R¨¦plica al alcalde de Loja

En la carta firmada por el alcalde de Loja publicada el 26 de agosto se hacen algunos comentarios que, adem¨¢s de ser inciertos, ponen en duda mi honestidad y trayectoria y que deben ser, por tanto, objeto de r¨¦plica por mi parte:

1. El alcalde de Loja no da ni un solo argumento que justifique mi discriminaci¨®n para acceder al puesto de tesorero del Ayuntamiento. Por el contrario hace referencia continua a mi actividad sindical o supuesta militancia pol¨ªtica, lo cual da las claves de cu¨¢les son los motivos reales que le han llevado a impedir no s¨®lo mi nombramiento para el puesto sino incluso cualquier posibilidad de participar en su provisi¨®n. Y esta evidencia se refuerza cuando reconoce textualmente que 'en ning¨²n momento hemos puesto en duda ni la val¨ªa, ni la inteligencia de este funcionario'.

2. Hace menci¨®n el alcalde a que durante el mandato 1995-1999 (con alcalde del PP) acced¨ª al puesto de tesorero mediante 'pura y dura designaci¨®n a dedo'. Si eso hubiese sido cierto no entiendo c¨®mo el alcalde, entonces viceportavoz del PSOE en el Ayuntamiento, no denunci¨® la irregularidad. Sin embargo, ¨¦l conoce perfectamente, aunque lo silencia en su carta, que mi designaci¨®n el 26 de febrero de 1998 fue realizada dentro de un proceso selectivo (Expediente 494/97, para la provisi¨®n de varios puestos de trabajo, entre ellos el de tesorero) cuyas bases fueron aprobadas por unanimidad (por tanto, tambi¨¦n con su voto) en el Pleno del 6 de mayo de 1997. Que para el puesto de tesorero nos presentamos dos personas, que ambos ten¨ªamos el t¨ªtulo de Licenciado en Derecho pero yo acredit¨¦ experiencia en el puesto y pertenecer al mismo departamento y la otra persona no.

3. Me acusaba el alcalde de 'haber utilizado mi condici¨®n de miembro de un sindicato como trampol¨ªn para mis propios intereses'. Esta afirmaci¨®n no s¨®lo es injuriosa hacia mi persona sino que cualquiera que conozca m¨ªnimamente mi trayectoria y mi situaci¨®n en este Ayuntamiento no puede m¨¢s que sonre¨ªrse o indignarse por una afirmaci¨®n tan falsa. Por cierto, si el PSOE ha gobernado casi siempre en el Ayuntamiento de Loja (Miguel Castellano antes que alcalde fue concejal de Hacienda cuatro a?os) ?qui¨¦n me habr¨ªa beneficiado? ?C¨®mo un 'dem¨®crata convencido que acata y defiende la Constituci¨®n' no denunci¨® desde sus puestos de concejal de Hacienda, de viceportavoz de la oposici¨®n o como alcalde mis supuestos privilegios? Quiz¨¢ el alcalde no se acuerde, pero es cierto que una vez tuve un trato privilegiado: En 1989, tras la jubilaci¨®n de un compa?ero, fui nombrado 'a dedo' por el alcalde de entonces (PSOE) como administrativo (entonces yo era auxiliar). Por mi parte, en un escrito, manifest¨¦ al alcalde mi deseo de ser administrativo pero por los cauces legales, la respuesta del alcalde fue la de mi cese inmediato como administrativo y a los pocos meses me abri¨® expediente disciplinario y me suspendi¨® cautelarmente de empleo y sueldo (aunque luego el expediente, que carec¨ªa de cualquier base objetiva, no lleg¨® ni siquiera a resolverse y caduc¨®).

4. Soy plenamente consciente de que mi denuncia p¨²blica de esta discriminaci¨®n dif¨ªcilmente me va a reportar ning¨²n beneficio pr¨¢ctico (porque es una lucha de David contra Goliat) pero he decidido que a la injusticia de la discriminaci¨®n no van a unirle la humillaci¨®n del silencio.

5. Por ¨²ltimo, decir que el alcalde podr¨¢ lesionar mis derechos profesionales, podr¨¢ hacer contra m¨ª todo tipo de acusaciones falsas e injuriosas, pero mi dignidad y mi trayectoria no alcanza ni tan siquiera a rozarlas.