Sayonara Jap¨®n

En un pa¨ªs donde lo que m¨¢s se valora es el honor, el gran temor antes de comenzar el Mundial era que la selecci¨®n japonesa hiciera el rid¨ªculo, que se repetir¨ªa la vergonzosa experiencia en Francia hace cuatro a?os cuando perdi¨® los tres partidos de la fase preliminar y marc¨® s¨®lo un gol. No se repiti¨® la historia. Sino todo lo contrario. La actuaci¨®n de la selecci¨®n japonesa fue m¨¢s que honorable. Result¨® ser una inspiraci¨®n para todo el pa¨ªs y fue, en sus mejores momentos, heroica.

La victoria de Corea sobre Italia se recordar¨¢ seguramente como el resultado m¨¢s extraordinario de este Mundial. Pero la victoria japonesa sobre Rusia en el estadio nacional de Yokohama, donde se jugar¨¢ la final el d¨ªa 30, tambien tiene asegurado su lugar en los anales de la historia del f¨²tbol. Y aunque, tras quedar primero en su grupo en la primera fase, Jap¨®n cay¨® despu¨¦s ante Turqu¨ªa en un partido flojo, bajo una lluvia incesante, todo el pa¨ªs -novato en el f¨²tbol- se siente agradecido con su selecci¨®n. 'No pudieron llegar a cuartos de final pero jugaron con galanter¨ªa contra un rival duro, e inspiraron a todo Jap¨®n con su coraje. 'Gracias', escribi¨® ayer el gran peri¨®dico nacional japon¨¦s, Asahi Shimbun. Y agreg¨®: 'El esp¨ªritu incansable de lucha de estos j¨®venes -con su pelo te?ido rojo, dorado y plateado- nos mostr¨® una visi¨®n del futuro en la que este pa¨ªs ser¨¢ diverso y en¨¦rgico'.

Los ¨¦xitos que cosech¨® la selecci¨®n japonesa en el Mundial, las tres explosiones de alegr¨ªa que provocaron a lo largo y ancho de un pa¨ªs poco dado a la exuberancia, fueron un b¨¢lsamo para los japoneses, que hab¨ªan empezado a perder la confianza en s¨ª mismos tras una d¨¦cada en la que la econom¨ªa ha sufrido una larga y aparentemente inexorable recesi¨®n.

'El ¨¦xito de nuestro equipo', se?al¨® ayer el peri¨®dico Yomiuri Shimbun en un editorial, 'nos ha dado ilusi¨®n y esperanza. Realmente nuestros jovenes jugadores nos han dado una inyecci¨®n de vitalidad'.

El Tokyo Shimbun fue m¨¢s lejos. Los futbolistas japoneses hab¨ªan ense?ado al pa¨ªs una serie de valores que la gente quiz¨¢s hab¨ªa empezado a olvidar: 'Ser independiente, ser responsable, estar unidos, ser pacientes, poder perdonar, estar inspirados, reflexionar, perserverar y dar las gracias. El campo de juego, donde viven los dioses del f¨²tbol, se ha convertido en un espejo gigante que refleja la columna vertebral de este pa¨ªs'.

En cuanto al f¨²tbol, deporte casi desconocido en Jap¨®n hasta el lanzamiento de la Liga profesional hace diez a?os, los expertos opinan que no hay marcha atr¨¢s. Que dentro de no mucho tiempo Jap¨®n, sobre la base pasional que ha dejado el Mundial, se convertir¨¢ en una potencia.

'En estos cuatro partido hemos demostrado al mundo las posibilidades que tiene el f¨²tbol japon¨¦s', declar¨® Inamoto, la estrella japonesa. 'Estamos orgullosos de de haber estado a la altura de los mejores equipos del mundo. Llegamos a la segunda fase pero podr¨ªamos haber avanzado m¨¢s. Hemos acumulado mucha experiencia y ahora debemos mejorar antes del Mundial de 2006. Porque s¨ª, podemos mejorar'.

'El mundo nos estaba observando y aprobamos el examen', declar¨® el seleccionador Philippe Troussier, que hab¨ªa declarado antes del Mundial que abandonar¨ªa su puesto una vez que la selecci¨®n quedara eliminada. 'Creo que podemos estar entre las 20 primeras naciones del mundo dentro de diez a?os. Despu¨¦s de un torneo como ¨¦ste los jugadores tendr¨¢n m¨¢s fe en s¨ª mismos'.