La explosi¨®n de un arsenal causa 32 muertos en Afganist¨¢n

Un dep¨®sito de armas y municiones situado en la ciudad afgana de Spin Boldak, en la frontera con Pakist¨¢n, explot¨® en la noche del jueves al viernes provocando 32 muertos y decenas de heridos, seg¨²n una organizaci¨®n internacional presente en la zona. La explosi¨®n, que pudo escucharse a 20 kil¨®metros de distancia y que afect¨® a varios edificios al producirse una reacci¨®n en cadena, pudo deberse a un misil, seg¨²n algunas versiones que no han podido ser confirmadas de forma independiente. Fazaludin Agha, el comandante afgano de la zona, donde se han producido enfrentamientos entre facciones y donde se cree que se esconden talibanes renegados, asegur¨® que la causa de la explosi¨®n era un proyectil, aunque dijo que no hab¨ªa podido confirmar qui¨¦n lo hab¨ªa lanzado.

Otros representantes militares atribuyeron la explosi¨®n a miembros de Al Qaeda, que se mueven con facilidad a ambos lados de la frontera. Otro militar se?al¨®, sin embargo, que 'podr¨ªa tratarse de un accidente'. Las normas de seguridad m¨¢s elementales en los dep¨®sitos de armas en Occidente son rara vez respetadas en Afganist¨¢n.

La explosi¨®n dispers¨® munici¨®n de diferentes tipos por toda la ciudad, que se encuentra a menos de 10 kil¨®metros de la ciudad fronteriza paquistan¨ª de Cham¨¢n y que se ha convertido en los ¨²ltimos meses en un lugar de paso para los refugiados afganos provenientes de Pakist¨¢n -unos 100.000 desde la salida de los talibanes de la zona, a finales de noviembre-. Spin Boldak, en la carretera de Kandahar, es un importante centro de contrabando entre Afganist¨¢n y Pakist¨¢n.

'La primera explosi¨®n tuvo lugar alrededor de la medianoche y las explosiones continuaron hasta entrada la madrugada en medio de un importante incendio', se?al¨® el portavoz del Programa Alimentario Mundial (PAM), Alejandro Chicheri. Ayer pudieron escucharse explosiones aisladas durante gran parte de la jornada.

'Cre¨ª que era un terremoto', relat¨® un habitante de la ciudad. Tras la explosi¨®n en el dep¨®sito, estallaron en cadena todo tipo de municiones, desde morteros hasta balas y obuses, que llovieron sobre la ciudad. 'Un mortero cay¨® sobre mi casa', se?al¨® Abdul Ghaffar, un soldado apenas adolescente, 'y mat¨® a mi madre y a mi hermana'. Un campo de refugiados, as¨ª como varios dep¨®sitos de alimentos, resultaron afectados.

Durante la jornada de ayer llegaron a la ciudad zapadores, que establecieron un amplio per¨ªmetro en torno al edificio principal y que tiene previsto dedicarse hoy a desactivar toda la munici¨®n, en algunos casos de gran calibre, que ha quedado desperdigada por las polvorientas calles de la ciudad, situada en una planicie des¨¦rtica. Los edificios y los veh¨ªculos del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), del PAM y de varias ONG sufrieron importantes da?os en puertas y ventanas, as¨ª como sus veh¨ªculos.