antes, algo a lo que consideraban que ten¨ªan derecho por tratarse de una medida adoptada en el marco de un procedimiento civil. Pese a ello, no ofrecieron resistencia. En cuanto el ¨²ltimo joven ocupante abandon¨® la casona con sus pertenencias, las m¨¢quinas comenzaron el derribo.

Ayer, decenas de j¨®venes acudieron al lugar donde hab¨ªa estado El Palomar provistos de carritos de la compra, los llenaron de piedras procedentes de las viejas paredes y recorrieron el barrio en manifestaci¨®n hasta la sede del distrito, donde las arrojaron al suelo para protestar por lo que consideran 'un claro ejemplo de que el Ayuntamiento atiende antes a los intereses especulativos que a los sociales', seg¨²n dijo Albert Mart¨ªnez, uno de los miembros del movimiento okupa. 'El Ayuntamiento alega que ha ordenado el desalojo y derribo de la casa para ampliar la calle, es decir, para realizar un bien p¨²blico, pero ese cartel que hay en el solar en el que se anuncia la promoci¨®n de pisos indica el aut¨¦ntico motivo', a?adi¨®.

Mart¨ªnez a?adi¨®: 'Los espacios alternativos como El Palomar, que organizan actividades que no tienen cabida en los espacios institucionales, van a seguir existiendo a pesar de que la Administraci¨®n quiera echarnos de ellos'. 'Nos echar¨¢n de unos y ocuparemos otros', advirti¨®.

La casa de El Palomar es uno de los inmuebles que han permanecido m¨¢s tiempo ocupados en Barcelona. El desalojo hab¨ªa sido suspendido antes en dos ocasiones, los d¨ªas 7 de enero y 18 de febrero pasados. El viernes, el desalojo se hizo efectivo despu¨¦s de que los j¨®venes aceptaran abandonar pac¨ªficamente la casa. Durante toda la noche de ayer se trabaj¨® en el derribo de paredes y en la retirada de los escombros.