Una cita ineludible en defensa de nuestros derechos

Los andaluces tenemos ma?ana domingo una cita ineludible en Sevilla. La manifestaci¨®n convocada por UGT y CCOO y respaldada por todos los partidos pol¨ªticos, colectivos sociales y ciudadanos, a excepci¨®n del PP, ser¨¢, sin duda, exponente incuestionable del rotundo rechazo de los trabajadores andaluces a la reforma del desempleo y de su apoyo a la huelga general del 20-J. Una prueba de la que el Gobierno deber¨ªa tomar buena nota desde su pedestal de poder.

Una vez m¨¢s, el Gobierno del se?or Aznar, utilizando como argucia una v¨ªa de urgente necesidad y, por tanto, provocando un fraude constitucional, agrede al conjunto de las trabajadores de nuestro pa¨ªs y se ensa?a en particular con los andaluces y extreme?os.

La mal llamada Reforma para la Mejora del Sistema de Protecci¨®n por Desempleo y Mejora de la Ocupabilidad significa el m¨¢s sangrante recorte de derechos contra los trabajadores puesto en marcha desde el inicio de la etapa democr¨¢tica en nuestro pa¨ªs, incidiendo con mayor sa?a en los trabajadores que est¨¢n en peor situaci¨®n en nuestro mercado de trabajo. A ello hay que a?adir, el ataque indiscriminado y la criminalizaci¨®n que el Gobierno del se?or Aznar ha hecho de los trabajadores en paro, como ¨²nica argumentaci¨®n justificatoria.

Con esta reforma, ya en vigor, y la eliminaci¨®n de los salarios de tramitaci¨®n, los trabajadores se encuentran indefensos ante el recorte de sus derechos, y est¨¢n padeciendo el abaratamiento y facilitaci¨®n de su despido, y viendo mermada la protecci¨®n que hasta hace unos d¨ªas les proporcionaba el seguro de desempleo por el que han cotizado previamente. Todo ello, con unos ¨²nicos beneficiarios: los empresarios, que ver¨¢n incrementadas sus ganancias a costa de las rentas de los trabajadores.

El conjunto de colectivos que conforman nuestro mercado de trabajo, entre los que destacan los fijos-discontinuos, los mayores de 52 a?os prejubilados, los j¨®venes y mujeres, entre otros, est¨¢n empezando a padecer con el Decretazo un recorte y una expropiaci¨®n de derechos consolidados que van a incidir notablemente en su condici¨®n de trabajador, as¨ª como en su propia dignidad como persona.

Pero si todos estos hechos son graves para el conjunto de trabajadores del pa¨ªs, en Andaluc¨ªa la situaci¨®n es a¨²n peor, ya que a todo ello hay que unir la reforma del subsidio agrario, reforma con la que se atenta contra un pilar del sistema de protecci¨®n que ha permitido dignificar al trabajador del campo, fijarlo en su poblaci¨®n y generar rentas complementarias que han posibilitado la dinamizaci¨®n econ¨®mica de nuestros pueblos, al mismo tiempo que ha mejorado notablemente las infraestucturas viarias, econ¨®micas, de servicio y de ocio.

Los hechos demuestran que el Sistema de Protecci¨®n Agrario, que se inici¨® en 1984, ha tenido un indudable componente positivo en la reducci¨®n de los desequilibrios regionales de Andaluc¨ªa y Extremadura. Con la reforma acordada con los sindicatos en 1997 se mejoraron aquellos elementos que imped¨ªan hacer frente a los problemas econ¨®micos y sociales que padec¨ªan las personas que dependen de la actividad agr¨ªcola eventual en las comunidades aut¨®nomas de Andaluc¨ªa y Extremadura.

Pues bien, las circunstancias que generaron la puesta en marcha de este sistema de protecci¨®n no han cambiado sustancialmente y por lo tanto, no existe justificaci¨®n alguna para la extinci¨®n o muerte lenta del subsidio.

Frente a las manipuladoras e interesadas mentiras del Gobierno del se?or Aznar, asegurando que el subsidio agrario se mantiene, la realidad es que una vez que se apliquen las condiciones y requisitos que con car¨¢cter general establece el Decreto para la Protecci¨®n por Desempleo, la expulsi¨®n de los trabajadores del subsidio agrario ser¨¢ masiva e inmediata, impidiendo su acceso a los que lo soliciten por primera vez, a los que no hayan sido beneficiarios en los tres a?os anteriores y a los que hayan extinguido su derecho por sanci¨®n administrativa. Todo ello supondr¨¢ para los trabajadores agrarios la eliminaci¨®n de su derecho a la protecci¨®n, en un colectivo que se encuentra en una situaci¨®n de desempleo muy grave, con el consiguiente perjuicio sobre el tejido econ¨®mico y social de nuestros pueblos.

Por todo lo expuesto, los trabajadores de Andaluc¨ªa debemos dar un grito desde lo m¨¢s profundo de nuestras gargantas, demandando y exigiendo empleo y protecci¨®n social. Son nuestros derechos. En definitiva, m¨¢s justicia social, y esto lo podemos hacer en todos los puntos de Andaluc¨ªa, pero ma?ana domingo, lo tenemos que hacer presente en Sevilla. Debemos abarrotar las calles de la capital de Andaluc¨ªa para que nuestros gritos se dejen o¨ªr y se escuchen en Madrid.

Dionisio Valverde Pozo es secretario de Pol¨ªtica Institucional y Di¨¢logo Social de UGT-A.