La industria del m¨®vil necesita nuevos servicios
?C?MO DEBER?AMOS LLAMAR a los aparatos que combinan el tel¨¦fono m¨®vil y lo que denomin¨¢bamos ayudante digital personal y que ahora llamamos PDA ?
Los ingleses tienen un nombre, que ya utilizaban para el tel¨¦fono m¨®vil: handy (pr¨¢ctico). Handy es la abreviatura de handheld (de mano), pero tambi¨¦n significa c¨®modo o cercano. Se acerca mucho m¨¢s a una extensi¨®n de la persona -como la mano- que a un PC. Ahora que se unen los m¨®viles y los ordenadores que caben en la palma de la mano, seremos testigos de una proliferaci¨®n de aplicaciones personales, no s¨®lo para los negocios, sino para la vida cotidiana. Con estos aparatos, los consumidores se dar¨¢n cuenta de hasta qu¨¦ punto se pueden personalizar estas herramientas, tanto para nuestro uso personal como para los que quieren contactar con nosotros.
Sus servicios a trav¨¦s del m¨®vil permiten conectar sin molestar a la persona a la que se llama. El receptor identifica al emisor y contesta con respuestas est¨¢ndares
Los consumidores se dar¨¢n cuenta de las posibilidades que hay para personalizar herramientas como el tel¨¦fono m¨®vil o las agendas electr¨®nicas
Es el concepto b¨¢sico de SoloMio, una empresa de Austin (Tejas, Estados Unidos). Espero que triunfe primero en Europa y despu¨¦s en Estados Unidos con su aplicaci¨®n para gestionar las llamadas en el aparato de mano.
La mayor¨ªa de los m¨®viles ya guardan mensajes. Uno llama y lo que oye es: 'El m¨®vil est¨¢ apagado o fuera de cobertura'. Quiz¨¢ podamos dejar un mensaje de voz, pero no tenemos ni idea de cu¨¢ndo lo recibir¨¢ la persona. ?Es muy frustrante!
Cuando intent¨¦ llamar a Richard Schwartz, fundador de SoloMio, estaba en Londres, pero ocupado. 'Me alegro de o¨ªrte', me dijo al responder, '?podr¨ªas llamar en 10 minutos?'
No s¨¦ si fue coincidencia o una demostraci¨®n: de eso va SoloMio. Los servicios que ofrecer¨¢ a trav¨¦s del m¨®vil permiten al usuario conectar sin molestar a la persona a la que se llama. El receptor puede identificar al emisor y contestar con respuestas est¨¢ndares del men¨², en lugar de hablar por tel¨¦fono.
Si SoloMio hubiera funcionado cuando llam¨¦ a Schwartz a Londres, habr¨ªa escuchado una voz diciendo: 'Ahora mismo estoy ocupado. Por favor, ?me podr¨ªa volver a llamar en 10 minutos?', siempre y cuando hubiera reconocido mi n¨²mero o me tuviera en sus contactos.
Si no, habr¨ªa elegido otra opci¨®n de la selecci¨®n o elaborado una propia. Por ejemplo: '?Es urgente?', 'Espere, por favor' o '?Podr¨ªa dejar su nombre y n¨²mero de tel¨¦fono?'. Seg¨²n el modelo de aparato, el usuario podr¨ªa dejar un mensaje de voz o de texto.
SoloMio est¨¢ estableciendo el servicio con diversos proveedores europeos. Y Schwartz est¨¢ aprendiendo mucho. En Estados Unidos sabemos que los europeos est¨¢n m¨¢s adelantados en la cultura del m¨®vil. Pero, seg¨²n Schwartz, cada pa¨ªs tiene una forma de relacionarse diferente.
Por ejemplo, en Italia y Espa?a la gente prefiere responder a todas las llamadas para ser correcta. Y tienen la impresi¨®n de que el correo de voz tambi¨¦n resulta impersonal y grosero. Por eso, el di¨¢logo automatizado es un buen sustituto. En Suiza y Alemania el problema consiste en organizar las llamadas respondidas. 'Quieren dar respuesta, pero de forma programada', afirma Schwartz.
A los ingleses les preocupa ahorrar dinero y son grandes consumidores de mensajes cortos. Tambi¨¦n les interesa distinguir las llamadas de trabajo de las personales. En cambio, seg¨²n Schwartz, otros europeos no se preocupan tanto de la distinci¨®n. Adem¨¢s, los costes y la conexi¨®n m¨®vil internacional pesan mucho, a?ade Schwartz. El receptor quiere asegurarse de que quien haya llamado saque algo de la llamada, adem¨¢s de la posibilidad de dejar un mensaje de voz.
SoloMio tambi¨¦n funciona como esas se?ales que los amigos acuerdan para identificar qui¨¦n llama. Del tipo: 'Dejar¨¦ que suene tres veces y despu¨¦s me llamas'. Pero SoloMio lo hace posible sin necesidad de pactar la contrase?a. SoloMio mantiene en su red la informaci¨®n sobre el suscriptor: lista de contactos, respuestas preferidas y remite mensajes de texto a los suscriptores cuando quieran que SoloMio reciba sus llamadas. El suscriptor elige en un men¨² de respuestas, que SoloMio convierte en respuestas de voz y se las lee a la persona que llama.
El servicio empieza con algunas respuestas comunes de muestra para que el usuario no tenga que hacer nada. Pero es bastante sencillo personalizarlo. Adem¨¢s, observa el comportamiento del usuario y coloca las opciones que se usan con m¨¢s frecuencia en los primeros puestos del men¨².
El verdadero trabajo consiste en decidir c¨®mo se quiere responder. Se puede programar el servicio para que conteste de forma espec¨ªfica cuando no estamos y no podemos elegir.
Est¨¢ previsto el lanzamiento de SoloMio a finales de a?o con proveedores de Espa?a y de la Europa germanohablante. Los operadores quieren personalizar el servicio para su mercado, con algunos clientes empresariales que desarrollen opciones concretas para cada compa?¨ªa. Pueden incluir respuestas como: 'Le paso con el departamento de marketing', 'env¨ªe un informe' o 'por favor, explique el problema para que podamos enviarle al servicio t¨¦cnico. ?A qu¨¦ hora le vendr¨ªa peor?' (perd¨®n, ?era una broma!).
?Por qu¨¦ estoy escribiendo sobre esto ahora? Principalmente, porque este tipo de servicios es lo que ahora necesitamos, tanto en Estados Unidos como en Europa. El cliente deber¨ªa exigirlos y los operadores m¨®viles deber¨ªan empezar a pensar en c¨®mo ofrecerlos, en lugar de quejarse de la lentitud del crecimiento. Me gusta Richard Schwartz, pero ?espero que tenga mucha competencia para hacer mi m¨®vil m¨¢s m¨®vil y pr¨¢ctico!
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