Nuevas tasas en verano

En pleno verano, los becarios de investigaci¨®n y doctorandos de Madrid reciben una carta de la universidad en la que se apremia para pagar unas nuevas tasas de matr¨ªcula que han decido aplicar -en cumplimiento del decreto 87/2001 de la Comunidad de Madrid, seg¨²n dicen-, y con la amenaza de que, de no hacerlo en el plazo previsto, se podr¨ªa anular la inscripci¨®n de la tesis doctoral.

Esto, por supuesto, hace que todos nos precipitemos a pagar apresuradamente, abandonando toalla, ba?ador o beca de intercambio en el extranjero. Y es que encima pretenden que lo hagamos sin rechistar.

Por toda explicaci¨®n nos dicen en ventanilla que es una tasa nueva, que se ve¨ªa venir, que no hay recurso posible y que nos animemos, 'son s¨®lo mil pesetillas de nada al mes' (la tasa son 72,18 euros cada a?o hasta que se lea la tesis doctoral).

Y es que, antes, cuando un doctorando hab¨ªa cumplido con sus cursos y ten¨ªa su tesis inscrita, ya pod¨ªan pasar veinte a?os hasta que la leyese, que no hab¨ªa matr¨ªcula ni pago alguno a la universidad. Pero han cambiado las tornas: los becarios de investigaci¨®n tienen desde hoy -despu¨¦s de haber pagado todo lo que correspond¨ªa durante la carrera y los cursos de doctorado- una nueva carga, impuesta en pleno verano para quitarles las ganas de protestar. Se impone una nueva tasa a los investigadores de la universidad madrile?a, en aplicaci¨®n de las nuevas reformas de la ense?anza superior.

As¨ª, una vez m¨¢s, se pone de manifiesto la nefasta pol¨ªtica del Gobierno en la universidad, en la que cada vez se ponen nuevas trabas -econ¨®micas y de todo ¨ªndole- a la investigaci¨®n. Pero la nueva reforma de la ense?anza necesita m¨¢s dinero, que sale, como de costumbre, de quienes menos tienen o de quienes est¨¢n m¨¢s desprevenidos.