Cr¨ªticas de los liberales contra la ampliaci¨®n de poderes del FBI

El fiscal general de Estados Unidos, John Ashcroft, ha otorgado poderes adicionales al FBI en una maniobra que, seg¨²n los cr¨ªticos, ampl¨ªa su capacidad de movimiento mediante una nueva erosi¨®n de las libertades individuales. A partir de ahora, los agentes pueden buscar al azar presuntas conductas delictivas en Internet (hasta ahora s¨®lo pod¨ªan investigar en la red si hab¨ªa una acusaci¨®n concreta) y pueden asistir clandestinamente a reuniones de car¨¢cter religioso o pol¨ªtico aunque no existan sospechas ni sospechosos entre los asistentes.

The New York Times ataca la decisi¨®n con dureza: 'En realidad, Ashcroft, en nombre de la lucha contra el terrorismo, da a los agentes del FBI un poder desenfrenado para hurgar en los asuntos de cualquier ciudadano de EE UU, incluso aunque no haya ninguna prueba de actividades ilegales. Ashcroft y sus colegas no han dejado pasar una sola oportunidad desde el 11-S para expandir los poderes de investigaci¨®n del Gobierno federal y lograr el apoyo r¨¢pido del Congreso mediante la sugerencia de que oponerse a ello es desleal'.

Ashcroft respondi¨® ayer a ese editorial durante una entrevista en la CNN: 'Rechazo lo que dice ese diario, porque es absolutamente falso. Los nuevos poderes est¨¢n limitados a actividades p¨²blicas, no privadas. No son cambios legales, ni constitucionales, son cambios en las regulaciones internas del FBI, que estaban dise?adas para enfrentarse a los conflictos de los a?os setenta'.

'Me extra?a que se vea como una amenaza algo tan simple como permitir al FBI navegar por Internet para detectar p¨¢ginas en las que se explica c¨®mo fabricar bombas. No lo entiendo', dec¨ªa Ashcroft con asombro. Los portavoces del Centro de Derechos Constitucionales aseguran que el objetivo de Ashcroft es 'espiar a organizaciones pol¨ªticas y religiosas y recopilar informaci¨®n de individuos' no sujetos a sospecha alguna.