Un hombre de 78 a?os mata a su esposa de 74 de un hachazo

'He propinado un golpe a mi mujer en la cabeza y est¨¢ aturdida'. As¨ª explic¨® Andr¨¦s P. G., de 78 a?os, en el cuartel de la Guardia Civil de Salobre?a (Granada), el desenlace de una convivencia marcada por el maltrato, que comenz¨® hace 40 a?os. Cuando los agentes llegaron el s¨¢bado al domicilio de la pareja hallaron a Evangelina R. A., de 74 a?os, tirada en la cocina y con el cr¨¢neo abierto de un hachazo.

El m¨¦dico que acompa?aba a los guardias civiles s¨®lo pudo certificar la muerte de la mujer. Hacia las seis y media de la tarde, tres horas despu¨¦s de que fuera mortalmente agredida por su esposo, el juez de guardia orden¨® el levantamiento del cad¨¢ver.

Los vecinos de la calle Nueva de este pintoresco pueblo mar¨ªtimo de 10.000 habitantes no escucharon el s¨¢bado ninguna discusi¨®n entre la pareja. Conoc¨ªan que la convivencia matrimonial estaba marcada por los continuos ataques f¨ªsicos y verbales que Andr¨¦s inflig¨ªa a su esposa, pero ese d¨ªa ning¨²n esc¨¢ndalo o grito rompi¨® el silencio de mediod¨ªa. Hasta que la Guardia Civil no lleg¨® en compa?¨ªa de su esposo, que hab¨ªa acudido voluntariamente al cuartel, no conocieron la tr¨¢gica conclusi¨®n de una vida marca por la violencia.

Familiares y vecinos de Evangelina acudieron ayer tarde al entierro. La directora en Granada del Instituto Andaluz de la Mujer, Francisca Fuillerat, manifest¨® a Efe que el crimen era un desenlace previsible tras 'cuarenta a?os de tortura' en un matrimonio caracterizado por el 'silencio de la mujer y el sentimiento de propiedad del hombre por su esposa'.

A juicio de la responsable del Instituto de la Mujer, Andr¨¦s y Evangelina viv¨ªan una situaci¨®n 'an¨®mala, de la que nadie quer¨ªa hablar'. S¨®lo despu¨¦s de conocerse la muerte de la mujer los vecinos declararon a los informadores que las disputas eran frecuentes y que incluso hab¨ªan dividido la casa en dos partes.