Bunbury, Loquillo, Calamaro y Jaime Urrutia se unen para grabar
Los cantantes planean realizar pr¨®ximamente una gira conjunta
Alg¨²n bromista dec¨ªa que era la versi¨®n espa?ola del 'Cuarteto del Mill¨®n de D¨®lares', la legendaria reuni¨®n de Elvis Presley, Carl Perkins, Jerry Lee Lewis y Johnny Cash all¨¢ por el a?o 1956. En el estudio madrile?o Doubletronic se juntaron hace unos d¨ªas Bunbury, Loquillo, Calamaro y Jaime Urrutia, para grabar una nueva versi¨®n de un tema de este ¨²ltimo, ?D¨®nde est¨¢s?, una balada rock sobre los fantasmas de los viejos amores que DRO lanzar¨¢ pr¨®ximamente. La cita puede repetirse en una gira.
Urrutia confiesa que la grabaci¨®n es una consecuencia de la apote¨®sica reacci¨®n del p¨²blico en la Plaza de las Ventas, durante el concierto del pasado 4 de julio: 'Cuando salieron Enrique o el Loco a cantar con mi banda, la temperatura se dispar¨®. Yo renunci¨¦ a llamarles a la hora de grabar mi primer disco, Patente de corso, para que no pareciera que ten¨ªa miedo de presentarme totalmente en solitario. Ahora mismo, el disco sigue funcionando y ya no tengo esos prejuicios. Adem¨¢s, estaba la posibilidad de trabajar con Andr¨¦s, que se hab¨ªa postulado como productor de mi disco. Pero fue imposible por su...'.
Los puntos suspensivos se refieren al radical alejamiento de la vida p¨²blica de Andr¨¦s Calamaro, que lleva m¨¢s de dos a?os sin actuar, encerrado en sus pisos de Buenos Aires o Madrid, grabando sin cesar -veinte de estas piezas crudas est¨¢n disponibles gratuitamente en Internet- pero neg¨¢ndose a las peticiones de su compa?¨ªa para entrar en un estudio y confeccionar un disco de canciones con sonido profesional.
Para sorpresa de todos, Calamaro se present¨® a poner su voz en ?D¨®nde est¨¢s? y, al d¨ªa siguiente, particip¨® en el correspondiente v¨ªdeo promocional.
All¨ª, el autor de Honestidad brutal coincidi¨® con antiguos compa?eros de escenario, como el guitarrista Guillermo Mart¨ªn y el baterista Germ¨¢n Vilella, ahora miembros de la banda de Jaime Urrutia.
Durante esas sesiones, Calamaro manifest¨® su deseo de volver a actuar en directo, reforzando una idea que ya estaba en el aire.
El proyecto de salir en grupo a la carretera tiene ya nombres jocosos: 'La gira del Alka-Seltzer' o 'Los Travelling Bunburys' (en referencia a The Travelling Wilburys, el supergrupo de los ochenta formado por Bob Dylan, Roy Orbison, Jeff Lynne y Tom Petty).
Habr¨ªa que ajustarse a los calendarios de los participantes: as¨ª, Loquillo publica pr¨®ximamente un recopilatorio para celebrar sus 25 a?os de actividad. y Bunbury tiene numerosos compromisos en Am¨¦rica, donde aprovechar¨¢ para grabar en varios estudios mientras estudia con qu¨¦ compa?¨ªa -hay cuatro candidatas- firma su pr¨®ximo contrato.
Emocionado
A pesar de todo, Bunbury est¨¢ emocionado con el plan. 'La ¨²nica respuesta posible a la avalancha de vulgaridad sonora que nos vende la televisi¨®n es que los m¨²sicos recordemos al p¨²blico que hay otras opciones. El rock tiene su propio espacio pero cada d¨ªa tenemos que acotarlo y defenderlo. Hemos entrado en una din¨¢mica en que la m¨²sica es lo menos importante, va por detr¨¢s de la mercadotecnia, los patrocinios, los montajes publicitarios.'
Consecuente con su actitud, Bunbury rodaba el pasado martes el clip correspondiente a S¨¢came de aqu¨ª, de su disco Flamingos, en la suite de un hotel, rodeado de sus m¨²sicos y escenificando lo que podr¨ªa ser un d¨ªa corriente en una gira: ensayos, el encuentro con amigos y periodistas, una sesi¨®n informal de fotos, todo rodado con t¨¦cnicas de nouvelle vague.
Bunbury duda de que haya mucha creatividad en los videoclips actuales: 'La mayoria se basan en un erotismo simpl¨®n o en historias que abaratan la canci¨®n y adormecen la imaginaci¨®n. Me parece que el carisma de los Doors, Led Zeppelin, los Beatles o Elvis Presley se mantiene por haber tenido la fortuna de vivir en una ¨¦poca en que hacer v¨ªdeos no era la norma'.
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