"Me he comido muy pocas roscas"
A sus 73 a?os, este gijon¨¦s, padre de tres hijos, parece estar bati¨¦ndose en retirada. Quej¨¢ndose de la edad y de la falta de pelo, metido en sus nostalgias, reconoce que su ¨²nica afici¨®n ha sido el teatro, y dice con humildad: 'S¨¦ las cuatro reglas, y escribir poco correctamente'. Como f¨®rmula para ligar, propone un comienzo cauto: 'Chatina, yo a ti te gusto?'
Pregunta. Medio siglo de escena. ?No se cansa?
Respuesta. Adoro mi profesi¨®n. Y cuando adquieres ¨¦xito, del ¨¦xito no te cansas nunca.
P. En oto?o seguir¨¢ con El smoking. ?Y luego?
R. No lo s¨¦. Hay una edad en la que nunca piensas en ma?ana, sino que te invaden much¨ªsimo las nostalgias, los recuerdos.
P. Afirma que le relaja la imagen que le devuelve el espejo. ?Tan ideal se encuentra?
R. El espejo y yo nos llevamos muy bien. Le digo: 'Espejito, espejito, d¨¦jame como hace quince a?os'. Y lo vengo consiguiendo.
P. ?Pero no est¨¢ usted un poco carroza para seguir de gal¨¢n?
R. [Carcajada] No lo s¨¦. Def¨ªname usted, que es mujer.
P. ?En la vida civil se ha comido tantas roscas como en escena?
R. Me he comido muy pocas roscas, porque siempre he sido hombre de una sola mujer, aunque parezca lo contrario. Y, sobre todo, he tenido una mujer que es mi profesi¨®n.
P. Las vecinas de su madre le gritaban: 'Artur¨ªn, no dejes pre?ada a ninguna' y 'Pega un braguetazo'. ?Las hizo caso?
R. Yo entonces no entend¨ªa lo que significaba el braguetazo. Y qu¨¦ duda cabe de que no hab¨ªa tantas posibilidades de no quedarse embarazada como ahora.
P. O sea, que hizo estragos.
R. No, no. Y sigo sin saber lo que es un braguetazo. Nunca he visto un gigol¨® que se colocara.
P. ?Su raya del pantal¨®n es como el peinado de James Bond, que no hay fragor que lo altere?
R. Vengo de una generaci¨®n en la que quien ten¨ªa un traje era un fen¨®meno. Y la raya del pantal¨®n se ten¨ªa muy en cuenta.
P. ?Qu¨¦ es la elegancia?
R. Algo innato en la persona. Un obrero con un mono puede ser elegante.
P. D¨ªgame alguien que no tenga remedio en este terreno.
R. Los dirigentes de UGT y de CCOO M¨¦ndez y Fidalgo. Ah¨ª ya no hay nada que hacer.
P. Dijo del cine: 'Desde que la mula Francis y Rin Tin Tin hicieron grandes interpretaciones, no le doy importancia'. ?No se pone estupendo?
R. Es que un actor se hace exclusivamente en el teatro, no en la televisi¨®n ni en el cine. Ponga a Rin Tin Tin en un escenario y ver¨¢ lo que le hace.
P. El alcalde de Oviedo, Gabino de Lorenzo, le ha comparado con Marcello Mastroianni. ?Se le fue la mano?
R. Pienso que es exceso de amistad o de cari?o hacia m¨ª. Qu¨¦ m¨¢s quisiera yo.
P. ?C¨®mo le va en la Espa?a de Aznar?
R. Francamente bien. Son gente que ha entrado sin ruido,sin trajes de pana, sin enga?ar a nadie; y hasta ahora abundan m¨¢s los ¨¦xitos que los fallos.
P. Con un padre anarquista, ?usted sali¨® as¨ª por la pura ley del p¨¦ndulo?
R. Mi padre volvi¨® del exilio muy decepcionado de la pol¨ªtica, sobre todo de sus propios compa?eros. Era obrero, y consigui¨® que su hijo tuviera un marchamo de burgu¨¦s para los gilipollas.
P. ?Se ha operado de algo?
R. Del hombro [risas]. Si yo me opero de algo, me temo que vuelvo otra vez a la mili.
P. 'La ¨²nica mujer a la que he querido fue mi madre'. ?Se lo ha mirado el m¨¦dico?
R. [Carcajada] Soy hijo ¨²nico, y mi madre siempre se ha sacrificado por m¨ª.
P. Dijo que, en su anterior reencarnaci¨®n, fue un general cartagin¨¦s. ?No mola mucho m¨¢s eso que ser Arturo Fern¨¢ndez?
R. Es que ahora ya no pienso en la reencarnaci¨®n.
P. Ha abandonado el casco, la lanza y el barco.
R. Totalmente. Y con gran decepci¨®n y sentimiento. Aunque la lanza y el casco tienes que llevarlos muchas veces, para defenderte.
P. ?C¨®mo disfruta de la vida?
R. Actualmente disfruto poco, y lo digo con sentimiento, porque me he aferrado a la idea de que ya me va quedando poco tiempo para seguir besando a mis hijos y acariciando a mi mujer.
P. Da la impresi¨®n de estar tirando la toalla teatral y rindiendo la espada cartaginesa.
R. Pero con condiciones.
P. ?Es por su confesado miedo a la vida por lo que lleva el cuello de medallas como un altarcillo de torero?
R. S¨ª, llevo bastantes. En esta vida, lo que te han inculcado en la ni?ez es lo que te queda. Yo soy incapaz de ir a misa, pero encuentro una gran paz cuando entro en una iglesia.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.