'Gran Hermano' en barracones

Los brit¨¢nicos se olvidaron en 1962 de los dos a?os de mili obligatoria. Cuatro d¨¦cadas m¨¢s tarde, el servicio militar vuelve a estar de actualidad en un programa de televisi¨®n que intenta descubrir si los j¨®venes de hoy en d¨ªa son tan duros y disciplinados como sus abuelos. 'En la sociedad actual, el ¨¦nfasis se pone en el individuo, en sus necesidades y espacio personal. Queremos probar si la generaci¨®n de la Playstation se ha ablandado', se?ala Meredith Chambers, productora del reality show Lads Army, algo as¨ª como El ej¨¦rcito de los chavales.

Cuarenta voluntarios, con edades entre 18 y 24 a?os, se alistaron a Lads Army y siguen estricta instrucci¨®n desde el 1 de junio en un viejo recinto militar del sur de Inglaterra. Forman un grupo variopinto -desde un jardinero a un pinchadiscos pasando por un profesional del striptease- que convivir¨¢ cuatro semanas en barracones sin ninguna de las comodidades modernas. Se perder¨¢n incluso el Mundial de F¨²tbol, ya que el programa recrea las condiciones del servicio militar de los a?os cincuenta.

Agua fr¨ªa, trato denigrante y ¨®rdenes a voz en grito resumen el r¨¦gimen imperante en esta versi¨®n televisada del Ej¨¦rcito. En el primero de los 10 programas previstos, los reclutas se dividieron en dos grupos bajo el mando de sendos sargentos mayores. Pronto les cay¨® una lluvia de insultos -'gordo bastardo', entre los m¨¢s suaves- y humillantes castigos que borraron de un plumazo la sonrisa del rostro de los m¨¢s ingenuos. Pero los voluntarios s¨®lo comprendieron las repercusiones de su iniciativa tras el obligatorio rapado de cabeza y al entrar en contacto con la tela ¨¢spera de los uniformes.

Dejaron entonces de ser civiles y comenzaron a comportarse como genuinos soldados. La jornada, de 6.30 a 22.30, implica marchas de 15 kil¨®metros, ejercicios en las trincheras, combates con bayoneta, limpieza de las letrinas con cuchillas de afeitar y otras horribles faenas. Impera un ambiente competitivo pese a que el orgullo de superar a la tropa rival es el ¨²nico incentivo en el horizonte.

?Qu¨¦ lleva a los voluntarios a participar en esta versi¨®n castrense de Gran Hermano en la cadena ITV? Gozar de cinco minutos de fama tiene algo que ver, pero el motivo dominante consiste en probarse ante s¨ª mismos. 'Quiero conocer mis l¨ªmites', confiesa uno ante las c¨¢maras. 'Mi abuelo ya no podr¨¢ echarme en cara que no he hecho la mili', se?ala otro.

Lads Army est¨¢ ganando p¨²blico gradualmente, y en su segunda semana, con 5,7 millones de espectadores, se hizo con el 27% del total de audiencia de su franja horaria. La nostalgia por una era del pasado, adem¨¢s de las humillaciones que sufren los participantes ante las c¨¢maras de televisi¨®n, ayuda al ¨¦xito del programa. Est¨¢ resultando m¨¢s popular que Experiment, un pol¨¦mico reality show con carceleros y presos dentro de una instituci¨®n penal, que s¨®lo moviliz¨® al 6% de la audiencia.

Gran Hermano cre¨® un g¨¦nero de televisi¨®n que se propaga en el Reino Unido como una epidemia. Entre los favoritos, los programas de ambiente hist¨®rico en los que los voluntarios se prestan a vivir en las condiciones del primer a?o del siglo XX -The 1900 House-, de la II Guerra Mundial -The 1940s House-, o como arist¨®cratas y sirvientes -The Edwardian Country House-.