Lavapi¨¦s, contra los conductores insolidarios

A partir de ahora, todo conductor que circule por el barrio de Lavapi¨¦s deber¨¢ tener en cuenta tres se?ales nuevas, adem¨¢s de las del C¨®digo de Circulaci¨®n. La primera consiste en una pegatina verde, con la siguiente leyenda: 'Molesta'. Su tama?o es lo suficientemente grande como para fastidiar bastante al propietario que la encuentre estampada en su veh¨ªculo, y para delatarle ante el resto de los ciudadanos por insolidario.

La segunda es amarilla y dice: '?Sigue molestando!'. En la ¨²ltima, que es roja, se lee: '??Va a dejar de molestar?!'. Y es que los peatones de Lavapi¨¦s no perdonan. Hartos de no poder desplazarse sin tener que ir sorteando todo tipo de obst¨¢culos por culpa de los coches mal aparcados, han lanzado ya una campa?a a la que llaman Inspecci¨®n Peatonal de Veh¨ªculos, y en la que pueden participar todos los residentes del barrio. Es bien f¨¢cil: s¨®lo hay que ir poniendo las pegatinas de colores en los coches o dem¨¢s bultos que impidan andar con normalidad por las aceras del barrio. Pero ah¨ª no queda todo, porque los tres colectivos de los que parte la iniciativa, A pie, la Red Lavapi¨¦s y la Fiambrera Obrera, amenazan con extender la campa?a al resto de la ciudad.

Los males peatonales de los que adolece el barrio m¨¢s castizo de Madrid los causan los coches mal aparcados, que son legi¨®n all¨ª donde se encuentra una gran superficie, y los embotellamientos que provocan los camiones de carga y descarga. Adem¨¢s, todas las aceras est¨¢n acotadas por los invencibles bolardos.

La guinda la ponen la acumulaci¨®n de los residuos de cart¨®n que dejan en la calle los responsables de las tiendas de mayoristas, que est¨¢n invadiendo el barrio. 'Los colocan directamente en la calle, a cualquier hora del d¨ªa, y acaban invadiendo las calles. Este barrio se ha convertido en un pol¨ªgono industrial', asegura Jes¨²s Mart¨ªn, de la Red de Lavapi¨¦s, una agrupaci¨®n que engloba a distintos colectivos del barrio. Y la cosa es grave, porque, tal y como calcula este vecino, entre las calle de Embajadores y la de Lavapi¨¦s, l¨ªmites del barrio, llegan a juntarse 800 de estos comercios.

'Puedo decir que el 90% de las tiendas que hay en Lavapi¨¦s son de mayoristas. Producen residuos que el barrio no puede asimilar ni resolver. Est¨¢n terminando con el resto de tiendas de la zona, y la gente tiene que desplazarse cada vez m¨¢s lejos para hacer la compra', a?ade Mart¨ªn. As¨ª que buena parte de las pegatinas de colores ir¨¢n a parar a estas molestas cajas de cart¨®n. Ramiro Feijoo, del colectivo A pie, destaca otro dato: 'Los principales afectados son los discapacitados f¨ªsicos, gente mayor y padres con ni?os'. 'Este barrio tiene calles de dos metros. Es bastante normal no poder ir hablando con un amigo caminando por la calle, porque no se cabe', a?ade Paco Serrano, de la Red de Lavapi¨¦s.

La idea de colocar pegatinas en los coches u obst¨¢culos molestos rondaba por la cabeza de muchos vecinos y asociaciones. Para ponerla en pr¨¢ctica se juntaron la Red de Lavapi¨¦s y el colectivo A pie, una organizaci¨®n fundada hace siete a?os, casi por obligaci¨®n, como dicen ellos, 'dada la situaci¨®n que se viv¨ªa colectivamente por la imposibilidad de despalzarse andando por las calles de la ciudad'. Las casi 200 personas que forman este colectivo est¨¢n empe?adas en que los pol¨ªticos introduzcan en sus agendas o programas al peat¨®n. Y cuentan en su historia con logros tan importantes como una serie de campa?as peatonales, que culminaron con la creaci¨®n del paso para que crucen los viandantes en la glorieta de Cibeles, a la altura del Banco de Espa?a.

Y por ¨²ltimo La Fiambrera Obrera, una asociaci¨®n a la que uno de sus responsables, Jordi, define como 'un colectivo de arte pol¨ªtico y bromas', aunque, bromas aparte, sus trabajos han llegado fuera de nuestras fronteras y ellos acuden con bastante frecuencia a impartir cursos de arte social a Miami, Austria, San Francisco o Barcelona.

Ellos son los que han creado estas pegatinas para coches, de las que hay dos modelos: uno de gran tama?o y otro m¨¢s discreto que es una copia exacta de los de la verdadera Inspecci¨®n T¨¦cnica de Veh¨ªculos (ITV). Adem¨¢s, una prueba de la seriedad del problema es que en la primera tirada se han editado nada menos que 500 pegatinas. Piensan los responsables de la Inspecci¨®n Peatonal de Veh¨ªculos que una buena parte de estos adhesivos ir¨¢n a parar a veh¨ªculos que no pertenecen al barrio, que tienen que venir a solucionar una gesti¨®n y dejan el coche como pueden. Porque los vecinos de Lavapi¨¦s tienen muy claro que para aparcar el coche tienen que irse m¨¢s all¨¢ de la glorieta de Embajadores. O pagar 300 euros por una plaza de garaje.