QUIEREN CONVIVIR CON LAS AVES

En las cercan¨ªas del nacimiento del Ebro, a la sombra de un denso bosque de robles y hayas y entre h¨²medas prader¨ªas, los 200 habitantes de Villaescusa de Enmedio (75 kil¨®metros al sur de Santander, camino de Castilla) conviven con una poblaci¨®n de casi un centenar de cig¨¹e?as que anidan en las choperas y, naturalmente, en la torre de la iglesia. Con abundantes reptiles y toda clase de insectos, el lugar ser¨ªa un verdadero balneario para las zancudas si un cable de tendido el¨¦ctrico no atravesara el pueblo sobre los tejados y el transformador estuviese encerrado en una estructura aislante. Numerosos cigo?inos perecen electrocutados en el curso de sus primeros vuelos sobre la muy ecol¨®gica comarca. Inquietos por el normal desarrollo e incremento de la colonia, los vecinos se han puesto en contacto con el Gobierno regional y han obtenido la promesa de la Consejer¨ªa de Ganader¨ªa para poner en marcha diversas acciones en la red el¨¦ctrica. Carlos Linares, concejal del Ayuntamiento de Enmedio al que pertenece la aldea, ha sugerido al m¨¢ximo responsable en cuestiones de electrificaci¨®n rural, Carlos de Nicol¨¢s, personado en el pueblo, la conveniencia del soterramiento del tendido causante de la muerte de las cr¨ªas mientras el transformador que perturba su vuelo tambi¨¦n dejar¨¢ de ser un peligro.-