'No necesito imitar a nadie para cantar bien a Gershwin, me basta la partitura'
Va y viene. Pero siempre se las arregla para estar en el mismo sitio: en ese lugar donde se enciende y brilla la luz del talento y de lo aut¨¦ntico. Barbara Hendricks, esa cantante especial, comprometida, defensora de los derechos humanos, tiene una voz tan relajante como inc¨®moda. Relajante para quien la escucha cantar, para quienes acudan el 30 de julio al Grec de Barcelona o el 14 de octubre al Teatro de la Zarzuela en Madrid, donde inaugurar¨¢ el fascinante ciclo de Lied de la pr¨®xima temporada. Pero inc¨®moda para quien le moleste o¨ªr c¨®mo esta mujer libre no pasa una a los desmanes ni a las cacicadas de la globalizaci¨®n.
Ahora la ha tomado con la negativa de su pa¨ªs a apoyar el Tribunal de Derechos Humanos de La Haya. Se nota que George Bush le cae gordo. 'Quien no apoya ese Tribunal y esa causa, sencillamente es que no est¨¢ con las v¨ªctimas y da pena. Es un avance y es de ignorantes no saber lo que representan las masacres', cuenta por tel¨¦fono Hendricks. Son esas actitudes las que molestan profundamente a quien creci¨® en el sur de Estados Unidos, en Arkansas, entre conflictos raciales que tallaron un esp¨ªritu luchador. Mam¨® el canto hondo en los jolgorios con espirituales de las iglesias de las comunidades negras; luego se gradu¨® en Qu¨ªmica y Matem¨¢ticas por la Universidad de Nebraska, pero decidi¨® hacerse cantante en la Juillard School de Nueva York, donde le ense?aron a ser una gran diva de la ¨®pera.
Lleva casi 30 a?os de carrera, desde su deb¨² en Nueva York en 1974, pero es una diva moderna, que no acepta desentenderse de lo que la rodea -'no comprendo lo poco que les interesa a mis colegas la vida que tienen delante', ha asegurado- y que quiere o¨ªr y alzar su voz. Desempe?a un papel intenso como embajadora de la ONU y ha creado la Fundaci¨®n Barbara Hendricks para la Paz y la Reconciliaci¨®n en 1998. 'Somos yo y mi secretaria, pero es un canal a trav¨¦s del cual puedo denunciar las cosas que la gente que tiene la suerte que yo tengo debe denunciar'.
Su valent¨ªa, su arrojo, le han valido reconocimientos internacionales de prestigio, como ser nombrada en Francia comendadora de las Artes y las Letras o el Pr¨ªncipe de Asturias de las Artes en Espa?a, que agradeci¨® cantando en la ceremonia de entrega en 2000. Cuando se lo dieron ya hab¨ªa proclamado su amor por Espa?a y sus artes culinarias, pero desde que lo recogi¨®, quiere venir m¨¢s: 'Si no voy no tengo una temporada redonda. No s¨®lo a Madrid o Barcelona, tambi¨¦n me gusta ir a las ciudades peque?as. El p¨²blico es muy agradecido y muy abierto a todo lo que le ofreces', cuenta. Por eso, antes de que acabe el a?o, aparte de en las dos grandes ciudades, tiene previsto actuar en Vigo (12 de octubre) y en San Cugat del Vall¨¨s (4 de octubre).
En estos sitios mostrar¨¢ su versatilidad. Primero en Barcelona, donde cantar¨¢ temas eternos de George Gershwin, de quien acaba de grabar un disco brillante: It's wonderful. Tribute to George Gershwin. El jazz y el swing son cosas naturales en ella, aunque fue en 1994 cuando se atrevi¨® a cantar por primera vez en p¨²blico este repertorio en el Festival de Montreux (Suiza). Desde entonces, no dejan de invitarla. 'Cuando estoy en casa, para relajarme, escucho m¨²sica de c¨¢mara y jazz', confiesa. Pero la afici¨®n no le influye y quiere poner su sello en un territorio que dominan en la imaginaci¨®n y los recuerdos otras int¨¦rpretes como Sara Vaughan, Billie Holliday, Dinah Washington o Ella Fitzgerald. 'Las admiro pero no tengo que imitar a nadie para cantar a Gershwin, me basta la partitura', asegura. 'Es la fuente para ser fiel a las cosas, no escucho a nada ni a nadie cuando trabajo en alg¨²n compositor. Es como ofrecer cosas de segunda mano. S¨®lo utilizo lo que ellos han escrito. Tienes que ser responsable de tu estilo'.
Lo mismo aplica para los autores que abordar¨¢ en oto?o: Schubert, Grieg, Rangstr?m, Poulenc y Falla. 'Nunca me hab¨ªa atrevido con Falla, me parec¨ªa muy dif¨ªcil, pero ahora creo que lo he podido comprender'. Como m¨¦todo de trabajo ha seguido sus principios de devoci¨®n a las partituras, aunque se rinde delante de las que para ella son una aut¨¦ntica inspiraci¨®n en el canto espa?ol. 'Teresa Berganza y Victoria de Los ?ngeles, por supuesto'.
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