La necesidad del origen

El sonido del Atl¨¢ntico no es una novela, pero es imposible no seguir la peripecia de sus muchos personajes como si de personajes de una apasionante novela se tratase. No es un ensayo, pero en sus p¨¢ginas se traza una acabada reflexi¨®n sobre la identidad. No son unas memorias, pero el autor, que es asimismo el narrador, refiere partes de su vida y el impulso que determina su escritura es claramente autobiogr¨¢fico. No es un libro que juegue con la ambig¨¹edad entre la realidad y la ficci¨®n, pero en su seno conviven las partes documentales de car¨¢cter hist¨®rico y los personajes reales junto con personajes y relatos de los que se puede sospechar que son inventados. No se trata, finalmente, de un libro de viajes, pero arranca con un viaje y todo ¨¦l est¨¢ cruzado por la idea del viaje. El viaje como alejamiento del origen o como pretensi¨®n de reencuentro con ¨¦l.

El sonido del Atl¨¢ntico es un libro heterog¨¦neo -mezcla de novela, de periplo viajero y de ensayo-, en el que, dando cabida a fragmentos narrativos independientes, se da cuenta de sucesos diversos, ocurridos en diferentes ¨¦pocas y continentes, que sin embargo comparten un hilo com¨²n. Este hilo com¨²n es la escurridiza noci¨®n de hogar y el problema de la construcci¨®n de la identidad alrededor de la idea de pertenencia a un lugar y a una tradici¨®n cultural para aquellos que, como el propio Caryl Phillips, representan m¨¢s de una tradici¨®n. El caso paradigm¨¢tico en el que Phillips se fija es el de los descendientes de una de las m¨¢s traum¨¢ticas migraciones colectivas que en la historia ha habido: la de los millones de africanos que fueron vendidos como esclavos en Am¨¦rica. Ahora bien, aun cuando Phillips haya nacido en Am¨¦rica (St. Kitts, 1958) y tenga sangre negra, que su intenci¨®n no es circunscribirse en sus conclusiones a ese ¨²nico ejemplo lo demuestra el detonante que en la primera parte del libro utiliza como excusa para su investigaci¨®n: el viaje emprendido por ¨¦l a bordo de un carguero para rememorar el que sus padres emigrantes hicieron cuando ¨¦l ten¨ªa tres a?os desde su Caribe natal hasta el Reino Unido. Es a ra¨ªz de la inquisitoria sobre las consecuencias de este ¨¦xodo familiar cuando surge la pregunta sobre ese otro ¨¦xodo todav¨ªa m¨¢s doloroso, aunque lejano, del que ¨¦l mismo es herencia viva, y su viaje se ramifica, en persecuci¨®n de su huella, hacia lugares no previstos. Pero ni siquiera en ese nuevo trayecto, que lo hace recalar en ?frica o investigar sobre los tiempos en que Liverpool era el principal puerto esclavista de Europa, pierde de vista el car¨¢cter m¨¢s general de su b¨²squeda. Phillips ensambla con soltura materiales y miradas diversas sin renunciar al rigor, la reflexi¨®n y una libertad s¨®lo semejante a la que otorga la inspiraci¨®n novel¨ªstica.