El cerco a la pesca furtiva reduce las incautaciones de inmaduros en M¨¢laga

El cerco contra la pesca furtiva en M¨¢laga ha dado sus frutos. En los seis primeros meses del a?o se han incautado 12.370 kilos de inmaduros, dos toneladas menos que en el mismo per¨ªodo de 2001. La Junta atribuye esta reducci¨®n al ¨¦xito de su lucha contra los pescadores ilegales, que 'en el 100% de los casos' se dedican a la captura de alevines. En cuatro a?os se han aprehendido 230 embarcaciones furtivas.

La Consejer¨ªa de Agricultura y Pesca intensific¨® desde principios de a?o su lucha contra los inmaduros. En los primeros seis meses, con 1.832 inspecciones, super¨® los controles hechos a lo largo de todo 2001 (1.827). Sin embargo, ese incremento de la labor inspectora no se tradujo en un aumento de las actas de infracci¨®n ya que el a?o pasado se levantaron 539 y en el ¨²ltimo semestre se tramitaron 248.

'Hay menos infracciones porque hay menos pescado inmaduro', explic¨® el delegado malague?o, Jos¨¦ Mar¨ªa Rodr¨ªguez. Es la primera vez que se inicia una temporada estival sin pesca furtiva en M¨¢laga, situaci¨®n que desde la Junta se achaca a la campa?a contra esta actividad ilegal iniciada hace cuatro a?os y que desde entonces ha permitido la incautaci¨®n de 230 embarcaciones.

En lo que va de a?o, se han aprehendido 540 artes ilegales - seis veces m¨¢s que en el mismo per¨ªodo de 2001- y 65 barcazas, el triple que hace un a?o. Frente a este incremento, los decomisos de alevines no aumentaron, sino que disminuyeron al pasar de 14.270 entre enero y junio de 2001 a 12.370 en lo que va de a?o.

Las sanciones que aplica la Junta oscilan entre los 300 y los 60.000 euros. 'Somos extremadamente duros y lo vamos a seguir siendo', advirti¨® el delegado, que precis¨® que el a?o pasado fueron sancionados 130 establecimientos, entre pescader¨ªas y restaurantes, por venta de inmaduros.

Rodr¨ªguez acot¨®: 'Hacemos todo lo que podemos, pero falta colaboraci¨®n ciudadana'. M¨¢s del 80% de los inmaduros que se venden en M¨¢laga proceden de otras provincias andaluzas, Marruecos, Argelia e Italia. El 40% de estos alevines no son aptos para el consumo porque contienen conservantes no autorizados, como orina o formol.