Unamuno para ingleses
El mundo anglosaj¨®n, fuera del ¨¢mbito bien delimitado del hispanismo, se resiste a aceptar la relevancia de Unamuno en la historia intelectual del siglo XX. El presente libro es por tanto una aportaci¨®n doblemente interesante: porque plantea de forma novedosa la contribuci¨®n unamuniana al pensamiento cient¨ªfico-human¨ªstico de su ¨¦poca y porque va dirigida a lectores de habla inglesa y se fundamenta en una bibliograf¨ªa mayoritariamente en lengua inglesa (que abarca las traducciones al ingl¨¦s de autores no brit¨¢nicos tales como Freud y Lacan). El t¨ªtulo podr¨ªa traducirse como 'desnudar la mente: Unamuno, lo desconocido, y las vicisitudes del yo'.
La autora se propone revisar a Unamuno reincorpor¨¢ndolo a su ¨¦poca y a su mundo, un mundo fundamentalmente cient¨ªfico, de nuevas maneras de pensar, pero de pensar con rigor. En la primera parte del estudio la doctora Sinclair demuestra que Unamuno no fue anticient¨ªfico, sino que se abri¨® a las nuevas corrientes cient¨ªficas, incluido el darwinismo, y se mantuvo informado sobre las nuevas ideas tanto en psicolog¨ªa como en f¨ªsica y matem¨¢ticas.
UNCOVERING THE MIND. UNAMUNO, THE UNKNOWN AND THE VICISSITUDES OF SELF
Alison Sinclair
Manchester University Press
Manchester, 2001
248 p¨¢ginas. 14,99 libras
La segunda parte del estudio comprende un acercamiento psicoanal¨ªtico a cuatro novelas, una obra de teatro y la agen¨¦rica C¨®mo se hace una novela. Comenzando con Niebla y El otro, la autora interpreta estas obras como una lucha a muerte entre autor y personaje, lucha por ejercer el poder para automanifestarse y combatir la radical inseguridad del yo, interesante planteamiento que, al menos en Niebla, se hubiese beneficiado de una mayor distinci¨®n -o vinculaci¨®n- entre el Unamuno-personaje y el Unamuno hist¨®rico. Para el an¨¢lisis de La t¨ªa Tula, Sinclair deja de lado el tradicional acercamiento religioso (el hogar como convento) a favor del concepto kleineano de la envidia. Gertrudis se convierte as¨ª no en un personaje-agonista, sino en un objeto de envidia. Seg¨²n Klein, la envidia hace que el poseedor de lo que es anhelado sea denigrado. En el caso de Unamuno, el sujeto deseante es un var¨®n que desea poseer aquellas cualidades femeninas de las que carece, y este anhelo se delata en una presentaci¨®n de una figura femenina que resulta no s¨®lo enigm¨¢tica y contradictoria, sino que adem¨¢s encarna un estado destructivo y perjudicial. En la novela corta Dos madres, la viudez de Raquel simboliza un vac¨ªo que hay que rellenar.
En su estudio de Abel S¨¢nchez, la autora consigue ingeniosamente darle una vuelta de campana al texto. El degenerado (en el sentido que le dio al t¨¦rmino Max Nordau) y envidioso no es tanto Joaqu¨ªn como Abel, que utiliza la actitud pasiva para provocar a Joaqu¨ªn y hacer que ¨¦ste parezca el envidioso. En Don Sandalio hallamos parecido desplazamiento. La historia de don Sandalio que cuenta el autor de las cartas es sustituci¨®n de una relaci¨®n original demasiado dolorosa. Don Sandalio, con sus graves problemas silenciados, es el espejo de un narrador que reh¨²ye el hablar de los suyos propios.
En C¨®mo se hace una novela, tenemos la construcci¨®n de un texto erigido como desesperada defensa contra un sentimiento de la nada que amenaza con engullir al escritor, pero resulta una estrategia defensiva que llega a tornarse en obsesi¨®n persecutoria: cuanto m¨¢s se vuelca el escritor en sus escritos, m¨¢s cercano est¨¢ al borde de la nada. Unamuno emerge finalmente de esta inmersi¨®n psicoanal¨ªtica como un neur¨®tico total, pero un neur¨®tico que se enfrent¨® con aquellos aspectos m¨¢s espinosos de la naturaleza humana que se debatieron en la ¨¦poca en que le toc¨® vivir.
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