Al alcalde de Sevilla

Acabo de leer la entrevista al alcalde de Sevilla (El Pa¨ªs, 31 de marzo) y aparte de comprobar una vez m¨¢s el talante tornadizo de este se?or, a prop¨®sito de la actitud a adoptar respecto a los movimientos antiglobalizadores y en relaci¨®n con la acampada anti LOU de estudiantes universitarios, que por cierto quiere olvidar, lo que verdaderamente me ha dejado at¨®nito son las referencias al se?or Rojas-Marcos.

Aunque diga que te¨®ricamente est¨¢ retirado de la pol¨ªtica, no hace falta ser un observador muy avezado para darse cuenta que de facto tiene m¨¢s poder en el Ayuntamiento de Sevilla que el propio alcalde. Esto se vio ya claramente al quedar constituida la actual corporaci¨®n, donde el reparto de cargos favoreci¨® n¨ªtidamente al PA, a pesar de haber obtenido menos votos que en las elecciones, y ya se sabe qui¨¦n maneja los hilos del poder dentro de ese partido. Pero es m¨¢s, al referirse a la criatura predilecta del se?or Rojas-Marcos, el estadio ol¨ªmpico, pretende desvincularlo de la candidatura ol¨ªmpica. Con ello est¨¢ justificando esa inversi¨®n ruinosa para la ciudad, y poco le falta, haci¨¦ndonos comulgar con ruedas de molino, para poner de manifiesto que es la inversi¨®n m¨¢s rentable que nunca se haya hecho en nuestra ciudad. Es una prueba m¨¢s de que el actual alcalde de Sevilla, hoy por hoy, es en definitiva un aut¨¦ntico reh¨¦n del PA, y por ende del se?or Rojas-Marcos.

Pienso sinceramente que mientras tengamos un alcalde obsesionado solamente por mantenerse en el cargo, puede estar tranquilo el se?or Rojas-Marcos de seguir manejando en la sombra los destinos de esta ciudad.