L¨®pez Cobos firma ma?ana como director musical del Teatro Real

Ma?ana, a las 12.30, se cierra una negociaci¨®n que ha durado un a?o. El m¨²sico Jes¨²s L¨®pez Cobos se incorporar¨¢ por fin al Teatro Real como director musical a partir de la temporada 2003-2004 y hasta 2007. El reciente acuerdo con el Coro y la Orquesta Sinf¨®nica de Madrid y el Real para formar unos cuerpos estables supuso la clave para que el director de orquesta se decidiera a incorporarse al teatro madrile?o.

Llega hoy, procedente de Par¨ªs, donde anoche dirigi¨® una funci¨®n de la ¨®pera Carmen. Con L¨®pez Cobos queda formado el triunvirato que dirigir¨¢ el Teatro Real hasta 2007 despu¨¦s de las incorporaciones de Emilio Sagi, como director art¨ªstico, e In¨¦s Arg¨¹elles, como gerente. Los tres sustituyen a una direcci¨®n bic¨¦fala, formada por el maestro Garc¨ªa Navarro como director art¨ªstico, que falleci¨® el pasado a?o, y un controvertido Juan Cambreleng en la gerencia.

La incorporaci¨®n de L¨®pez Cobos hubiese sido imposible con el anterior equipo porque exist¨ªan grandes diferencias entre Cambreleng y el m¨²sico espa?ol m¨¢s experimentado en la direcci¨®n oper¨ªstica en todo el mundo. Durante 10 a?os, entre 1981 y 1990, ocup¨® el mismo puesto al que ma?ana se compromete en el Real en la ?pera de Berl¨ªn. Ha sido el primer espa?ol en dirigir en La Scala de Mil¨¢n, en el Covent Garden de Londres y en el Metropolitan de Nueva York y su carrera internacional est¨¢ llena de reconocimientos y ¨¦xitos. Pero en Madrid ha tenido experiencias que le han pesado en su decisi¨®n final. La titularidad en la Orquesta Nacional de Espa?a, que ostent¨® entre 1984 y 1988, dej¨® profundas heridas en ¨¦l por una historia plagada de luchas y desencuentros con la administraci¨®n y los m¨²sicos. Por eso, una de las condiciones que L¨®pez Cobos ha puesto para venir es 'librarse de burocracias', como ¨¦l mismo ha dicho alguna vez.

Desde finales de la d¨¦cada de los ochenta no hab¨ªa contra¨ªdo ning¨²n compromiso estable con formaciones espa?olas, pero ha desarrollado una intensa carrera en todo el mundo: desde director de la Orquesta Sinf¨®nica de Cincinatti y de la Orquesta de C¨¢mara de Lausanne, a ser invitado en diversos templos oper¨ªsticos como la ?pera de La Bastilla, en Par¨ªs, donde dirige todos los a?os, o en el Covent Garden y La Scala.

Su relaci¨®n con el Real marcaba una especie de predestinaci¨®n. Cuando le ofrecieron hacerse cargo de la direcci¨®n musical puso una condici¨®n fundamental: que haya cuerpos estables, coro y orquesta, del teatro. La propuesta se formaliz¨® con la Sinf¨®nica de Madrid el mes pasado y L¨®pez Cobos ha cumplido su palabra. ?l dirigi¨® el ¨²ltimo concierto de clausura en 1988. Ahora le toca volver a abrir el teatro al mundo como un referente oper¨ªstico internacional, algo que desde su reapertura en 1997 todav¨ªa no se ha conseguido.