Las auton¨®micas pasan factura
De los 1.160 millones que gastan las televisiones regionales, un tercio procede del dinero p¨²blico
A un espectador vasco la televisi¨®n auton¨®mica le cuesta al a?o 45,26 euros. Un madrile?o paga 11,19. Esta enorme diferencia es resultado del poco equitativo reparto del presupuesto de 1.160 millones de euros que consumir¨¢n este a?o los ocho entes p¨²blicos de radio y televisi¨®n auton¨®micos que operan en Espa?a. El coste no s¨®lo var¨ªa en funci¨®n de los habitantes de cada comunidad, sino que tambi¨¦n depende de la gesti¨®n de los canales regionales.
Hay otros factores, como la lengua propia y el modelo de producci¨®n, que encarecen el coste anual por habitante. Por ejemplo, TV-3 tiene por costumbre doblar pel¨ªculas al catal¨¢n. Si a eso se a?ade que, por la obligaci¨®n de servicio p¨²blico, una gran parte de sus espacios de producci¨®n propia son dif¨ªcilmente exportables -por su contenido localista o por la lengua-, el resultado es una televisi¨®n m¨¢s cara. De ah¨ª que los espectadores catalanes desembolsen cada a?o 33 euros, dos euros menos que sus vecinos valencianos.
Su TV regional le cuesta a cada vasco al a?o 45,26 euros. Un madrile?o paga 11,19
En cambio, en otras cadenas, como Telemadrid o Canal Sur, el idioma juega a favor a la hora de intercambiar programas. Incluso hay casos en los que, para facilitarlo, el propio canal opta por la producci¨®n original en castellano. La valenciana Canal 9 export¨® T¨®mbola a otros canales auton¨®micos gracias a su emisi¨®n en castellano y, esta misma temporada, el concurso La silla puede verse en Telemadrid, Canal Sur, ETB-2 (en castellano) y TV Canarias.
El modelo de financiaci¨®n tambi¨¦n separa a unas cadenas de otras. Los recursos que proceden de la publicidad son escasos y no cubren todo el presupuesto. Adem¨¢s, algunas compa?¨ªas arrastran una fuerte deuda, mientras que en otras el d¨¦ficit de explotaci¨®n se cubre con aportaciones de los parlamentos aut¨®nomos.
'Las cuentas de 2001 de Telemadrid dibujan un panorama inquietante: ca¨ªda de ingresos, aumento de gastos, aumento del endeudamiento y ca¨ªda de la audiencia', se?ala el portavoz socialista de Hacienda y Presupuestos en la Asamblea madrile?a, Adolfo Pi?edo. Apoya su cr¨ªtica en los datos de ese ejercicio, que arroj¨® p¨¦rdidas por importe de 6,98 millones de euros. 'Cosa que no ocurr¨ªa desde 1995', a?ade.
La ca¨ªda del mercado publicitario, que en 2001 ha sido del 7,7%, ha empeorado a¨²n m¨¢s las cuentas. La valenciana Canal 9 cerr¨® el a?o con una deuda de 89,6 millones de euros, pero la aportaci¨®n de la Generalitat Valenciana s¨®lo cubre 2,2 millones. Quiz¨¢s por eso, Jos¨¦ Luis Olivas, cuya investidura como presidente de la Generalitat Valenciana se debate ma?ana, abordar¨¢ en su primer discurso la privatizaci¨®n de la gesti¨®n de la radiotelevisi¨®n valenciana 'como acci¨®n de Gobierno'.
?sta es una vieja aspiraci¨®n de los dirigentes populares. Ya antes de convertirse en presidente de Galicia, Manuel Fraga estaba dispuesto a privatizar el canal auton¨®mico gallego. Esgrim¨ªa como excusa el entonces 'escandaloso d¨¦ficit' de 25,2 millones de euros. Pero tras cuatro legislaturas de poder popular, nada se ha movido en el ente gallego. La misma promesa lanz¨® Alberto Ruiz-Gallard¨®n antes de convertirse en presidente de la Comunidad de Madrid. Hace dos a?os arroj¨® la primera piedra al anunciar la venta, mediante subasta, de Telemadrid.
Adolfo Pi?edo considera que los presupuestos de 2003 de Telemadrid prev¨¦n una nueva ca¨ªda de ingresos publicitarios del 11,8% respecto a 2002. Y un aumento de los gastos del 8%, con lo que la subvenci¨®n a trav¨¦s del contrato-programa (aportaci¨®n de la Comunidad como prestaci¨®n de los espacios de servicio p¨²blico) crecer¨¢ hasta los 67 millones de euros, frente a los 49,2 de este a?o. La cadena justifica este cambio de tendencia en el encarecimiento de los costes de producci¨®n y la ca¨ªda del mercado publicitario.
La dura competencia de cadenas privadas generalistas ha hecho perder a las auton¨®micas una importante porci¨®n del pastel publicitario, que suele ser proporcional a la cuota de audiencia. Una de las que peor comportamiento ha tenido en el ¨²ltimo a?o ha sido, precisamente, Telemadrid, que ha pasado de una cuota de 18,7% al 17%.
La portavoz socialista en la comisi¨®n de control de RTV Madrid, Alicia Acebes, apunta que esta ca¨ªda es una consecuencia de 'los 41 cambios de programaci¨®n que se han llevado a cabo en los ¨²ltimos dos a?os'. En su opini¨®n, 'la programaci¨®n ha ido sin rumbo, sin objetivos concretos. La obsesi¨®n por imitar a las cadenas generalistas de ¨¢mbito nacional ha obligado a la audiencia a desplazarse. De los 31 programas nuevos, 22 han sufrido modificaciones. De ellos, 13 han desaparecido y 9 han cambiado sistem¨¢ticamente horas y d¨ªas de emisi¨®n. El prime-time ha cambiado en 17 ocasiones, lo que impide crear h¨¢bitos de audiencia'. Acebes critica tambi¨¦n la desaparici¨®n de formatos educativos como A saber y la proliferaci¨®n de 'programas-basura como Flashback, Busco pareja, Esto no es un programa de culto o Armas de seducci¨®n'.
Un portavoz de Telemadrid subraya que el nuevo director general, Francisco Gim¨¦nez Alem¨¢n, opt¨® por suprimir Gente con chispa o T¨®mbola, pese a que aportaba 1,8 puntos de audiencia a la cadena. 'Cre¨® programas de servicio p¨²blico como Los cinco sentidos de la cultura o El c¨ªrculo a primera hora', apunta. En cambio, la novel RTV Canarias se ha convertido en la televisi¨®n con m¨¢s crecimento, un 40%. 'La pr¨®xima temporada confiamos en incrementar m¨¢s la audiencia, porque comenzaremos a transmitir la Liga de f¨²tbol', se?ala Francisco Moreno, director general de la auton¨®mica canaria.
El panorama de las auton¨®micas est¨¢ en proceso de cambio. El nuevo ministro de Ciencia y Tecnolog¨ªa, Josep Piqu¨¦, prev¨¦ tener lista en primavera una Ley Audiovisual que presumiblemente incorporar¨¢ la privatizaci¨®n de la gesti¨®n de los canales p¨²blicos regionales.
Las ¨²ltimas del mando a distancia
Si el ¨¦xito en televisi¨®n se mide por audiencia, la cadena auton¨®mica que m¨¢s satisfecha puede sentirse es TV-3. La catalana es la ¨²nica que logra lo que aparentemente deb¨ªa ser lo m¨¢s f¨¢cil, si se tiene en cuenta que los contenidos de estas televisiones est¨¢n pensados para los espectadores de la regi¨®n donde emiten: ser la primera opci¨®n en su comunidad. Ese detalle hizo que, la temporada pasada, la cadena catalana fuera la auton¨®mica m¨¢s vista, con un 21,8% de cuota de pantalla. 'La calidad de TV-3 es bastante buena y cumple la funci¨®n de proporcionar normalidad ling¨¹¨ªstica', asegura el diputado socialista Joan Ferran. 'Y en cuanto a la pluralidad, est¨¢ muy mejorada desde que se cre¨® el Consejo del Audiovisual, que ejerce un control f¨¦rreo de los contenidos y no s¨®lo en cuanto al minutaje del tiempo que corresponde a cada uno'. Sin embargo, tambi¨¦n hay cr¨ªticas: 'Los problemas vienen no tanto por una manipulaci¨®n burda, como en TVE, sino por omisi¨®n; se hace de una manera m¨¢s sutil', a?ade. Lo habitual entre las auton¨®micas es que sean la cuarta opci¨®n de los espectadores en sus comunidades, por detr¨¢s de las televisiones generalistas, pero por encima de La 2. En Andaluc¨ªa, donde Canal Sur tiene un 17,2% de audiencia, lo que m¨¢s se ve es TVE-1, al igual que en Madrid (Telemadrid, 17%); Valencia (Canal 9, 18,2%) y Galicia (16,4%). Los vascos en cambio prefieren Tele 5 y dejan a su segunda cadena, ETB-2, en un 18,3%. En Canarias, donde la auton¨®mica recoge un 9,6% de audiencia, lo que m¨¢s gusta es Antena 3, y en Castilla-La Mancha, la cadena regional (4,8%) es la sexta opci¨®n de los televidentes de la comunidad, por debajo de La 2 e incluso de otra auton¨®mica: Telemadrid (5,9%).
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