Un hermoso Mundial

Brasil es un buen vencedor, despu¨¦s de una final que guarda un extra?o parecido con el recorrido de la sele?ao a lo largo de este Mundial. Los brasile?os estuvieron dubitativos, fueron dominados por los alemanes en la primera parte y acabaron por imponerse gracias, una vez m¨¢s, al br¨ªo de una de sus figuras individuales, Ronaldo. La Mannschaft bloque¨® como se esperaba los ataques brasile?os y no puede reprocharse nada.

El dominio colectivo y t¨¢ctico fue de los alemanes. Jugaron con sus medios y la situaci¨®n se desbloque¨® por un error individual, llegado de donde no se esperaba: Kahn. Es terrible que le haya ocurrido al mejor portero del campeonato, que corre el riesgo de sentirse culpable el resto de su vida. ?l, que hab¨ªa salido vencedor en todos sus enfrentamientos de la primera parte con el propio Ronaldo. Qu¨¦ venganza para el delantero brasile?o, que tanto ha sufrido desde 1998. Despu¨¦s de clasificar a su selecci¨®n para la final con un punterazo a la antigua, le dio el t¨ªtulo.

Voy a tener grandes recuerdos de mi estancia en Asia. Esta nueva fotograf¨ªa del f¨²tbol, con la aparici¨®n de Turqu¨ªa, que ha llegado al tercer puesto, y la incre¨ªble trayectoria de Corea del Sur. ?Qu¨¦ bellas sorpresas! ?Qu¨¦ ba?o de frescura! ?C¨®mo olvidar este fervor popular en un continente que se abre al f¨²tbol? ?C¨®mo no alegrarse de ver que este deporte desencadena tales emociones?

Tambi¨¦n hay que hablar de desenga?os. Todav¨ªa hoy sigo aturdido. Con una aut¨¦ntica frustraci¨®n por el papel de la selecci¨®n de Francia, ya que estoy convencido de que ten¨ªamos un buen equipo. Estamos en una situaci¨®n penosa, pero no es un drama. Que cada uno de nosotros sepa analizarla bien y fijarse nuevos objetivos. Este Mundial ha destacado las carencias en la preparaci¨®n de un buen n¨²mero de pa¨ªses. Portugal, Italia, Espa?a o Argentina, por citar algunos, no han estado a la altura de las circunstancias. El denominador com¨²n se encuentra en la preparaci¨®n, tanto en el m¨¦todo como en el tiempo dedicado a ponerse en forma.

Los jugadores de esas distintas selecciones suelen tener en com¨²n su participaci¨®n en las competiciones europeas y tener que enfrentarse a un calendario monstruoso. Es preciso plantear una serie de preguntas. Igualmente, hay que examinar seriamente la cuesti¨®n del arbitraje. Una reflexi¨®n general para que el juego sea a¨²n m¨¢s fluido y espectacular. Pero no estropeemos el placer, ha sido una Copa del Mundo hermosa y quedar¨¢ un gran recuerdo de ella.

Le Monde / EL PA?S