Extra?as comparaciones
?ltimamente Artur Mas, para explicarse y convencer, utiliza unas comparaciones muy extra?as, parece m¨¢s que se dirige a ni?os y ni?as de parvulario que a ciudadanos y ciudadanas mayores de edad, inteligentes y responsables.
No entiendo la fijaci¨®n que tiene con los vestidos (que unas veces les van peque?os y otras se le rompen) ni la l¨®gica que utiliza para compararlos continuamente con la pol¨ªtica; cuando lo escucho o lo leo, hace que me sienta imb¨¦cil. Tengo la sensaci¨®n de que el se?or Mas cree que ¨¦sta es una estrategia para hacer m¨¢s sencillo su discurso a la vez que una manera para acercarse m¨¢s a la ciudadan¨ªa; pero se equivoca, y mucho se equivoca. No hace falta que nos trate como a inocentes para justificarnos sus maniobras, somos personas adultas y, la mayor¨ªa de las veces, las palabras no son necesarias, nos basta con observar los hechos y sobre todo cuando ¨¦stos contradicen los mensajes.
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