Pujol pide al Gobierno del PP m¨¢s eficacia en la expulsi¨®n de extranjeros sin papeles

Jordi Pujol expres¨® ayer en el Parlament su decepci¨®n por la, a su juicio, insuficiente actuaci¨®n del Ejecutivo de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar en la repatriaci¨®n de inmigrantes ilegales a sus pa¨ªses de origen. El presidente de la Generalitat recrimin¨® al Gobierno central que en Catalu?a s¨®lo expulsara en 2001 a menos de 200 emigrantes extranjeros que estaban en situaci¨®n ilegal y le apremi¨® a ser m¨¢s diligente. La izquierda y el PP ofrecieron a Pujol un acuerdo sobre pol¨ªtica de inmigraci¨®n. La respuesta del presidente fue considerar que este acuerdo ya existe.

Los tres grupos parlamentarios de la izquierda catalana ofrecieron ayer su apoyo y colaboraci¨®n al presidente Pujol en la batalla para conseguir que la Generalitat pueda intervenir en la fijaci¨®n de los contingentes anuales de inmigrantes extranjeros.

El socialista Pasqual Maragall, el republicano Josep Llu¨ªs Carod y el ecosocialista Rafael Rib¨® formularon este ofrecimiento en el debate sobre la inmigraci¨®n en que se convirti¨® ayer el turno de preguntas al presidente del Gobierno catal¨¢n. Pujol acogi¨® encantado la oferta.

En sus respuestas a los diputados, Pujol explic¨® que considera 'insuficientes' las competencias de la Generalitat en materia de inmigraci¨®n, tanto desde el punto de vista pol¨ªtico como econ¨®mico. El instrumento que ech¨® en falta es la capacidad de decidir el cupo anual de inmigrantes que se debe admitir y el rechazo del Gobierno central a facilitar a la Generalitat la apertura de oficinas para contratar a trabajadores extranjeros en sus pa¨ªses de or¨ªgen. Pujol dijo que este a?o los 29.215 alumnos de origen inmigrante que van a las escuelas p¨²blicas le cuestan al presupuesto catal¨¢n 13.000 millones de pesetas (78 millones de euros). En total, cifr¨® en 50.000 millones de pesetas (300 millones de euros) anuales el montante presupuestario que se destina a acoger a los inmigrantes.

En su respuesta a Carod, el presidente destac¨® que Catalu?a recibe m¨¢s inmigraci¨®n que ninguna otra comunidad aut¨®noma 'y a un ritmo muy r¨¢pido'. Se?al¨® que la muy numerosa inmigraci¨®n magreb¨ª y subsahariana plantea una 'problem¨¢tica religiosa' espec¨ªfica; indic¨® que la particularidad de la tambi¨¦n muy numerosa inmigraci¨®n suramericana es que resulta 'de integraci¨®n mucho m¨¢s f¨¢cil en Madrid o Sevilla que en Catalu?a'. Y aunque calific¨® de 'muy particulares' las caracter¨ªsticas de la inmigraci¨®n paquistan¨ª, no precis¨® el porqu¨¦.

La apelaci¨®n a controlar la inmigraci¨®n que realizaron Maragall, Carod y Rib¨® fue acogida jubilosamente por Pujol como una rectificaci¨®n de la anterior defensa de una pol¨ªtica de papeles para todos. Aprovech¨® la paz que le ofrec¨ªa Maragall para recriminarle que el martes hubiera dicho que, en materia de inmigraci¨®n, 'las derechas ladran mucho' pero 'no hacen nada'. Los diputados de la izquierda exigieron la aplicaci¨®n de la legalidad vigente, tanto para 'excluir la intolerancia racial y el integrismo religioso', dijo Maragall, como para perseguir, seg¨²n pidi¨® Carod, 'la sobreexplotaci¨®n de los inmigrantes que no tienen papeles' en empresas y alojamientos.

Como suele hacer en las sesiones de preguntas a Pujol, el presidente del PP, Alberto Fern¨¢ndez D¨ªaz, dedic¨® la mayor parte de su tiempo a atacar a la izquierda en general y a los socialistas en particular. Ayer tambi¨¦n, aunque se mostr¨® 'abierto' al di¨¢logo y al consenso en la pol¨ªtica sobre la inmigraci¨®n. No obstante, puso como condici¨®n que se articule 'en torno' a las posiciones del PP y la 'escrupulosa aplicaci¨®n de la ley'.

Todo esto no le sirvi¨® para evitar que Pujol arremetiera, suave en la forma pero duro en el fondo, contra el Gobierno de Aznar por 'no hacer absolutamente nada' en la expulsi¨®n de inmigrantes ilegales. Es decir, por no aplicar la Ley de Extranjer¨ªa. Pujol asegur¨® que casi todos los 240 expulsados en el ¨²ltimo a?o eran 'delincuentes'. Lo que el Ejecutivo espa?ol no hace, afirm¨®, es ir a buscar a los inmigrantes ilegales' para repatriarlos.