'Estaba muerta de miedo y ya tem¨ªa lo peor'

Paricher Gitirokh, propietaria del restaurante Queen Burger, donde ayer estall¨® la bomba colocada por ETA en Torrevieja, recibi¨® la dram¨¢tica noticia a trav¨¦s de una llamada telef¨®nica. En el momento del atentado, la mujer se encontraba en la ciudad de Alicante, adonde hab¨ªa ido a hacer algunas compras. Unos minutos m¨¢s tarde lleg¨® al local y visiblemente consternada solicit¨® primero informaci¨®n sobre su familia y los trabajadores de su negocio. Tras comprobar que nadie hab¨ªa sufrido da?os, contempl¨® los efectos de la explosi¨®n en el local: el interior de su hamburgueser¨ªa estaba pr¨¢cticamente arrasado. 'Fueron s¨®lo 25 minutos de angustia hasta que me confirmaron que todos estaban bien. Estaba muerta de miedo y ya tem¨ªa lo peor', coment¨®. 'A los cinco minutos llam¨® mi hijo y me dijo que estaban bien y ya me seren¨¦'.

En la hamburgueser¨ªa trabajan tres empleados y tambi¨¦n los miembros de la familia propietaria, compuesta por Paricher, de 50 a?os, su marido Amani y sus dos hijos de 24 y 21 a?os de edad. En el momento en que fueron desalojados por la polic¨ªa tras el aviso de bomba hab¨ªa tres personas a cargo del establecimiento y una veintena de clientes se encontraba en su interior, dado que era la hora de la comida.

La propietaria del burger, de origen iran¨ª -insiste en que es persa, para diferenciar su adscripci¨®n en el mosaico de pueblos que componen Ir¨¢n-, tiene la nacionalidad sueca, que adquiri¨® al haber residido durante 30 a?os en Suecia con su marido.

'Un golpe terrible'

Hace ocho a?os se instalaron en Torrevieja donde abrieron este local de comida r¨¢pida. 'Para nosotros ha sido un golpe terrible; esperamos durante todo el a?o a los turistas de agosto y ahora tenemos este atentado', lament¨® la propietaria afectada, que adem¨¢s vive en el piso de arriba del establecimiento, destruido por un artefacto que los terroristas de ETA hab¨ªan colocado en el falso techo de los lavabos. 'Este negocio es mi vida', exclam¨® la mujer, 'y ahora me lo han destrozado'. No obstante, pese a la conmoci¨®n sufrida cuando vio el local lleno de escombros, con las sillas y las mesas hechas a?icos, manifest¨® su satisfacci¨®n porque no se hab¨ªan producido da?os personales.

Una persona que estaba en la puerta del local, de nacionalidad sueca residente en Torrevieja, presenci¨® el desalojo. 'Llegaron los polic¨ªa, y antes que nada hablaron con los trabajadores del establecimiento a los que instaron a buscar entre las cajas o en la basura algun objeto sospechoso', indic¨® esta persona que prefiere guardar anonimato. A los diez minutos llegaron los agentes de la Guardia Civil y desalojaron el local por completo a las cien personas que deambulaban por la zona. 'No entiendo c¨®mo pidieron a los camareros que les ayudaran a buscar el artefacto, si llegan a encontrarlo hubiera sido muy peligroso', coment¨® el testigo del desalojo.