La Real se instala en su nube
El cuadro de Denoueix pierde juego, pero ante un Valladolid serio conserva su acierto
La Real Sociedad sigue sumando de tres en tres. Ah¨ª est¨¢ la noticia, porque el conjunto de Raynald Denoueix conserva intacto su acierto y sigue celebrando un comienzo liguero impresionante. Su juego, eso s¨ª, se desinfla con la misma facilidad con la que caen los goles en su cuenta. De vuelta a su pasado reciente, la vitalidad de la Real se hizo ayer a un lado para saludar el regreso de lo cutre, un viejo amigo. Los goles disimularon su demostraci¨®n de imprecisi¨®n bostezante, que supone un caprichoso paso atr¨¢s en el juego de un equipo que aspira al liderato. Todo lo contrario sucedi¨® con el Valladolid, que sigui¨® en su carril, donde el f¨²tbol es gris pero hasta ayer rentable.
La Real arranc¨® sobrada de suficiencia, que no de ideas, y empez¨® a torcer el morro en cuanto comprob¨® que los vallisoletanos no se derret¨ªan ante su cartel de equipo revelaci¨®n. Cosa extra?a en Anoeta, la Real no dispon¨ªa del bal¨®n y lo buscaba al trote. Eso tuvo que mosquear a la concurrencia porque el equipo donostiarra, lloviera o luciese el sol, hab¨ªa acostumbrado a la grada a exhibir sus ganas desde el pitido inicial. Ayer aire¨® su indolencia, culpa quiz¨¢ del rival, uno de esos equipos feos, parecido al que sali¨® espantado de Anoeta hace un a?o con un 6-0 en el cogote.
REAL SOCIEDAD 2| VALLADOLID 1
Real Sociedad: Westerveld; Rekarte, Jauregi (Boris, m. 76), Sch¨¹rrer, Aranzabal; Karpin, Xabi Alonso, Aramburu, De Pedro (Gabilondo, m. 76); Nihat y Kovacevic. Valladolid: Bizarri; Torres G¨®mez, Pe?a, Mario, Marcos; Chema (Pach¨®n, m. 75), Colsa, Ricchetti (Caminero, m. 81), Olivera (?scar, m. 61); Aganzo y Sales. Goles: 1-0. M. 65. Mario no acierta a despejar un saque de porter¨ªa y lo recoge Nihat para fusilar a Bizarri. 2-0. M. 67. Xabi Alonso deja el bal¨®n atr¨¢s para que Karpin, desde la frontal del ¨¢rea, lo coloque por la escuadra izquierda. 2-1. M. 71. Colsa bate a Westerveld de falta directa. ?rbitro: Puentes Leira. Amonest¨® a Aganzo, Rekarte, Aranz¨¢bal, Karpin. Unos 20.000 espectadores en Anoeta.
La Real se imagin¨® que, tarde o temprano, Xabi Alonso o Karpin se inventar¨ªan un pase de los que gustan a Nihat, uno de los que descoloca a la defensa rival. Pero s¨®lo pudo imaginarlo porque Alonso estaba enfrascado en una pelea por recuperar balones y Karpin no es, de momento, el que suele ser, pese al gol que obtendr¨ªa mucho m¨¢s tarde. As¨ª, el cuadro vasco trat¨® de buscar en el tr¨ªo arbitral las razones de su atasco. S¨®lo hall¨® tarjetas amarillas y, supuestamente, la bronca de su entrenador en el vestuario.
Escaso de talento, pero sobrado de concentraci¨®n, el Valladolid se adue?¨® de la pelota y no dej¨® de fabricarse jugadas de ataque, limitadas pero insistentes. As¨ª sumaba hasta ayer siete puntos con s¨®lo tres goles, tirando de presi¨®n y de una zaga eficaz y bien colocada, salvo en lo que respecta a la pifia cometida ayer por Mario. El central salt¨® a destiempo para despejar un saque de porter¨ªa y regal¨® un gol al atento Nihat. Ah¨ª se rompi¨® el partido. Sin juego ni nada, la Real tiraba de oportunismo. Y de Nihat, que sigue siendo de lo mejor del equipo porque su ilusi¨®n y sus ganas de reivindicarse no le permiten despistes ni tardes indolentes. Volvi¨® a hacerlo a los dos minutos, aprovechando que el Valladolid deambulaba anonadado por las consecuencias del primer gol, que destrozaba todo su trabajo de contenci¨®n.
Cuando se repuso el equipo de Mor¨¦, lo hizo para prescindir de precauciones y caer en el escenario preferido de los donostiarras, letales en sus contras. Colsa acort¨® distancias, de falta, c¨®mo no, porque el equipo pucelano sufr¨ªa horrores para encarar la porter¨ªa local con peligro. Kovacevic estrell¨® un penalti en el travesa?o. Les falt¨® tiempo para hacerse da?o.
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