Una vieja granja de terneros acoge el campamento de inmigrantes de Alcarr¨¤s

Ante el ins¨®lito silencio de las administraciones, el alcalde de Alcarr¨¤s, el convergente Gerard Serra, ha tomado cartas en el asunto asumiendo unas competencias que no corresponden al consistorio. Serra ha decidido agrupar al colectivo en un campamento provisional situado en las afueras del pueblo, aprovechando la infraestructura de una vieja granja de terneros existente en unos terrenos cedidos por el Incasol. Y como la instalaci¨®n se reduce a un cobertizo que no re¨²ne las m¨ªnimas condiciones sanitarias y de habitabilidad, el alcalde ha reclamado ayuda material y log¨ªstica al Ej¨¦rcito y a la Cruz Roja.

La respuesta no se ha hecho esperar y esta misma semana la Academia General B¨¢sica de Suboficiales de Talarn (Pallars Juss¨¤) enviar¨¢ tiendas de campa?a modulares y literas totalmente equipadas para las 200 personas que ya se han trasladado al campamento, adem¨¢s de cabinas de sanitarios, lavabos y duchas de campa?a. Serra, que realiza gestiones para conseguir alimentos, ha explicado que este alojamiento provisional funcionar¨¢ hasta finales de agosto y s¨®lo albergar¨¢ a los inmigrantes que est¨¦n censados en la oficina municipal de empleo para evitar que se llene con temporeros procedentes de las poblaciones pr¨®ximas.

La instalaci¨®n del improvisado campamento ha hecho reaccionar con enfado a los vecinos que tienen fincas y torres en los aleda?os. Francisco S. y Albert C., propietarios de un huerto con almac¨¦n y de una granja de corderos, explican que la presencia de los subsaharianos en la zona les est¨¢ ocasionando muchos disgustos. 'Hemos tenido que vallar las fincas porque por la noche nos entran a robar la fruta y las hortalizas y esto no nos hab¨ªa pasado nunca', explican a d¨²o. Los agricultores aseguran que no les hace ninguna gracia tener que convivir con los nuevos vecinos y reclaman que se dote al campamento de una vigilancia policial permanente. 'Nos hemos quejado a los Mossos d'Esquadra y al Ayuntamiento, pero no nos hacen caso. Lo ¨²nico que han hecho es desplazar el problema 600 metros. El campamento lo tendr¨ªan que haber puesto delante del chalet del alcalde', a?aden irritados los dos vecinos.