?Acabar¨¢n vendiendo nuestras almas?

Me parece que roza la desfachatez (muy frecuente en la gesti¨®n del PP, por cierto) lo que se plantea en la noticia que he podido leer sobre la venta a empresas de los datos del censo electoral y que por defecto se considere la inclusi¨®n en las listas ofertadas salvo que cada cual se manifieste expresamente en contra.

?Para qu¨¦ se molestaron en aprobar la LOPD (Ley Org¨¢nica de Protecci¨®n de Datos) si no van a proteger nuestros datos y encima nos obligan a molestarnos para evitarlo?

?Qu¨¦ gasto tremendo supone enviar una carta a todas las personas inscritas en el censo electoral para que a su vez tengan que gastar su dinero y su tiempo en solicitar que no sean incluidos en dichos listados?

Por otra parte, me produce finalmente el cortocircuito total saber que el d¨ªa 12 de octubre entra en vigor la LSSI (Ley de los Servicios de la Sociedad de la Informaci¨®n), en la que en su art¨ªculo 21 manifiesta la prohibici¨®n de enviar comunicaciones publicitarias por correo electr¨®nico u otro medio de comunicaci¨®n electr¨®nica si previamente no han sido solicitadas o expresamente autorizadas por los destinatarios de las mismas, estableciendo sanciones que pueden llegar a los 150.000 euros por este motivo (art¨ªculo 39).

Mi mente sencilla no es capaz de entender estas contradicciones tan extremas.

?Qu¨¦ pasa entonces, que Internet es un mundo aparte y en el mundo 'real' s¨ª que vale todo siempre que se pueda obtener un beneficio econ¨®mico? Cualquier d¨ªa me enterar¨¦ de que han vendido mi alma al diablo y que me quemar¨¦ en los infiernos eternamente por no haberme opuesto en el plazo requerido.

Hace alg¨²n tiempo le¨ª un art¨ªculo (no recuerdo qui¨¦n era el autor) en el que se dec¨ªa que nuestra democracia parec¨ªa m¨¢s una 'aristocracia electiva', en la que cada cuatro a?os eleg¨ªamos a quien nos gobernaba, que iba a hacer lo que le viniera en gana, sin contar con los electores hasta cuatro a?os despu¨¦s, decidiendo en ese momento si se manten¨ªa la confianza en el elegido o se castigaba su gesti¨®n.

El PP est¨¢ llevando este m¨¦todo de gobierno a sus extremos y creo que va siendo hora de que nuestros gritos les lleguen en las urnas, ya que lamentablemente hacen o¨ªdos sordos el resto de la legislatura.