Ensayos para actuar en la vida
J¨®venes de cuatro pueblos de Sevilla se sacuden complejos con una gira de teatro
Subir a un escenario es una buena terapia para adolescentes desnortados. La seguridad que dan las tablas se convierte en un instrumento indispensable para andar por la vida y atreverse a tomar decisiones sin comulgar con la mayor¨ªa. Los 13 chicos de Tocina (Sevilla) que esta noche actuar¨¢n en el teatro municipal de Los Palacios y Villafranca son ya especialistas en 'salvar escollos'.
'Nosotros no tenemos tiempo de ir al botell¨®n. Esto es mucho m¨¢s divertido', comenta Roc¨ªo Jim¨¦nez, de 16 a?os y miembro del grupo Zapping que inicia esta noche su gira por la provincia de Sevilla con Sketch, una obra en la que todos hacen de todo.
Desde F¨¦liz Le¨®n, que tiene 12 a?os y es el peque?o de la compa?¨ªa, hasta Juan Miguel Salinas, de 18 a?os, los chicos de Zapping han aprendido a cantar, bailar, decir sus propios textos y, lo que es m¨¢s importante para mantener el tipo: improvisar cuando se equivocan.
El pasado 17 de marzo estrenaron Sketch en Tocina, un pueblo de 9.000 habitantes que est¨¢ a unos 40 minutos de Sevilla. 'En la sala del centro c¨ªvico Tom¨¢s y Valiente de Los Rosales hay 200 butacas, pero entraron muchos m¨¢s. La gente se sent¨® en el suelo y algunos se quedaron fuera. Nadie se quer¨ªa perder el acontecimiento', comenta Jos¨¦ Serrano, t¨¦cnico de cultura del Ayuntamiento de Tocina.
Los nuevos teatreros participan en el Circuito Provincial de Teatro Joven Experiencias Creativas, un proyecto de la Diputaci¨®n de Sevilla en colaboraci¨®n con los ayuntamientos de Casariche, Tocina, Pilas y Los Palacios y Villafranca. En cada uno de estos pueblos se ha creado un grupo a partir de los talleres impartidos por la Diputaci¨®n. A estos aprendices de actores les ha llegado la hora de demostrar lo que han aprendido y, entre el 6 de abril y el 26 de mayo, estar¨¢n de gira por los cuatro pueblos. 'Me gusta m¨¢s el cine, pero esto del teatro no est¨¢ nada mal', dice Juan Miguel Salinas, el mayor del grupo que hace de agricultor y enamorado en la obra y quiere estudiar Derecho. 'Si, derecho al campo', bromea una compa?era.
Mar¨ªa Celeste, argentina de 16 a?os y estudiante de primero de bachillerato, asegura que nadie se ha peleado durante la asignaci¨®n de papeles. 'Cada uno escogimos lo que m¨¢s nos gustaba. Yo interpreto a una poetisa y a la psiquiatra', a?ade Mar¨ªa que vive en Tocina hace 7 a?os y es la ¨²nica de la compa?¨ªa que quiere estudiar Arte Dram¨¢tico.
Para Mari Carmen Garc¨ªa, de 17 a?os, el encuentro con el teatro ha sido un flechazo. Convence a sus padres para que la lleven al Lope de Vega o a la sala Imperdible y, como buena espectadora, tiene su propio criterio. 'Esta ma?ana hemos ido a ver Hip¨®lito en el festival Grecolatino de San Jos¨¦ de la Rinconada y han estado bien, pero les fall¨® el volumen', comenta Mari Carmen que ya sabe del esfuerzo que supone proyectar la voz hasta el fondo de una sala.
Zapping y su texto justiciero
Jos¨¦ Miguel Medina, 16 a?os, encarna a un gal¨¢n bastante chulesco que intenta ligar y acaba lleno de moratones. 'Yo siempre estoy hablando, as¨ª que eso es lo que hago en escena. No paro y no lo dejo intercalar palabra', dice Ver¨®nica Rodr¨ªguez, de 16 a?os, y contrincante de Jos¨¦ Miguel en escena. ?sta es una de las 22 escenas con lasque los 13 chavales de Tocina intentan hacer justicia social a su manera. Sketch es una obra de creaci¨®n propia en la que todos ellos han puesto algo de su cosecha. 'Durante tres meses hemos trabajado bastante y no s¨®lo en la interpretaci¨®n, sino tambi¨¦n en cosas m¨¢s b¨¢sicas que son necesarias antes de subir a un escenario. Han aprendido nociones de dicci¨®n, a subir el volumen de la voz, la coordinaci¨®n en el baile y, especialmente, hemos conseguido que pierdan la verg¨¹enza propia de los adolescentes. Incluso bailan todos juntos un tema de Rafaella Carr¨¤', comenta Esther Parralo, actriz y monitora que ha trabajado con el grupo y dirige este espect¨¢culo. 'Ellos no ten¨ªan mucha idea de lo que es el teatro contempor¨¢neo. Su conocimiento previo se aproximaba m¨¢s a Los Morancos', asegura la monitora que est¨¢ orgullosa y sorprendida por los progresos que han experimentado todos los chavales. Tolerancia, locura, amor maternal, trabajo, autoritarismo, clasismo y miedo a lo desconocido son algunos de los temas que aborda este montaje de forma sencilla y directa, sin pretensiones. Las piezas, que se suceden en un escenario desnudo en el que los mismos actores hacen de mobiliario cuando es necesario, tienen bastante sentido del humor y mucha expresi¨®n corporal. Vestidos de negro riguroso los cuatro chicos y las nueve chicas de Zapping est¨¢n muy nerviosos pero saben que en cuanto suban al escenario el miedo desaparecer¨¢. 'En cuanto empezamos la obra todo rueda. Sabemos que estamos ah¨ª para pasarlo bien nosotros y el p¨²blico. Nadie nos va a juzgar', coinciden en se?alar.
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