A la captura del voto de HB

La dura reacci¨®n de ETA ante la eventual ilegalizaci¨®n de Batasuna como partido pol¨ªtico da medida de la extraordinaria importancia que concede al trabajo que ha venido realizando HB en su beneficio y refleja tambi¨¦n la gran preocupaci¨®n que tienen los propios dirigentes de la organizaci¨®n abertzale ante las dificultades que acarrear¨¢ esta situaci¨®n. Arnaldo Otegi, por ejemplo, no ha ocultado que la ilegalizaci¨®n les impedir¨¢ mantener una presencia p¨²blica continuada y la apariencia de 'normalidad' que tan buenos resultados les ha dado hasta ahora.

La principal preocupaci¨®n de los abertzales es, sin duda, su probable expulsi¨®n de la vida municipal institucional. Hasta ahora, HB ocupa alcald¨ªas y concejal¨ªas en ciudades y pueblos peque?os, pero si la coalici¨®n es ilegalizada no podr¨¢ concurrir a las pr¨®ximas elecciones y deber¨¢ abandonar todos esos despachos. Es posible que algunos militantes poco conocidos consigan concurrir a los comicios bajo otras siglas o nombres, aqu¨ª y all¨¢, pero es evidente que la ilegalizaci¨®n impedir¨¢ una presencia masiva, as¨ª como los cientos de actos p¨²blicos, el dinero y el despliegue de propaganda oficial de que han dispuesto hasta ahora.

Los dirigentes de Batasuna son conscientes de que una buena parte de su voto se ir¨¢ al PNV, m¨¢s todav¨ªa de lo que ocurri¨® en las pasadas elecciones auton¨®micas. Y los dirigentes peneuvistas no ocultan que har¨¢n todo lo posible para consolidar el voto de Batasuna que recogieron entonces y, si es posible, para aumentarlo. 'El Partido Nacionalista Vasco votar¨¢ en contra de la ilegalizaci¨®n de HB y radicalizar¨¢ su lenguaje por consideraciones electorales, porque quiere capturar su voto', asegura un dirigente socialista acostumbrado a negociar con el PNV. 'Siempre hemos dicho que el PNV quer¨ªa representar a todos los nacionalistas vascos y eso incluye a los de HB. No es una novedad', contesta un antiguo miembro de la ejecutiva peneuvista.

La dificultad, seg¨²n algunos nacionalistas moderados, estriba en que HB (y ETA) crean que el PNV no puede quedarse con sus votos sin contraer al mismo tiempo algunas obligaciones y decidan ejercer toda su presi¨®n para que abra y, sobre todo, acelere el camino de confrontaci¨®n y ruptura con la legalidad espa?ola. As¨ª lo ha explicado ya Otegi y as¨ª figura de manera expl¨ªcita en los mensajes de ETA, que se atribuye el derecho a juzgar los pasos que va dando el PNV.

Uno de los momentos importantes para calcular esa presi¨®n ser¨¢ el pleno del Parlamento vasco previsto, te¨®ricamente, para el 12 de septiembre. El lehendakari Ibarretxe anunci¨® que analizar¨ªa entonces el grado de cumplimiento del Estatuto y adoptar¨ªa, incluso unilateralmente, las medidas que considerara convenientes. No se ve bien qu¨¦ salida puede tener ese pleno, dado que el Gobierno de Aznar se ha negado a negociar nuevas transferencias estatutarias sin que el lehendakari cumpla una serie de condiciones previas y que asumir unilateralmente competencias es algo mucho m¨¢s complicado de lo que parece. De las ¨²ltimas declaraciones de Xabier Arzalluz parece deducirse que el PNV prefiere olvidar, al menos de momento, la v¨ªa de las decisiones unilaterales, la ruptura del marco jur¨ªdico, que tanto temor provoca entre los empresarios vascos, incluidos los nacionalistas, y abrir un cap¨ªtulo de movilizaciones populares.

Lo m¨¢s decisivo llegar¨¢, sin embargo, a partir de febrero o marzo, cuando el Tribunal Supremo dicte su sentencia sobre Batasuna. Si decide ilegalizarla, habr¨¢ llegado el momento de examinar con lupa el comportamiento del PNV y constatar el grado de cumplimiento de la voluntad judicial por parte del Gobierno y de las instituciones vascas. 'El PNV tiene todo el derecho del mundo a votar en contra de la Ley de Partidos Pol¨ªticos, aunque no nos guste', afirma un dirigente socialista, 'pero una vez aprobada esa ley, y por mucho que no les guste a ellos, el Gobierno vasco tiene la obligaci¨®n absoluta de cumplirla y hacerla cumplir'. Hacer otra cosa ser¨ªa caer en la desobediencia civil que pregonan HB y ETA.

Los dirigentes del PSOE ya han hecho llegar a la direcci¨®n del PNV su compromiso firme con la nueva estrategia pol¨ªtica que supone la ilegalizaci¨®n de HB y su deseo de que el PNV reaccione con prudencia y busque cauces de entendimiento con las fuerzas democr¨¢ticas. El PSOE recuerda que ETA acaba de renovar sus ataques y que los militantes socialistas y populares en el Pa¨ªs Vasco est¨¢n hoy m¨¢s amenazados que nunca, y, en consecuencia, m¨¢s necesitados que nunca del apoyo del Gobierno de Vitoria.

Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, que mantiene un contacto fluido con el vicepresidente Mariano Rajoy, (al igual que Alfredo P¨¦rez Rubalcaba lo hace con Javier Zarzalejos, en La Moncloa, y Juan Francisco L¨®pez Aguilar con el nuevo ministro de Justicia, Jos¨¦ Mar¨ªa Michavilla) ha hecho saber, sin embargo, que est¨¢ en desacuerdo con la carta que ha enviado el ministro de Administraciones P¨²blicas, Javier Arenas, al lehendakari Ibarretxe.

La irrupci¨®n de Arenas en el tema vasco ha sido acogida con preocupaci¨®n e irritaci¨®n por los socialistas, que le acusan de buscar protagonismo en un tema que exige modos muy discretos. 'La carta de Arenas est¨¢ pensada como una simple provocaci¨®n, lo que no tiene sentido en un asunto tan grave como el del Pa¨ªs Vasco', critica uno de los responsables socialistas de los contactos con el PP. 'Esperemos que Arenas no se convierta en interlocutor para estos temas y que no mezcle la ilegalizaci¨®n de Batasuna con ning¨²n otro asunto. Hasta ahora, los populares han mantenido que conven¨ªa acelerar el proceso de ilegalizaci¨®n de Batasuna, precisamente para que no se mezclara con otros asuntos y menos a¨²n con el pleno del Parlamento vasco sobre el grado de autogobierno y el desarrollo del Estatuto y deseamos que sigan en esa l¨ªnea, mucho m¨¢s sensata'.