Alrededor de 400 autores firmaron ejemplares el ¨²ltimo fin de semana

Fue un fin de fiesta entre derretido y euf¨®rico. M¨¢s de 400 autores quisieron buscar el calor de sus lectores y se encontraron doble raci¨®n, porque la temperatura ambiente llegaba a los 40 grados. Pero ¨¦ste no era argumento suficiente para los lectores de Elvira Lindo, Antonio Gala, Carmen Alborch o Juan Jos¨¦ Mill¨¢s, que ayer por la tarde echaban los ¨²ltimos aut¨®grafos de la Feria del Libro de Madrid escondidos entre colas cuantiosas.

Ayer llegaron las ¨²ltimas solaneras y todo el mundo trataba de buscar la sombra y los refrescos para aguantar el tir¨®n y realizar las ¨²ltimas compras. Sobre todo los de las casetas a las que les ha dado el sol de cara, donde est¨¢, por ejemplo, la de la librer¨ªa Ciudad de los Poetas, de Luis Sotuela, librero y editor 'independiente', seg¨²n se define ¨¦l, due?o del sello Eneida.

Sotuela custodiaba los ejemplares de su colecci¨®n Semblanzas, biograf¨ªas de escritores de peso como Jos¨¦ Hierro, Le¨®n Felipe o Nicanor Parra, y coincid¨ªa hasta con los grandes grupos con el resumen general de la feria, que, con quien quiera que hablaras ayer, era ¨¦ste: 'Mejor que el a?o pasado'. Buenas ventas, mucho p¨²blico, m¨¢s que los 2,5 millones de visitantes de 2001, y una impresionante sensaci¨®n de contacto directo entre lectores y escritores son algunas de las cosas que destaca Antonio Albarr¨¢n, director del evento.

De esto sab¨ªan lo suyo algunos campeones de las colas en esta edici¨®n, como Juan Jos¨¦ Mill¨¢s o Carmen Alborch, que han firmado todos los fines de semana ejemplares de sus libros Dos mujeres en Praga (Espasa), el primero, y de Malas (Aguilar), la segunda. La mu?eca les echaba humo, aunque para Mill¨¢s es mucho mejor mantenerla en forma: 'Duele mucho m¨¢s cuando no se firma', afirmaba el ganador del ¨²ltimo Premio Primavera de Novela. Alborch, eternamente sonriente, con ropa ligera y transparente, piel canela y pelo rojo militante, se mostraba encantada y humilde porque no quer¨ªa sacar media de sus colas. 'A m¨ª me da mucha verg¨¹enza hablar de cifras', dec¨ªa. 'Lo importante es la gente c¨®mplice que se ha acercado a que la dedique los libros'.

Alborch formaba uno de los v¨¦rtices de oro en las firmas ayer a ¨²ltima hora. Enfrente ten¨ªa a Antonio Gala, un cl¨¢sico, y a la derecha, a Elvira Lindo, triunfalista: 'Es que ha venido mucha gente a que la firme, aparte de mi familia', dec¨ªa la escritora. Era el caso de los hermanos Monge, H¨¦ctor y Jon¨¢s, que si no fuera porque afirman ser de Orcasitas, bien podr¨ªan pasar por coleguillas de Manolito Gafotas, naturales de Carabanchel. Se saben la serie casi de memoria y coleccionan firmas de su autora favorita. '?ste es el ¨²nico libro que nos queda de Manolito sin firmar, los dem¨¢s ya nos los dedic¨® en Orcasitas', cuentan a d¨²o.

La escritora pas¨® el d¨ªa entre las casetas porque por la ma?ana hab¨ªa moderado un debate abarrotado sobre el humor, en el que participaron Juanjo de la Iglesia, Ram¨®n Arang¨¹ena, Javier Serrano, Miguel Ors y Daniel Samper. Fue, junto a la presencia del juez Baltasar Garz¨®n ayer en la presentaci¨®n del libro El ¨¢rbol armenio, de G. H Guarch, los dos actos estrella del cierre de la fiesta.