Barcelona pierde los papeles

Casi todos los ciudadanos guardan en su memoria un duro contencioso con la burocracia (estatal, municipal, auton¨®mica, en esto apenas hay diferencias) en el que ha perdido la batalla. En el caso de la duda, la carga de la prueba siempre recae sobre el m¨¢s d¨¦bil, que no es el funcionario ni su jefe (siempre en otra parte, nunca asequible). En esta ocasi¨®n, sin embargo, el due?o del papel no era un ciudadano com¨²n: era el grupo municipal de CiU en el Ayuntamiento de Barcelona, que hab¨ªa entregado un documento en el que presentaba alegaciones al concurso de unas obras en Montju?c. Con tanta mala fortuna (para el primer partido de la oposici¨®n) que el papel se perdi¨® y no apareci¨® hasta unas horas despu¨¦s de fallado el asunto.

Joan Puigdollers, presidente del grupo municipal convergente, defender¨¢ el pr¨®ximo viernes en el pleno la convocatoria de un nuevo concurso, dada la indefensi¨®n en que qued¨® su posici¨®n.

La versi¨®n de Puigdollers es la siguiente. En su d¨ªa se convoc¨® un concurso para adjudicar una serie de obras en el Jard¨ªn de las Esculturas, en la monta?a de Montju?c. CiU consider¨® que el concurso presentaba elemento a corregir y, como consecuencia, redact¨® un pliego de alegaciones que entreg¨® en el registro municipal el pasado 24 de mayo, fecha en la que a¨²n hab¨ªa tiempo suficiente para considerar sus alegaciones, porque el concurso deb¨ªa fallarse el 10 de junio.

A partir de ah¨ª, sin embargo, s¨®lo hubo silencio (?administrativo?). No obstante, unas semanas despu¨¦s, Puigdollers recibi¨® una carta del Centro Gestor del Parque de Montju?c en la que le explicaba que el retraso en conocer el contenido de las alegaciones se deb¨ªa a un error en el tr¨¢mite del documento. No obstante, analizadas las alegaciones, se resolv¨ªa que tampoco habr¨ªan prosperado.

La explicaci¨®n oficial es que el papel no se perdi¨®, s¨®lo anduvo traspapelado. El registro municipal, por un error, envi¨® las alegaciones al ¨¢rea de Parques y Jardines que, al descubrir que no era un asunto de su incumbencia, lo remiti¨® al Centro Gestor de Montju?c, lamentablemente cuando el concurso ya estaba fallado. No obstante, a?adi¨® un portavoz municipal, los servicios t¨¦cnicos estudiar¨¢n si procede anular el concurso por indefensi¨®n de los alegantes y tomar¨¢n una decisi¨®n antes del viernes, de modo que en el pleno se pueda dar si no satisfacci¨®n al menos explicaci¨®n al grupo convergente.

?De qui¨¦n fue el fallo? Eso, de momento, no lo investiga nadie ni a nadie parece preocuparle. Despu¨¦s de todo, el mejor escribano e incluso el mejor escribiente echa un borr¨®n y siempre se podr¨¢ achacar al infortunio un proceso que ha dejado al principal partido de la oposici¨®n sin voz, seg¨²n explica Puigdollers, que no quiere ni imaginar lo que le pasar¨ªa a un ciudadano corriente, pero tampoco quiere andarse por las ramas y asegura que la actitud del gobierno municipal, responsable del asunto mientras no se demuestre lo contrario, es un 'manifiesto desprecio al derecho', al incumplir las propias normas municipales. La soluci¨®n: el viernes en el pleno.