La Administraci¨®n sigue incumpliendo las normas sobre accesibilidad en muchos edificios p¨²blicos
Las reiteradas denuncias y quejas de las asociaciones de minusv¨¢lidos no han tenido efecto
Un andaluz lastrado por alguna minusval¨ªa, o que simplemente condujera un carro de beb¨¦ o trasladara un equipaje, lo tendr¨ªa muy complicado si quisiera entrar en la Agencia Tributaria de Ja¨¦n a pagar la renta, acudir al Rectorado de C¨®rdoba, aparcar en un garaje de Granada o hacer una gesti¨®n en su Ayuntamiento. Los edificios p¨²blicos, y otros de uso general, no facilitan en muchos casos el acceso de personas con la movilidad reducida. La propia Administraci¨®n, que controla que las edificaciones de nueva planta cumplan con el decreto de accesibilidad, incumple la norma.
Ja¨¦n es un ejemplo de esta incongruente situaci¨®n. Inmuebles de todas las Administraciones siguen siendo una aut¨¦ntica pesadilla para discapacitados y personas con problemas de accesibilidad, a pesar de las constantes denuncias de la Asociaci¨®n Provincial de Minusv¨¢lidos F¨ªsicos (Aspramif). As¨ª ocurre en el edificio de la Agencia Tributaria, en la plaza de la Constituci¨®n, en el de la delegaci¨®n de la Consejer¨ªa de Salud de la Junta, en el Paseo de la Estaci¨®n, o en el edificio de Correos de los Jardinillos.
Las quejas se extienden tambi¨¦n al Ayuntamiento de la capital. Juan Manuel Olivares, responsable de accesibilidad de Aspramif, denuncia que el ¨²nico acceso apto para las personas discapacitadas, una entrada lateral por la calle Obispo Gonz¨¢lez, est¨¢ siempre cerrado, mientras que acceder a las dependencias municipales es igual de dif¨ªcil porque el ascensor 'casi nunca funciona'. Tambi¨¦n en los colegios p¨²blicos de la provincia la situaci¨®n resulta alarmante. Seg¨²n un estudio de Aspramif, de los 553 centros de la provincia s¨®lo 82 cumplen los requisitos m¨ªnimos de accesibilidad.
En C¨®rdoba tampoco faltan ejemplos. Uno de los m¨¢s llamativos es el del c¨¦ntrico inmueble que alberga las sedes del Inem, de la delegaci¨®n de Turismo y Deportes, de Comisiones Obreras y de la Confederaci¨®n de Empresarios de C¨®rdoba (Gran Capit¨¢n, 12). Para entrar hay que subir nueve escalones empinados, y no hay rampa, ni plataforma elevadora, ni ning¨²n acceso lateral alternativo que facilite las cosas a los conductores de sillas de ruedas o carritos de beb¨¦. Algo parecido sucede en el Rectorado de la Universidad de C¨®rdoba (Alfonso XIII, 19).
'Si en las pr¨®ximas elecciones se presenta un minusv¨¢lido en silla de ruedas para concejal al Ayuntamiento de Granada, m¨¢s vale que sea del partido ganador porque si se queda en la oposici¨®n, no podr¨¢ acceder a sus despachos', advierte Mart¨ªn Ortega S¨¢nchez, presidente de la Federaci¨®n Provincial de Asociaciones de Minusv¨¢lidos F¨ªsicos de Granada.
Entre los recintos m¨¢s utilizados de la ciudad, adem¨¢s del propio Ayuntamiento, se encuentra, en el centro mismo de Granada, el aparcamiento de Puerta Real abierto en septiembre de 1991 y a¨²n sin la correspondiente licencia de apertura. Ahora, 11 a?os despu¨¦s, se ha aprobado la construcci¨®n de un ascensor para cumplir la normativa y poner fin a los riesgos que sufren decenas de personas con carritos de ni?os y minusv¨¢lidos que se ven obligados a diario a bajar al aparcamiento por la rampa de los coches o, si se deciden por las estrechas escaleras, con el carrito y el ni?o a cuestas. Los minusv¨¢lidos granadinos tambi¨¦n tienen dificultades para acceder a la cultura. Ortega cita dos ejemplos: el Centro Cultural Manuel de Falla, principal sala de conciertos de m¨²sica cl¨¢sica de la ciudad, y el cine Aliatar, un antiguo teatro transformado en multicine.
En Huelva, las principales dificultades de acceso para minusv¨¢lidos se encuentran en edificios municipales. El propio Ayuntamiento onubense carece de ascensor, por lo que una persona en silla de ruedas no puede acceder, por ejemplo, salvo que reciba ayuda, al despacho del alcalde, Pedro Rodr¨ªguez (PP), ubicado en la primera planta. Las reiteradas promesas del equipo de gobierno de instalar un ascensor han quedado en nada. Adem¨¢s, para el acceso a la planta baja, en la que se hallan las oficinas destinadas a los tr¨¢mites burocr¨¢ticos, hay una entrada especialmente acondicionada para minusv¨¢lidos, pero esa puerta casi siempre est¨¢ cerrada.
Adem¨¢s, otras dos delegaciones municipales, ubicadas fuera de la Casa Consistorial, presentan dificultades insalvables para minusv¨¢lidos: la Concejal¨ªa de Bienestar Social y la sede del Patronato Municipal de Desarrollo Local.
En Sevilla, la situaci¨®n no es tan grave. La Federaci¨®n Provincial de Asociaciones de Minusv¨¢lidos F¨ªsicos de Sevilla considera que todas las Administraciones se han esforzado en los ¨²ltimos a?os por eliminar las barreras arquitect¨®nicas en los edificios p¨²blicos. No obstante, mientras que las dificultades para acceder o moverse por los inmuebles se han eliminado mediante rampas, ascensores y elevadores mec¨¢nicos, a¨²n son numerosos los edificios que no cuentan, por ejemplo, con servicios adaptados para personas con movilidad restringida, como es el caso de la Consejer¨ªa de Empleo y Desarrollo Tecnol¨®gico. Desde la federaci¨®n se subraya tambi¨¦n el caso del Hospital Virgen del Roc¨ªo, que no cuenta con habitaciones acondicionadas para minusv¨¢lidos.
La gran asignatura pendiente, seg¨²n la federaci¨®n, sigue siendo la de la adaptaci¨®n de los centros educativos, as¨ª como la de algunos edificios protegidos, como la Plaza de Espa?a o el Teatro Lope de Vega. Adem¨¢s, los minusv¨¢lidos se quejan de que los edificios p¨²blicos suelen tener un suelo muy resbaladizo. 'Es mucho m¨¢s complicado controlar la silla de rueda o andar con bastones o muletas', se quejan.
Este reportaje ha sido elaborado con informaci¨®n de Gin¨¦s Donaire; Javier Arroyo, Luis Eduardo Siles, Mar¨ªa H. Mart¨ª y Reyes Rinc¨®n.
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