Cosas que hacer antes de morir
Isabel Coixet termina en Canad¨¢ el rodaje de 'My life without me', un drama sobre una joven con una enfermedad incurable que produce Pedro Almod¨®var
Estamos en Vancouver, en la costa oeste de Canad¨¢. Exactamente en Surrey, un barrio marginal de viviendas de planta baja, la mayor¨ªa destartaladas, situado donde el r¨ªo Fraser desemboca en el Pac¨ªfico. El d¨ªa es espl¨¦ndido, como pocos aqu¨ª. Luce un sol inusual, pero en el jard¨ªn trasero de una de las casas llueve torrencialmente. Una mujer joven aguanta el chaparr¨®n con la mirada perdida. Frente a ella, otra mujer, embozada en un mono impermeable azul marino que le da un aire de cosmonauta, la escudri?a tras el objetivo de una pesada c¨¢mara que acarrea a duras penas. No es que el aguacero selectivo sea un capricho del clima, sino que responde a una exigencia del gui¨®n de la pel¨ªcula My life without me (Mi vida sin m¨ª), cuyo rodaje acab¨® en la madrugada del pasado s¨¢bado. Aclarado esto, queda decir que la dama del chubasquero es Isabel Coixet (Barcelona, 1962), directora del filme, y la chica empapada, la actriz Sarah Polley (Toronto, Canad¨¢, 1979), la protagonista.
Es el pen¨²ltimo d¨ªa de un rodaje que empez¨® el pasado 24 de marzo, y el cansancio apenas ha hecho mella en el equipo, integrado por espa?oles y canadienses. La combinaci¨®n de nacionalidades se debe a que la cinta, cuyo presupuesto asciende a 2,5 millones de d¨®lares estadounidenses (2,2 millones de euros) es una coproducci¨®n entre la compa?¨ªa El Deseo, de los hermanos Pedro y Agust¨ªn Almod¨®var, con participaci¨®n mayoritaria en el negocio, y My Life Productions, con sede en Vancouver. Desde el ¨²ltimo meritorio hasta la primera actriz atribuyen el buen ambiente reinante a la profesionalidad de la directora, a su car¨¢cter afable y a la fuerza de la historia que cuenta My life..., con la que se han implicado de lleno. Una historia que impresion¨® a Isabel Coixet cuando, hace cinco a?os, ley¨® el cuento en el que se basa, Pretending the bed is a raft, de la autora estadounidense Nanci Kincaid. 'Ese relato despert¨® algo en m¨ª', recuerda la directora. Cuando le mostr¨® a la productora Esther Garc¨ªa, de El Deseo, la adaptaci¨®n que hab¨ªa escrito para el cine, ¨¦sta tambi¨¦n se sinti¨® conmovida, y se convirti¨® en ac¨¦rrima defensora del proyecto en los despachos de los Almod¨®var.
Se centra My life... en los ¨²ltimos d¨ªas de la vida de Ann (Sarah Polley), de 23 a?os, madre de dos ni?as de siete y cinco a?os, a la que acaban de diagnosticar una enfermedad incurable. Lejos de hundirse, esta joven con escasos alicientes -trabaja como limpiadora en la universidad, su padre est¨¢ en la c¨¢rcel, su madre es una amargada y su marido, un pusil¨¢nime- toma la determinaci¨®n de mantener su dolencia en secreto y se afana en buscar la felicidad de su familia y amigos, a los que prepara, sin que lo sepan, para cuando ella falte. 'Ann es una hero¨ªna, una nueva Juana de Arco', dice Isabel Coixet sobre el personaje principal del filme. La cineasta admite sin fisuras que My life... es un drama rom¨¢ntico, pero a?ade que algunas escenas del filme incluyen un toque de humor. 'En la vida, tambi¨¦n en los momentos m¨¢s tr¨¢gicos puede suceder algo que le quita hierro a la situaci¨®n', comenta. En el cartel del filme -'exactamente el que yo quer¨ªa', revela Isabel Coixet- se mezclan actores canadienses -adem¨¢s de Sarah Polley, Amanda Plummer- con estadounidenses -Mark Ruffalo y Deborah Harry, Blondie- y europeos -Leonor Watling, Maria de Medeiros y Alfred Molina.
Se dir¨ªa que Isabel Coixet le ha pillado el punto a rodar en Norteam¨¦rica. En 1996, film¨® Cosas que nunca te dije, el largometraje con el que se dio a conocer, en la ciudad estadounidense de Portland, a dos horas y media de coche de Vancouver, si bien es verdad que, dos a?os despu¨¦s, para su siguiente cinta, A los que aman, eligi¨® Galicia. 'El relato de Nanci Kincaid se sit¨²a en Estados Unidos, y mi idea era volver a rodar ah¨ª, pero el verano pasado vine a Vancouver para filmar un anuncio con Kate Beckinsale, la protagonista de Pearl Harbour, me entend¨ª muy bien con la gente de producci¨®n, me ense?aron localizaciones que encajaban con la trama de My life..., y decid¨ª que era un buen lugar para la pel¨ªcula', explica la directora. 'Adem¨¢s', contin¨²a, 'este lugar me da un estado de ¨¢nimo que me va bien para contar este tipo de historias... Hay en la gente un desarraigo y un cuelgue, que no acabo de entender, pero que me interesa'.
Finalizada la primera fase de su obra, Isabel Coixet asegura sentirse satisfecha, tanto de su trabajo como de la labor del equipo. 'Creo que he hecho una buena pel¨ªcula, la mejor', afirma, y puntualiza que si el resultado no acaba siendo el que espera, ella responder¨¢ exclusivamente del fracaso. 'Los hermanos Almod¨®var me han dejado hacer lo que he querido, si algo va mal, ser¨¢ s¨®lo responsabilidad m¨ªa', zanja.
Tres bellas mujeres
Isabel Coixet ha elegido a tres bellezas para llevar el peso de My life without me. Sarah Polley es Ann, la protagonista; Deborah Harry, nombre real de la cantante Blondie, su madre en la ficci¨®n, y Leonor Watling, su vecina, en la que piensa como futura madre de sus hijas, una vez ella haya muerto.
Sarah Polley, famosa en Canad¨¢ tanto por su faceta interpretativa como por su activismo contra las injusticias sociales, que fue actriz infantil -actu¨® a los 10 a?os en Las aventuras del bar¨®n Munchausen, de Terry Guillian-y ha trabajado con directores como Atom Egoyan (Exotica) y David Cronnenberg (eXistenZ) est¨¢ fascinada con la manera de encarar el cine de Coixet. 'Me encanta c¨®mo maneja la c¨¢mara, c¨®mo est¨¢ continuamente pendiente de los actores. Eso nos da mucha seguridad'. Blondie comparte la impresi¨®n de Sarah Polley: 'Isabel me hace sentir relajada y, pese a que trabaja duro, me da paz'.
A Leonor Watling le aterroriza volar, y dice que si acept¨® ¨¦ste, su primer proyecto internacional, fue porque Coixet le parece 'una directora valiente y personal', y porque se ilusion¨® con su personaje, 'peque?o, pero intenso'.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.