Entrenados para salvar vidas
Un bombero almeriense y un perro abandonado se especializan en rescates
Hay ocasiones en las que la amistad brota del modo m¨¢s inesperado, en las que algunas almas, aparentemente dispares y alejadas, se cruzan en el camino y encajan como si cada una de ellas fuese la pieza de un puzzle que le faltaba a la otra. Algo as¨ª es lo que le ocurri¨® a Juan Carlos Segura Gil y a Sakanu cuando ambos se conocieron a principios de abril en La L¨ªnea de la Concepci¨®n (C¨¢diz). Juan Carlos es un bombero almeriense de 32 a?os. Sakanu, un cocker spaniel, negro, de tres a?os. Desde que se conocieron, y tras pulir con t¨¦cnicas especializadas su ¨¢nimo solidario, conforman un compenetrado equipo preparado para intentar salvar vidas humanas en situaciones de cat¨¢strofe.
Juan Carlos Segura y Sakanu superaron en abril un curso internacional de gu¨ªas y perros de rescate en escombros que fue impartido en La L¨ªnea por Jaime Parejo Garc¨ªa, jefe de la unidad canina de los bomberos de Sevilla y padre del m¨¦todo Arc¨®n, reconocido como una de las t¨¦cnicas m¨¢s eficaces para el rescate de personas atrapadas bajo escombros.
Entre los participantes en el curso hab¨ªa profesionales llegados de distintos puntos de Andaluc¨ªa y Espa?a y de pa¨ªses como Colombia, M¨¦xico o Panam¨¢. Pertenec¨ªan a cuerpos de polic¨ªa, bomberos o grupos de operaciones de socorro de Cruz Roja. S¨®lo tres participantes con sus respectivos canes lograron superar el curso de gu¨ªas y perros de rescate. Entre ellos estaban Sakanu y Juan Carlos Segura, que se ha convertido en el primer bombero de Almer¨ªa especializado en tan dif¨ªcil tarea.
Pero, si resulta admirable el logro de este equipo al superar tan exigente curso, m¨¢s llamativo es el hecho de que Juan Carlos y su perro ni siquiera se conoc¨ªan cuando empezaron a prepararse juntos en el curso. El bombero almeriense hab¨ªa acudido a la L¨ªnea de la Concepci¨®n con Molo, un perro de agua espa?ol al que ten¨ªa en casa desde hac¨ªa dos a?os. Sin embargo, apenas hab¨ªan pasado tres d¨ªas desde el inicio del curso, cuando Molo qued¨® descartado. 'Fracas¨® porque ten¨ªa hiperdependencia hacia el gu¨ªa, es decir, hacia m¨ª. Eso le hac¨ªa no apto para poder actuar en tareas de rescate. Cuando me dijeron que Molo hab¨ªa fracasado sent¨ª que me hund¨ªa. Entonces le ped¨ª a Jaime Parejo que me dejara buscar otro perro. Accedi¨® y estuve dando vueltas por las perreras y los centros de acogida de animales de La L¨ªnea. As¨ª fue como conoc¨ª a Sakanu, un perro que hab¨ªa sido abandonado', explica Juan Carlos Segura.
Result¨® que Sakanu ten¨ªa madera para entrenarse en las t¨¦cnicas que se le exig¨ªan. Era como si hubiera nacido para ayudar, y hasta en eso coincidi¨® con el que ahora es su due?o. Y es que Juan Carlos Segura, que comenz¨® a trabajar como bombero con 21 a?os, conserva intacta su vocaci¨®n por salvar vidas.
El nombre de los animales
La familia de Juan Carlos Segura ha aceptado a Sakanu como un miembro m¨¢s. 'Es muy importante que quienes viven contigo se impliquen con el perro porque necesita unos cuidados especiales, hay que tratarlo con mucho cari?o para que aprenda a reconocer a los seres humanos como sus amigos. Eso le motivar¨¢ a la hora de buscar a personas atrapadas, porque ¨¦l entender¨¢ que est¨¢ buscando a un amigo', afirma Segura. El nombre del perro tambi¨¦n tiene su historia. 'Cuando lo recog¨ª', explica Segura, 'me dijeron que se llamaba Kanu. Aunque no sab¨ªa por qu¨¦ lo hab¨ªan abandonado, no quer¨ªa llamarlo igual que lo llamaban sus antiguos due?os, pero tampoco quer¨ªa variarle mucho el nombre. ?l me estaba salvando a m¨ª porque era mi posibilidad para tener un perro con el que hacer el curso y yo lo salvaba a ¨¦l de su situaci¨®n de abandono. Por eso pens¨¦ a?adirle la s¨ªlaba 'sa' y llamarlo Sakanu'. Los perros tambi¨¦n est¨¢n vinculados al m¨¦todo Arc¨®n, nombre del primer ejemplar con el que trabaj¨® el bombero Jaime Parejo Garc¨ªa. Este sistema, que recibi¨® en 1998 el Premio Nacional de Investigaci¨®n de la Real Sociedad Canina de Espa?a, permiti¨® rescatar con vida a una persona que llevaba siete d¨ªas sepultada bajo escombros tras el gran terremoto que sufri¨® Turqu¨ªa en 1999. Juan Carlos Segura y Sakanu se han entrenado en ese m¨¦todo y el bombero almeriense no acierta a encontrar palabras de elogio para su instructor, que ha colaborado tambi¨¦n en tareas de rescate con perros en cat¨¢strofes ocurridas en pa¨ªses como Taiwan o Colombia. El proceso de aprendizaje de este m¨¦todo se basa en siete t¨¦cnicas que se apoyan en inculcar al perro tres par¨¢metros concretos: motivaci¨®n, autonom¨ªa y concentraci¨®n. Una de esas t¨¦cnicas es la denominada 'posici¨®n maniqu¨ª'. Consiste en que el perro disocie al gu¨ªa como elemento de apoyo. 'El gu¨ªa debe quedarse inm¨®vil para potenciar el nivel de concentraci¨®n y autonom¨ªa del perro en la b¨²squeda. Cuando localiza el lugar en el que hay una persona sepultada, entonces le haces ver lo contento que est¨¢s, lo bien que ha hecho su trabajo, para que se sienta reforzado y querido', explica Juan Carlos Segura.
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