La cantera del ministro

En un congreso sin apenas renovaci¨®n ideol¨®gica, los s¨ªmbolos desempe?ar¨¢n un papel muy importante. Y en el nuevo PP catal¨¢n que Josep Piqu¨¦ quiere proyectar a la sociedad, dos j¨®venes diputados en el Congreso simbolizan como pocos la imagen que el ministro quiere promocionar: Jordi de Juan (L'Escala, Alt Empord¨¤, 1967) y Jos¨¦ Luis Ayll¨®n (Barcelona, 1970) fueron elegidos, no por casualidad, para redactar la ponencia pol¨ªtica del congreso que elevar¨¢ al ministro a la presidencia regional.

De Juan y Ayll¨®n tienen un perfil similar, que agrada a Piqu¨¦. Son diputados j¨®venes, abogados con experiencia laboral anterior a su entrada profesional en la pol¨ªtica -De Juan, como abogado del Estado, Ayll¨®n como asesor fiscal-, centristas, moderadamente catalanistas y de porte muy serio; siempre han tenido claro lo que esperan de la vida y de la pol¨ªtica, y han ido cumpliendo todos los plazos que se han fijado sin dejar margen a la improvisaci¨®n o a la duda; hoy ambos est¨¢n casados, tienen un hijo y son lo que siempre desearon: diputados en Madrid.

Jordi de Juan es la otra estrella ascendente del partido en Girona. La fren¨¦tica actividad de Alicia S¨¢nchez Camacho ha convertido a la diputada auton¨®mica, presidenta provincial y portavoz regional en la figura m¨¢s conocida de la formaci¨®n en Girona, pero De Juan ha ido ganando sigilosamente enteros a los ojos del ministro. Ambos nacieron con un solo d¨ªa de diferencia, pero son como el d¨ªa y la noche: todo lo que S¨¢nchez Camacho tiene de rauxa, De Juan lo tiene de seny. La primera roza las posturas socialdem¨®cratas y tiene a Keynes entre sus referentes; el segundo se enorgullece de sus planteamientos neoliberales y se siente parte de la tradici¨®n liberal-conservadora espa?ola, en la que incluye a C¨¢novas, Maura y Camb¨®. De ah¨ª que las relaciones entre ambos disten de ser id¨ªlicas.

Hijo de tenderos bien situados -estudi¨® en la influyente escuela privada El Cullell-, De Juan se afili¨® al PP en 1990, justo cuando aterrizaba Aleix Vidal-Quadras, entonces portando la bandera del catalanismo. Pero la afiliaci¨®n se qued¨® en un hecho formal. Con 23 a?os y al igual que hicieron en su d¨ªa Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar y Artur Mas, consideraba que lo que le correspond¨ªa hacer en aquel momento era labrarse un buen futuro profesional y encarrilar su vida.

Las inquietudes pol¨ªticas que sent¨ªa desde ni?o -sus padres se quedaban pasmados cuando, con 10 a?os, segu¨ªa todos los discursos de Mart¨ªn Villa- las dej¨® para m¨¢s adelante. El a?o 1996 marca la l¨ªnea divisoria: aprob¨® las oposiciones, se convirti¨® en el abogado del Estado jefe de Girona y se cas¨®. Una vez logrados con creces sus objetivos, se lanz¨® a la pol¨ªtica aprovechando los contactos que ten¨ªa en el aparato del PP en la calle de G¨¦nova de Madrid: en 1999 fue el jefe de filas del PP en el Ayuntamiento de Girona y en 2000 gan¨® el esca?o en el Congreso m¨¢s sensible para el PP: hac¨ªa 14 a?os que no sal¨ªa elegido ning¨²n diputado popular por Girona. De Juan puso fin a esta anomal¨ªa, con lo que, junto con su trabajo en el Congreso, se ha ganado la simpat¨ªa de Piqu¨¦.

Ayll¨®n, por su parte, se afili¨® en 1986 y enseguida se implic¨® a fondo en las juventudes del partido, donde ocup¨® varios cargos, incluida la presidencia regional entre 1997 y 2000. Fue, junto con el diputado auton¨®mico Daniel Sirera, uno de los j¨®venes que m¨¢s empuj¨® para que el PP catal¨¢n hiciera en la Diada una ofrenda floral a Rafael Casanova. En 1992 los j¨®venes se adelantaron al partido, que hizo suya la idea el a?o siguiente.

En 2000, tras cesar como l¨ªder de los j¨®venes, medit¨® volver a ejercer de abogado ante la falta de expectativas que le ofrec¨ªa el partido en Catalu?a, pero fue rescatado por La Moncloa y trabaj¨® como asesor en el equipo del hoy subdirector del Gabinete de Aznar, Javier Fern¨¢ndez-Lasquetty. La renuncia de Guillermo Gort¨¢zar le dio en 2001 el esca?o en el Congreso con el que siempre hab¨ªa so?ado.

La imagen de serio le viene de lejos, y ya de ni?o le colgaron el mote de Papi por su continua exhibici¨®n de responsabilidad. Es ¨¦ste uno de los rasgos de su car¨¢cter, pero sus amigos aseguran que en la intimidad es capaz de declararse republicano y seguidor del canalla y rojo Joaqu¨ªn Sabina.