El petr¨®leo amenaza la econom¨ªa
El barril roza los 30 d¨®lares y dispara las alarmas en los pa¨ªses consumidores
El precio del petr¨®leo lleg¨® a los 30 d¨®lares durante la semana pasada, un m¨¢ximo de a?o y medio, y las situaci¨®n ya ha disparado las alarmas entre los Gobiernos de los pa¨ªses industrializados. En plena crisis econ¨®mica, un alto precio del crudo es lo que menos se necesita. La amenaza de una guerra en Irak empeora las cosas y los pa¨ªses exportadores han adoptado la pol¨ªtica de esperar y ver.
La situaci¨®n en el mercado es de m¨¢xima volatilidad, mucho mayor de la que habitualmente soporta. La cotizaci¨®n del barril se ha disparado m¨¢s de un 40% en lo que va de a?o y en la ¨²ltima semana roz¨® los 30 d¨®lares. La ¨²ltima vez que estuvo a ese precio de forma estable fue a mediados de 2000, la ¨¦poca en que se vivieron manifestaciones en toda Europa por la escalada de los carburantes y en la que los Gobiernos de los pa¨ªses consumidores, como Espa?a, perdieron el control sobre la inflaci¨®n. El peligro de que eso se repita en lo ¨²ltimos meses de este a?o est¨¢ a la vuelta de la esquina.
La producci¨®n, en principio, no es un problema. A pesar de que la Organizaci¨®n de Pa¨ªses Exportadores de Petr¨®leo (OPEP) mantiene su nivel de extracci¨®n en un m¨ªnimo de 11 a?os, en 21,7 millones de barriles diarios, en la realidad est¨¢n produciendo en torno a 23,5 millones, sin contar a Irak, que extrae 1,5 millones m¨¢s. Sin embargo, la demanda est¨¢ creciendo m¨¢s acelaradamente que el suministro. En agosto pasado, el mundo demand¨® 78,6 millones de barriles diarios y se produjeron s¨®lo 76,7 millones.
La raz¨®n de la fuerte demanda no es el crecimiento econ¨®mico mundial. Muy por el contrario, hay una crisis que frena el consumo. Quienes est¨¢n realmente demandando crudo son las compa?¨ªas petroleras y los Gobiernos. La empresas est¨¢n comprando ante la expectativa de que esta tensi¨®n preb¨¦lica entre EE UU e Irak se alargue y tambi¨¦n porque si estalla el conflicto se teme que pueda haber una interrupci¨®n del suministro. Las petroleras compran pensando que el precio subir¨¢.
Los Gobiernos de los pa¨ªses consumidores, y en especial el estadounidense, se preparan para una guerra y lo que no puede faltar ante la previsi¨®n de un conflicto es justamente petr¨®leo. S¨®lo un gran despliegue de tropas, sin que ¨¦stas lleguen a entrar en acci¨®n, supone un importante aumento del consumo de derivados del crudo. En los dem¨¢s pa¨ªses, como los europeos, tanto los Gobiernos como las petroleras intentan mantener sus reservas al m¨¢ximo.
La OPEP, mientras tanto, se ha decantado por la pol¨ªtica de 'esperar y ver'. Los 10 miembros de la organizaci¨®n (son 11, pero Irak no participa de las decisiones) que determinan si hay que poner m¨¢s crudo en el mercado creen que ahora m¨¢s petr¨®leo no hace falta, debido a que hay una crisis econ¨®mica. Los altos precios los achacan a movimientos especulativos y de aumento de reservas por parte de las petroleras a ra¨ªz de la proximidad de una guerra en el coraz¨®n de Oriente Pr¨®ximo, la zona petrolera del mundo por excelencia. La OPEP tambi¨¦n ha afirmado que si se produce el conflicto y hay una interrupci¨®n del suministro aumentar¨¢ su producci¨®n inmediatamente.
Esta afirmaci¨®n no ha tranquilizado al mercado, porque creen que la mayor¨ªa de los pa¨ªses de la OPEP, excepto Arabia Saud¨ª y, en menor medida, Libia y Argelia, est¨¢n al m¨¢ximo de capacidad de producci¨®n. Por otra parte, Rusia, el gran exportador, ya ha anunciado que deber¨¢ reducir sus exportaciones porque crecer¨¢ el consumo interno. Sin embargo, los expertos creen que ese recorte se debe a que la producci¨®n de Rusia tambi¨¦n est¨¢ al m¨¢ximo. Hoy todo apunta a que el crudo se mantendr¨¢ rozando los 30 d¨®lares, por lo menos hasta febrero, fecha para la que se espera el ataque de EE UU contra Irak. Tambi¨¦n se prev¨¦ un aumento considerable de los carburantes.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.