El h¨¦roe congelado
Pol¨¦mica en EE UU por la crionizaci¨®n del mejor bateador de la historia
El cuerpo de Ted Williams, el mejor bateador de la historia del b¨¦isbol, se ha convertido en el objeto de una macabra controversia. Williams muri¨® el pasado viernes de un paro cardiaco a la venerable edad de 83 a?os, despu¨¦s de haber entusiasmado durante d¨¦cadas a los aficionados del deporte rey en Estados Unidos. Pero su desaparici¨®n ha resultado ser algo m¨¢s que literal. La misma noche de la muerte, uno de sus hijos, John Henry Williams, mand¨® congelar el cad¨¢ver en un centro criog¨¦nico con el prop¨®sito de vender su ADN. El asunto est¨¢ en los tribunales.
'Mi padre est¨¢ en un cilindro de metal cabeza abajo, tan congelado que si pudiera tocarlo se romper¨ªa en pedazos por el mero calor de mi mano. Me pongo enferma s¨®lo de pensarlo', dijo hace unos d¨ªas a un diario de Arizona Bobby-Jo Ferrell, la otra hija de Williams que ha destapado todo el esc¨¢ndalo y ha denunciado a su hermanastro para recuperar los restos de su padre.
'Mi padre est¨¢ en un cilindro de metal cabeza abajo. Me pongo enferma s¨®lo de pensarlo', dice su hija
La primog¨¦nita del m¨ªtico bateador de los Red Sox de Boston asegura que John le propuso la idea hace un a?o y que ella la rechaz¨® horrorizada. '?l me dijo: ser¨ªa interesante si pudieramos resucitar a pap¨¢ dentro de 50 a?os. ?Y si pudieramos vender su ADN? Podr¨ªa haber peque?os Ted Williams por todo el mundo'.
Y as¨ª parece haber ocurrido, aunque nadie ha confirmado d¨®nde est¨¢ exactamente el cuerpo de Ted Williams. Bobby-Jo quiere incinerarlo y dispersar sus cenizas por los cayos de Florida, donde tanto le gustaba pescar. ?ste habr¨ªa sido su ¨²ltimo deseo.
La historia es bastante siniestra. El pasado viernes por la noche, John Henry Williams, sin comentarlo a nadie, rob¨® el cuerpo de su padre reci¨¦n fallecido de una funeraria de Florida y lo mand¨® por avi¨®n a un centro criog¨¦nico de Arizona, la Fundaci¨®n Alcor para Prolongar la Vida. 'Mi padre no quer¨ªa ceremonias', fue lo ¨²nico que dijo entonces el hijo para justificar la ausencia de funeral.
La Fundaci¨®n Alcor lleva desde 1972 congelando cad¨¢veres para eventualmente resucitarlos cuando la ciencia lo permita. No ha querido confirmar si Williams es su nuevo inquilino, pero tampoco lo ha negado. El proceso consiste en sumergir el cuerpo boca abajo en nitr¨®geno l¨ªquido y esperar al futuro. Incre¨ªblemente, la mayor¨ªa de sus actuales 50 pacientes s¨®lo han elegido conservar la cabeza, suponiendo que los milagros de la clonaci¨®n permitir¨¢n quiz¨¢ darles, adem¨¢s de otra vida, un nuevo cuerpo. Tambi¨¦n resulta m¨¢s barato: congelar un cuerpo entero ronda los 120.000 d¨®lares; una cabeza, tan s¨®lo 50.000.
Ahora un juez de Florida debe determinar el destino de Williams. 'John Henry est¨¢ tratando de hacer dinero con el cuerpo de mi padre y no voy a permitirlo', dijo Bobby-Jo a la agencia Associated Press. '?sta es la peor forma de abuso, ni Steven Spielberg hubiera podido imaginar algo semejante' Los abogados de su hermanastro aseguran que padre e hija ten¨ªan sus diferencias y no se ve¨ªan desde hace tiempo, por lo que Bobby-Jo no pod¨ªa conocer sus ¨²ltimas voluntades.
Personas cercanas a la leyenda del b¨¦isbol aseguran que John Henry lleva ya m¨¢s de diez a?os explotando y controlando la fama de su padre. Se recuerdan historias de pleitos por los derechos de comercializaci¨®n de souvernirs, incluso con su otra hermana Claudia, cuando ¨¦sta quiso vender 2.000 bates firmados por Williams, o una p¨¢gina web con los recuerdos de mejores ¨¦pocas, cuando el m¨ªtico bateador compart¨ªa el pante¨®n de r¨¦cords con Joe DiMaggio o Babe Ruth - Williams ha sido el ¨²ltimo jugador en conseguir batear m¨¢s de 400 veces en una temporada en las Grandes Ligas, y consigui¨® 521 home runs en toda su carrera-. Tambi¨¦n se dice que John Henry ha heredado el car¨¢cter irascible de su padre.
Los aficionados est¨¢n especialmente indignados. El martes por la noche, los Red Sox honraron la memoria de Williams en el estadio de Milwaukee, desvelando en el c¨¦sped la figura del gigantesco n¨²mero nueve que siempre llevaba. Ninguno de sus tres hijos estuvo presente en la ceremonia.
Lo m¨¢s ir¨®nico del caso es que existe un libro sobre la clonaci¨®n de Ted Williams. Se llama El Proyecto Samuel y su autor lo escribi¨® hace dos a?os como una historia de ciencia ficci¨®n.
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